El Frente Polisario suspende los contactos con el Gobierno español después del giro sobre el Sáhara

MADRIDEl encuentro entre el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el rey del Marruecos, Mohamed VI, como punto culminante del giro histórico de España sobre el Sáhara ya ha tenido sus primeras consecuencias. 48 horas después de la visita de Sánchez en Rabat, el Frente Polisario ha comunicado que suspende los contactos diplomáticos con el Gobierno español. "El Frente Polisario decide suspender sus contactos con el actual Gobierno de España para desmarcarse y que pueda utilizar la cuestión saharaui en el marco de los tratos miserables con el ocupante [Marruecos]", ha explicado el movimiento saharaui través de su perfil de Twitter y en un comunicado firmado desde Bir Lehlu (Sáhara Occidental) este sábado de madrugada.

La relación entre el Gobierno español y el Frente Polisario ya se agrietó después de que el ejecutivo decidiera ponerse junto a Marruecos y apostar por su propuesta de autonomía para el Sáhara Occidental. El día en el que se hizo pública la carta de Sánchez al rey Mohamed VI dando por buena la fórmula de autonomía que propone Rabat, el movimiento saharaui ya lamentó que el Gobierno español "sucumbiera ante la presión y el chantaje de Marruecos". La imagen de este viernes del presidente español y el rey marroquí cenando en el palacio del monarca y sellando la reapertura de las fronteras, entre otras cuestiones, ha sido la gota que ha colmado el vaso.

El movimiento saharaui señala que la decisión del Gobierno español "no concuerda" con las responsabilidades que tiene el Estado ante el pueblo saharaui y las Naciones Unidas, así como con el derecho internacional (que prevé que la salida para la excolonia española tiene que ser un referéndum de autodeterminación) y critica que el apoyo de Sánchez al régimen alauí implica apoyar "la anexión del territorio del Sáhara Occidental por la fuerza y la confiscación de los derechos inalienables del pueblo saharaui a la autodeterminación y la independencia". Por todo esto, el movimiento no contempla retomar las relaciones con España hasta que "se adhiera a las resoluciones de la legalidad internacional", explica el Frente Polisario en el comunicado.

Desde el Gobierno español aseguran que "han conocido la decisión [del Frente Polisario] por los medios de comunicación", apuntan fuentes del ministerio de Asuntos Exteriores. Las propias fuentes se ciñen a decir que "España considera que el diálogo es la mejor vía para abordar las diferencias y siempre mantendrán abiertas todas las vías de interlocución", si bien la decisión de apoyar a la propuesta de Rabat no fue comunicada al movimiento que lidera Brahim Gali.

Solitud en el Congreso

Esta semana ya no había habido contactos directos entre el Frente Polisario y el PSOE para negociar sobre la iniciativa a favor del referéndum del Sáhara que se votaba en el Congreso de los Diputados, tal como explicaban al ARA fuentes de las dos partes. Sí que había habido por vía indirecta y, a pesar de que inicialmente se arrancó el compromiso de que los socialistas votaran a favor, la formación de Pedro Sánchez cambió finalmente el sentido de voto quedándose aislada en la cámara baja española.

De hecho, el giro histórico de la Moncloa sobre el Sáhara Occidental no solo ha levantado el rechazo de los representantes legítimos de la excolonia, sino también del resto de partidos en el Congreso e, incluso, del socio minoritario en el gobierno de coalición, Unidas Podemos como constató el diputado de la formación lila, Gerardo Pisarello, con un discurso muy duro hacia la bancada socialista el día de la iniciativa sobre el Sáhara. "El PSOE ha optado por autoexcluirse y apartarse de forma unilateral" de lo que era una posición consolidada en España a favor de las resoluciones de las Naciones Unidas", aseveraba Pisarello este miércoles en el Congreso.