Jordi Pujol: "Me preocupa mi legado"

BarcelonaJordi Pujol empezó a aparecer en actos públicos el año pasado, después de siete años –ahora ya son ocho– del comunicado del 25 de julio de 2014 en el que confesó que tenía dinero en el extranjero. Poco a poco volvía a salir al ruedo público y dejaba atrás los años de ostracismo asistiendo a actos relacionados con los debates más actuales en Catalunya o publicando un libro-entrevista con Vicenç Villatoro. Pero hay una cosa a la que todavía se ha resistido, dar entrevistas, a la espera de afrontar el juicio por el caso Pujol en la Audiencia Nacional. Solo ha hecho tres excepciones: con el periodista Antoni Batista en Sàpiens, explicando por primera vez su detención y torturas, con el periodista Josep Cuní el último día que presentaba el matinal Aquí Cuní en la Cadena Ser y este sábado con el periodista Roger Escapa en El suplement de Catalunya Ràdio.

El expresident Jordi Pujol ha hecho la entrevista con motivo de la muerte de la reina Isabel II, con quien pudo conversar durante su visita a Catalunya en 1988. Ahora bien, no solo se refiere a la muerte de la monarca durante la conversación, puesto que Escapa no se ha ahorrado las preguntas sobre su trayectoria, a pesar de que el expresident ha esquivado las más incómodas sobre la causa de presunta corrupción que le afecta a él y a su familia. "¿Le preocupa su legado?", "Sí, me preocupa", ha asegurado Pujol, que admite que ha hecho "cosas bien hechas", pero también otras que no le "dejan satisfecho". ¿Qué balance hace él mismo? "El día que me muera le podrá hacer una entrevista a alguien y preguntarle. Pero yo no me he muerto todavía", ha resuelto. "¿Y le preocupa la muerte?", "A mí no me gusta, pero es inevitable. La tengo presente, pero no me obsesiono".

Del legado que sí que ha querido hablar es del de la reina de Inglaterra –aseverando que se hablará muy bien de ella en los libros de historia–, por quien sentía "simpatía" por su "serenidad" y "elegancia": "Me ha sabido mal su muerte, pero de aquella manera. Ella puede decir que se ha ido habiendo cumplido con el trabajo que tenía que hacer". Desde un papel "simbólico" ha sabido reinar pero no "gobernar", ha seguido el expresident, admitiendo que no tiene claro ahora si la monarquía puede "tambalearse" o no con el nuevo rey.

Lo que sí que ha mencionado varias veces es que el Reino Unido, como Europa, es un país en "decadencia" respecto a otros países emergentes, a pesar de que todavía pueda ser puntero en ámbitos como el científico –mencionando el último avance sobre la vacuna de la malaria–. Del mismo modo, considera que Catalunya se encuentra en este contexto y además vive una "crisis política" importante. No ha apuntado cómo cree que se debería resolver esta situación, pero a su parecer suyo no significa que "tengamos que llorar por las esquinas": "Hay cosas del mundo de la cultura, la economía o la ciencia que van muy bien".

"Soy un patriota catalán"

El expresident ha rehuido responder a preguntas sobre su caso y el de su familia, pendientes todavía de juicio en la Audiencia Nacional, y lo ha hecho con su tradicional "no toca". "¿Usted ha mirado hacia otro lado?" (...) "Yo he mirado hacia muchos lados", se ha escapado en alusión a las acusaciones que pesan sobre sus hijos, sobre todo el mayor, Jordi Pujol Ferrusola. El expresidente y su familia se enfrentan a un juicio –que todavía se tiene que fijar– por organización criminal, puesto que el magistrado Jose de la Mata considera que durante décadas se enriquecieron a través de actividades corruptas.

"Yo soy un patriota catalán, quiero a Catalunya y me debo a Catalunya y haré todo lo que pueda por Catalunya", ha dicho este sábado Jordi Pujol y también se ha "reafirmado" en la opción de tener hasta siete hijos: "Fue un acto de fe y optimismo, mío y de mi mujer, hacia nosotros mismos y también hacia el país".