Así funciona la auditoría de Junts sobre el acuerdo con ERC

BarcelonaEl portavoz de Junts, Josep Rius, anunció el pasado mes de marzo en una entrevista al ARA que iniciarían una “auditoría” sobre si se habían cumplido los compromisos recogidos en el pacto de Govern con Esquerra. Tres meses después se ha puesto en marcha esta evaluación y el partido asegura que próximamente lo analizará en la cúpula y la hará pública. Ahora bien, ¿cómo está organizada? ¿Quién la pilota? Los dos encargados de hacerlo son el propio Rius, por un lado, y la consellera de Exteriores, Victòria Alsina, por el otro, que coordina la intervención de los miembros del ejecutivo en esta valoración. Para hacerlo se ha establecido un cuestionario, al cual ha tenido acceso el ARA, y se han seleccionado cargos directivos del partido para que la respondan, así como los consellers del Govern sobre cuál es el grado de cumplimiento del contenido del pacto.

Se está elaborando un informe que pondrá la lupa, por un lado, en la estrategia independentista del ejecutivo, el grado de cumplimiento de las medidas sectoriales y el funcionamiento del espacios de coordinación para evitar las tensiones dentro de la coalición.

No todos los cargos responden a todos los ámbitos, sino solo aquellos en los que están implicados. En cualquier caso, los participantes escogidos son: el exilio –Carles Puigdemont, Toni Comín y Lluís Puig; la cúpula de la dirección nacional –el secretario general, Jordi Turull, y los vicepresidentes Josep Rius, Aurora Madaula, Francesc de Dalmases y Anna Erra–; la presidenta del Parlament, Laura Borràs, así como los líderes del Senado y el Congreso Josep Lluís Cleries y Míriam Nogueras; los miembros del Govern de Junts; el equipo negociador de la coalición con ERC pilotado por Jordi Sànchez, además de los coordinadores de veguería. En este cuestionario hay preguntas abiertas y otras que son afirmaciones que se tienen que puntuar. En el caso de la estrategia independentista, por ejemplo, se pide que se ponga nota del 1 al 5 al hecho de que se cerrara un acuerdo entre los partidos de la mayoría independentista en el Parlament para investir a un presidente, al hecho de que ERC y Junts llegaran a un acuerdo de coalición, que se haya abierto un proceso de negociación con el Estado, que se marcara el objetivo de recuperar un espacio de dirección estratégica entre independentistas –que por ahora no ha funcionado–, además del intento –que tampoco ha prosperado– de coordinarse en el Congreso y en el Senado.

Consecuencias

Una vez se acabe esta evaluación se hará un informe y se analizará en la ejecutiva nacional que actuará en consecuencia. Y aquí es donde se encuentra uno de los principales debates internos del partido que se jugará en la segunda parte del proceso congresual el 16 y el 17 de julio, después de elegir la nueva dirección en Argelers a principios de junio. La actual ponencia política pone sobre la mesa la opción de consultar a la militancia la salida del Govern, mientras que Turull, cuando se le ha preguntado por esta cuestión, ha matizado que esto solo pasaría si la dirección del partido considerara que tiene que haber un cambio. La clave será, pues, la correlación de fuerzas dentro de la ejecutiva.