Crisis en el gobierno español por la compra de balas a una empresa israelí

MadridFuerte crisis en el gobierno español entre los socios de coalición, PSOE y Sumar. En las discrepancias con el plan de inversiones en seguridad y defensa anunciado este martes por Pedro Sánchez se añade la compra de 15 millones de balas para la Guardia Civil a una empresa israelí. Una adjudicación que hace unos meses el ministerio del Interior se había comprometido a revertir. La vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz, ha exigido la comparecencia de Fernando Grande-Marlaska para que informe de todos los detalles de este retroceso, pero otros sectores del espacio van más allá y no descartan la ruptura de la coalición. El portavoz de Izquierda Unida en el Congreso, Enrique Santiago, ha pedido una reunión de los partidos que conforman Sumar para analizar las relaciones con el PSOE. "Todos los escenarios están abiertos. Las decisiones unilaterales tomadas por otros son las que provocan graves consecuencias", ha manifestado en rueda de prensa en la cámara baja.

Tal y como ha avanzado la Cadena SER, el ministerio del Interior ha formalizado la compra de 15 millones de balas para la Guardia Civil a una empresa israelí, pese al compromiso del gobierno español de suspender toda relación comercial con empresas de ese país. A raíz de la ofensiva de Israel sobre Gaza, el gobierno español anunció que, desde el 7 de octubre de 2023, no se acordaban nuevas exportaciones a Israel. Sin embargo, las compras continuaban: el 23 de febrero de 2024 se inició la licitación por estas balas de calibre 9x19 mm para el instituto armado español. El 21 de octubre de 2024 se adjudicó a la compañía Guardian Defense & Homeland Security SA el contrato y la SER se hizo eco de este polémico proceso al cabo de unos días. El ministerio del Interior salió al paso comunicando que iniciaba el procedimiento para rescindir el contrato y se comprometía a no comprar ni vender armas a Israel. Sin embargo, el departamento liderado por Fernando Grande-Marlaska ha acabado cumpliendo un contrato por valor de 6,6 millones de euros, siguiendo las recomendaciones de la Abogacía del Estado, que había advertido de que romper el contrato habría supuesto abonar el dinero pero no recibir la munición.

Así, el ministerio del Interior consideró menos importante mantener su compromiso de no comerciar con Israel que perder 6,6 millones de euros, una cantidad irrisoria si se compara con los 10.471 millones acordados en el plan de defensa aprobado este martes. Desde Barcelona, ​​Díaz ha denunciado que es una "vulneración flagrante de los acuerdos" adoptados de no comerciar con Israel y ha exigido una "rectificación inmediata". La ministra de Infancia y Juventud, Sira Rego, miembro de Izquierda Unida, ha ido más allá y ha pedido una auditoría completa de las relaciones comerciales con Israel desde la ofensiva en Gaza. Y es que no es la única operación que contradice la promesa del gobierno español. De hecho, Guardian Defense & Homeland Security SA es un cliente habitual y el 13 de enero la Guardia Civil ya le adjudicó el suministro de repuestos para pistolas y fusiles Ramón por valor de 15.000 euros.

Izquierda Unida presiona

Sumar ya expuso por boca del ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, sus reparos en el plan de seguridad y defensa, que contiene una inversión de 1.963 millones en equipamientos estrictamente militares. Además, critican que no pasó por la reunión de secretarios de estado del pasado jueves, sino que se llevó directamente al consejo de ministros. Dentro del espacio hay voces que viven con mayor incomodidad la alineación del PSOE con el rearme europeo, sobre todo Izquierda Unida, y ya ponen sobre la mesa decisiones trascendentales. Enrique Santiago consideró que Marlaska y la ministra de Defensa, Margarita Robles, deberían dar un "paso al lado" si no revierten el contrato con la empresa israelí. Pero, de cara adentro, Izquierda Unida también quiere abrir la reflexión sobre su papel en la coalición. "El PSOE ha abierto la mayor crisis desde que se instauró el gobierno en 2023", ha afirmado el coordinador general de la formación, Antonio Maíllo. Fuentes de Sumar achacan la posición de Izquierda Unida a enviar un mensaje a su militancia y descartan al 100% salir del gobierno.

Por su parte, fuentes de los comunes trasladan que es necesario aplicar por ley un embargo de armas a Israel. Desde Moncloa interpretan las quejas del espacio liderado por Díaz como una reacción a la fuerte presión de Podemos, que desde fuera del gobierno español está subiendo al máximo el tono contra el gasto militar. También desde Barcelona, ​​la eurodiputada Irene Montero volvió a hablar de "gobierno de la guerra". "Pedimos a la gente que vuelva a salir como hace 25 años en la calle a decir "No a la guerra" y "Somos gente de paz" hasta cambiar el rumbo militarista de este gobierno por uno de paz y uno de derechos", ha manifestado la dirigente del partido lila. Más allá de las llamadas genéricas a movilizarse, Podemos no impulsa ninguna convocatoria.