La Guardia Civil sitúa a Marta Rovira al frente de Tsunami Democràtic

BarcelonaLa Guardia Civil apunta, en un informe incorporado a la causa secreta que investiga la Audiencia Nacional, que la secretaria general de ERC, Marta Rovira, y otros altos cargos del partido estarían detrás del impulso de Tsunami Democràtic, la plataforma independentista que después de la sentencia del 1-O convocó movilizaciones masivas que incluyeron una protesta en el aeropuerto del Prat. Así se desprende de una información del digital El Confidencial confirmada por Europa Press, que asegura que Rovira se comunicaba con el nombre en clave de Matagalls. Esta investigación judicial puede dificultar el regreso de Rovira desde el exilio en Suiza, justamente cuando la causa contra ella por sedición había caído por la reforma del Código Penal y se había allanado su camino de regreso a Catalunya.

El juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena revisó su procesamiento por el 1-O después de la reforma penal y cambió la acusación de sedición por la de desobediencia, que solo está penada con la inhabilitación, abriendo la puerta a la posibilidad de que volviera sin tener que pasar por la prisión. Por otro lado, el juzgado de instrucción número 6 a cargo de Manuel García Castellón empezó a investigar Tsunami Democràtic en 2019, con el objetivo de aclarar quién había detrás y cuál era la fuente de su financiación. También se puso el foco en la aplicación móvil que la organización usaba para sus acciones de protesta. La causa es todavía secreta, a pesar de que el empresario Oriol Soler, uno de los investigados, puso un recurso al Tribunal Constitucional (TC) para levantar el secreto de sumario.

El juez añadió a esta investigación parte del caso Volhov, que investiga el presunto desvío de fondo para financiar el Procés. El ex conseller de ERC Xavier Vendrell, a quien el juez atribuye "la actividad de dirección y participación directa" de las acciones de Tsunami Democràtic, es el nexo de unión entre las dos investigaciones. Según Europa Press, la Guardia Civil recogió conversaciones telefónicas en las que los presuntos líderes de la plataforma usaban motes para dificultar que fueran descubiertos por la policía. Además de Rovira, a quien llamaban Matagalls, también hablaban de Mandela, alias de otra dirigente de ERC, Marta Molina. El ex president Carles Puigdemont recibía el apodo de Pelomocho, y habrían hecho reuniones con Xavier Vinyals, también investigado en el caso Volhov, y también con Canalla, nombre en clave del empresario Josep Campmajó. Por su parte, Vendrell recibía el apodo de Índigo y Soler de Rigoberto. El informe también apunta que la cita clave para la creación del Tsunami tuvo lugar en Ginebra en agosto de 2019. A la cita, además de Rovira, habrían asistido Puigdemont y la exdiputada de la CUP Anna Gabriel.

Marlaska insta a esperar la resolución judicial

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha abogado por esperar la investigación judicial en relación con esta información. En declaraciones a los medios, ha manifestado que la autoridad judicial es quien tiene que "referir o concluir lo que considere oportuno o conveniente en base a las investigaciones desarrolladas". Por lo tanto, tiene que evitar posicionarse sobre la cuestión.