ERC y el PSC certifican el inicio del fin del Hard Rock
Los republicanos presentan una ley para acabar con los beneficios fiscales del casino, como habían intentado los comunes la pasada legislatura
BarcelonaEl proyecto del Hard Rock fue el tropiezo definitivo para que Pere Aragonès adelantara las elecciones la pasada legislatura. ERC fue incapaz de convencer al PSC para que renunciara al proyecto y, con el macrocasino sobre la mesa, los comunes se desmarcaron definitivamente de los presupuestos. Pero todo ha cambiado después de las elecciones de mayo. Ahora es el PSC quien gobierna y el Hard Rock ha pasado a segundo plano para los socialistas. Este miércoles ha llegado el inicio del adiós definitivo del proyecto. En la sesión de control en el Parlament, los republicanos anunciaron la presentación esta misma semana de una proposición de ley para eliminar los beneficios fiscales del casino y el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, expresó su apoyo. Todo ello estaba acordado de entrada, ya que fue una de las condiciones de los republicanos para investir a Isla.
Si los promotores del Hard Rock siguen interesados en instalar su macrocomplejo de ocio junto a Port Aventura saben que tendrán que pagar un impuesto sobre el juego del 55%, y no del 10%, como se va acordó en el 2014 también en sede parlamentaria, entonces con el apoyo de CiU y el PSC. El Govern preveía introducir el cambio en la ley de acompañamiento de los presupuestos, pero como de momento se alarga la tramitación de las cuentas, se ha optado por esta nueva fórmula, con ERC tomando la iniciativa en forma de proposición de ley. El presidente del grupo parlamentario de los republicanos, Josep Maria Jové, lo ha avanzado en el pleno e Isla se ha puesto bien: "Lo que mi grupo hará es cumplir los compromisos, cumpliremos los compromisos, éste y todos", ha asegurado, comprometiéndose a que salga adelante la proposición si va en la línea de lo anunciado.
"No tiene razón de ser, este beneficio fiscal", ha continuado el presidente, que la pasada legislatura lo veía de otra manera. Isla no se ha centrado concretamente en el Hard Rock, pero ha explicado que "los proyectos deben evaluarse uno a uno, pero ninguno puede escapar de una fiscalidad justa". Jové recalcó que el modelo de país del macrocasino es "incompatible" con "el modelo de ERC", que "nada tiene que ver con proyectos que aumentan la precarización".
La pasada legislatura los comunes presentaron una propuesta prácticamente calcada para eliminar los beneficios extraordinarios que se preveían para el Hard Rock, pero el PSC se mostró frontalmente en contra, defendiendo que este proyecto sería positivo para el Camp de Tarragona . Una posición que han votado repetidamente en sede parlamentaria, de la mano de Junts y también del PP.
El detalle de la supresión
Lo que se eliminará es la modificación ad hoc de hace una década que se introdujo para facilitar el proyecto y la creación de "nuevos puestos de trabajo", calificada de "privilegio fiscal" por los republicanos porque permitía que el Hard Rock pagara sólo un 10% de impuestos sobre los ingresos provenientes del juego. Por el contrario, la tributación común para los casinos en Catalunya va del 20% –en el caso de los más pequeños– a un máximo del 55%, dependiendo de los ingresos. Sin excepción para el macrocomplejo, queda sin oxígeno y destinado a morir. También se prevé cargarse los artículos que habilitaban a las empresas gestoras del casino a ofrecer crédito a los clientes –letra pequeña que aún deben revisar los socialistas–, así como una tributación específica sobre la tasa turística.
Según Esquerra, el gran casino y complejo de ocio asociado "no se adecua a las necesidades del territorio" y el hecho de ponerle freno, pese a que ya llevaba años parado, pendiente de informes administrativos, supone sacar " la alfombra roja que la sociovergencia desplegó", en palabras de Jové. Los republicanos se atribuyen el mérito de haber roto esta alianza en torno a un proyecto que, de hecho, tenía el apoyo mayoritario en el Parlament –de los socialistas en Junts, PP y Vox–. Con las negociaciones de los presupuestos de la Generalitat por ahora estancadas a la espera del congreso de ERC, la proposición de ley registrada por lectura única adquiere importancia porque, según los cálculos de los republicanos, podría prosperar "en pocas semanas". Fuentes de la formación también apuntan que siguiendo esta vía se evitarán las indemnizaciones que advirtieron a los promotores del casino porque la acción la toma el poder legislativo y no el Gobierno deteniendo su tramitación "de forma arbitraria", en alusión a la petición de los comunes la pasada legislatura.