Una decena de diputados rompen la disciplina de voto en la elección de los nuevos miembros del TC

El socialista Odón Elorza ha hecho público que no votaría a Enrique Arnaldo, propuesto por el PP

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El diputado del PSOE Odón Elorza, al Congreso

MadridUna decena de diputados han roto la disciplina de voto en la votación de los nuevos miembros del Tribunal Constitucional y el Tribunal de Cuentas. Han votado 249 diputados, del PSOE, el PP, Unidas Podemos, el PNV y algún minoritario. Los tres partidos que formaban parte del acuerdo sumaban 243 y la candidatura de Enrique Arnaldo ha salido con 232 votos, de forma que hay once parlamentarios que han roto la disciplina de voto para el polémico candidato del PP al tribunal de garantías. Concepción Espejel ha sido escogida con 237 votos y Juan Ramón Sáez e Inmaculada Montalbán con 240, de forma que hay tres diputados que han tumbado el acuerdo global. La votación era telemática y secreta, pero el diputado del PSOE Odón Elorza ya ha anunciado públicamente que rechazaba la candidatura de Arnaldo. En cuanto a las votaciones del Tribunal de Cuentas, los aspirantes han obtenido 239 votos -excepto José Manuel Otero, 238- y 10 lo han hecho en blanco.

100 diputados no han participado en la votación de los nuevos miembros del Tribunal Constitucional y el Tribunal de Cuentas este jueves en el Congreso, como señal de protesta por el pacto entre el gobierno español -PSOE y Unidas Podemos- y el PP para repartirse los cargos que estaban pendientes de renovación. La candidatura de Enrique Arnaldo para el tribunal de garantías, a propuesta de la formación de Pablo Casado, ha centrado la polémica, pero todos los partidos que no han votado lo han hecho porque, de nuevo, las fuerzas del bipartidismo han cerrado un acuerdo a espaldas del resto de formaciones. El rechazo al procedimiento ha unido a grupos de izquierdas, soberanistas y también Cs y Vox, mientras que la nota discordante dentro de los partidos de la coalición la han marcado los díscolos que se han desmarcado del acuerdo.

Los partidos soberanistas han escenificado su protesta de manera conjunta con una fotografía en los pasillos del Congreso y una comparecencia ante los medios. Había representantes de ERC, Junts, PDECat, EH Bildu, la CUP y el BNG. Ninguno de estos partidos ha votado y, en el caso de los republicanos, los independentistas vascos y el PDECat, no han aprovechado su turno de intervención. "La mejor manera de protestar es abandonar el pleno", ha asegurado Gabriel Rufián, portavoz de ERC. Otros sí han intervenido, como Josep Pagès, que en nombre de Junts ha preguntado a Unidas Podemos por su "coherencia". Las explicaciones a la formación violeta han sido el principal mensaje de los partidos soberanistas.

También Vox ha metido el dedo en la llaga y ha tratado de ridiculizar al diputado de Unidas Podemos Antón Gómez Reino después de su intervención: la bancada ultra lo ha aplaudido al grito de Sí se puede. El parlamentario gallego ha dejado claro en su discurso que no defendía el voto favorable a personas como Arnaldo y Concepción Espejel -"se podría decir que son dirigentes del PP sin carné", ha aseverado-, sino que Unidas Podemos cierra filas con el acuerdo para "acabar con el secuestro de los órganos constitucionales y defender la democracia de quien la quiere desestabilizar".

A pesar de la posición mayoritaria del grupo, un mínimo de dos diputadas de Unidas Podemos no han votado a Arnaldo: Gloria Elizo y Meri Pita. Este miércoles publicaron un artículo en El Periódico de España en el que consideraban que "el precio a pagar en términos políticos de regeneración democrática y sociales, de construcción de ciudadanía, es sencillamente inasumible". "Cada voto afirmativo [a Arnaldo] es una ignorancia deliberada", afirmaban. En un mensaje en Twitter, Elizo ha afirmado: "Sigo creyendo que bastan pequeños gestos de coherencia, aislados actos de dignidad, para provocar grandes cambios". A su vez, Pita asegura que ha votado "en consecuencia y en conciencia" con el artículo.

En el PSOE también se ha desmarcado de las instrucciones de la dirección el diputado vasco Odón Elorza, que la semana pasada en la comisión de nombramientos desnudó a Arnaldo con 17 preguntas que cuestionaban su idoneidad para el cargo. La dirección del grupo parlamentario designó a otro portavoz para el debate en el pleno y Elorza no ha apoyado al candidato propuesto por el PP "en defensa del prestigio y la dignidad de las instituciones del TC y el Congreso". El PSOE ha anunciado que estudiará si toma medidas contra Elorza, pero habrá que ver si hay otros díscolos en las filas socialistas. La dirección del grupo había obligado a sus diputados a comunicar su voto, de forma que podrá saber si alguien más ha desobedecido.

PSOE y PP se emplazan a renovar el CGPJ

Los únicos que han defendido el acuerdo han sido los portavoces del PSOE, Francisco Aranda, y del PP, Vicente Tirado. Los dos han apelado al buen funcionamiento de las instituciones y a la "estabilidad" del Estado. Después de criticar a aquellas formaciones que han abandonado el hemiciclo apelando a la "dignidad", el diputado del PSC ha tendido la mano a la formación de Pablo Casado para proceder a la renovación del Consejo General del Poder Judicial, una vez ya se ha dado un primer paso con el TC y el Tribunal de Cuentas. Antes, Tirado también ha apostado por desbloquear el órgano de gobierno de los jueces, a pesar de que la situación sigue encallada.

Las personas escogidas han sido Enriqueta Chicano, Dolores Genaro, Isabel Fernánez, Diego Íñiguez, José Manuel Otero y Miguel Ángel Torres para el Tribunal de Cuentas; Enrique Arnaldo, Concepción Espejel, Juan Ramón Sáez e Inmaculada Montalbán para el Tribunal Constitucional; y Ángel Gabilondo y Maria Teresa Jiménez Becerril como Defensor del Pueblo y su adjunta primera.

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