Felipe González y la teoría de los 'hijos de putin'
El expresidente español participa en una conferencia sobre liderazgo político con María Dolores de Cospedal

MadridExplica el ex número 2 del PP María Dolores de Cospedal que el expresidente Felipe González acepta la propuesta de impartir una conferencia en el marco de su curso sobre liderazgo político porque, actualmente, existe "escasez de liderazgos". Lo introduce recordando una cita suya: "Hay líderes que tienen principios, pero no ideas; otros que tienen ideas, pero no principios; y no son pocos los que no tienen ni principios ni ideas. Deberíamos identificar a los que tienen principios e ideas". A lo largo de la conversación que mantienen los dos exdirigentes –una del PP, la otra del PSOE– no aparecerá ningún nombre que reúna a ambas virtudes, sino que González prefiere hablar de los "alocados" [disparatados]. Cuando el expresidente español teoriza que un líder es aquel que tiene un proyecto con el que se compromete "de forma no mercenaria", se imagina que está a punto de empezar una tarde de críticas feroces a Pedro Sánchez –en anteriores ocasiones González ha cuestionado un ejercicio del poder "mercenario" por parte del actual jefe del ejecutivo del Estado.
Pero no. Los dardos en Sánchez son más implícitos y no se pone de ejemplo a España cuando se habla de "retrocesos de la democracia" o de "regímenes con apariencia de democracia que son autocracias o directamente dictaduras". Sobre todo se refieren a Venezuela y Nicolás Maduro, a quienes hoy [ayer para el lector] el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, no ha querido calificar de dictador. González le llama "pájaro", "grande, grande, grande", "valiente" [con ironía, porque dice "cobardes" a sus ciudadanos] y "tiró dictador". En este momento sí discrepa de la posición que comparten España y la Unión Europea de no reconocerlo hasta que muestre las actas de las elecciones. "No las presentará y continuará en la poltrona", lamenta, partidario de avalar a los opositores. Y se pregunta por qué España no quiere desmarcarse de la UE en este sentido y, en cambio, va por su cuenta con el conflicto en Palestina: "¿No debería ser al revés?" autocráticos sean más reconocidos que los democráticos, se pregunta Cospedal con preocupación. hijos de putin". Pese a estar resfriado y con unas décimas de fiebre, no pierde su sentido del humor. Un buen líder, según González, es aquél que tenga objetivos coincidentes con los de los intereses del país. Si, en cambio, son intereses personales, es un "sátrapa".