El PSC paga el sueldo de dos asesores de los comunes en el Parlament

BarcelonaEl PSC paga a dos de los asesores de los comunes en el Parlament con los fondos públicos que la cámara da a los grupos para contratar asesores a su servicio. Según ha podido confirmar el ARA, hay dos cargos de confianza de Catalunya en Comú que figuran dentro de la plantilla del PSC en la cámara desde mediados de julio, pero que realizan tareas para el grupo parlamentario que encabeza Jéssica Albiach. Ambos estaban a sueldo del grupo de los comunes la pasada legislatura, pero pasaron (formalmente) a engordar las filas de los cargos socialistas en el Parlament a principios de julio, según recoge el Boletín Oficial del Parlamento de Cataluña del 17 de julio.

Este fue uno de los acuerdos alcanzados por el PSC y los comunes en el marco de la negociación por la mesa del Parlament, según reconocen fuentes de ambas partes, aunque en su momento no se hizo público. Tras las elecciones, el PSC y los comunes trabajaron por un pacto de izquierdas que diera la presidencia de la cámara a ERC, pero finalmente esta negociación no fructificó y Josep Rull (Juntos) fue elegido presidente en una mesa con mayoría independentista. Sin embargo, los socialistas mantuvieron el compromiso de ceder parte de sus fondos a los comunes, que les votaron en segunda vuelta para presidir la mesa. La decisión se hizo efectiva cuando ambos grupos ya estaban negociando el acuerdo de investidura, pero ambos la desvinculan del pacto al que acabaron llegando para investir a Salvador Illa.

Fuentes parlamentarias explican que no ha habido ninguna decisión de la mesa de la cámara para validar esta operación, que apuntan a que es inédita en el Parlament.

¿Está regulado?

A preguntas del ARA, los comunes y el PSC niegan que esta cesión de asesores contravenga el Reglamento o el Estatuto del régimen y gobierno interior del Parlament. Ahora bien, el artículo 5.1 de las Normas reguladoras del personal eventual del Parlamento de Cataluña establece que los asesores cumplen "funciones de asistencia, asesoramiento o apoyo al grupo o subgrupo parlamentario", y no hay ninguna previsión específica que habilite a los grupos a cederlos. El reparto de los asesores se realiza, de hecho, en función de los resultados electorales. "La existencia de este personal se fundamenta en las necesidades de los miembros del Parlamento de disponer de una asistencia directa y de confianza, según su adscripción política, adicional a la que pueden obtener del personal funcionario de la cámara", dice el acuerdo de la cámara por el que se aprobaron estas normas.

En contra de ello, tanto el PSC como los comunes argumentan que ésta es una operación similar a la que se impulsó para que la CUP tuviera grupo propio a través de la cesión temporal de un diputado para que llegaran a los cinco que están establecidos como mínimo por tener grupo propio y no tener que formar parte del grupo mixto (que los cuperos compartían con Aliança Catalana). Sin embargo, en ese caso fue el pleno del Parlamento quien lo acordó modificando el Reglamento, mientras que la cesión de asesores deriva de un pacto cerrado entre dos partidos que no han promovido ningún cambio normativo en las distribuciones del personal eventual del Parlament.

La asignación de los recursos públicos de la cámara a cada grupo para que contrate a personal no es discrecional: se hace por acuerdo de la Mesa ampliada del Parlamento –donde hay representantes todos los partidos– de forma proporcional a los resultados electorales. De hecho, esto fue lo que hizo que los comunes, que descendieron de 8 a 6 diputados, pasaran de tener 225.304,625 euros al año para gastar en asesores a 172.588,57 euros después de los comicios del 12 de mayo. Pese a la disminución en la asignación, el pacto con el PSC ha hecho que puedan seguir teniendo a cinco asistentes que apoyan las tareas diarias del grupo parlamentario.

Los dos asesores

Los dos asesores adscritos al PSC pero que trabajan para los comunes ya estaban al servicio del grupo parlamentario que encabeza Albiach la pasada legislatura. Uno de ellos también forma parte del consejo nacional de Catalunya en Comú, mientras que el otro fue concejal de Iniciativa en Sant Cugat antes de pasar a trabajar en el ámbito parlamentario. Ambos asesores son de categoría 3: esto significa que su sueldo es de 47.070 euros brutos anuales. Fuentes de los comunes justifican la operación para que estos dos cargos, que consideran técnicos, pudieran mantener las mismas condiciones laborales que tenían antes de las elecciones y niegan que el sueldo salga de los fondos asignados al PSC pueda afectar a su independencia política.

Ahora bien, el grupo podía haber optado por mantener a los dos asesores en plantilla rebajando lo que cobran el resto de colaboradores que tiene en el Parlament, porque el sistema vigente no establece cuánto debe cobrar cada asesor: da a los grupos un dinero que puede repartir como consideren, siempre que no bajen de 31.379,74 euros al año y no superen los 78.449,35 por persona.

La situación en el Congreso

La situación es inédita en el Parlamento, pero los comunes argumentan que se refleja en lo que ocurre en el Congreso de los Diputados. En la Cámara baja española, por ejemplo, el PSOE ha cedido hasta seis asistentes que han ido a parar, entre otros grupos, al de ERC, según fuentes socialistas. Sin embargo, hay una diferencia respecto a la situación catalana. En el Congreso fue una decisión de la mesa la que autorizó esta operación. Y otra diferencia: el PSOE renuncia formalmente a estos asesores –no podrán volver a disponer de ellos durante la legislatura– y pasan a estar integrados en los grupos parlamentarios a los que se han cedido.

Desde ERC afirman que tienen menos técnicos en el Congreso que la legislatura anterior –entonces tenían 13 diputados y ahora 7–, pero la realidad es que, tal y como se desprende del Boletín Oficial del Congreso, la bancada republicana ha hecho 9 nombramientos. La relación de asistentes es de uno por cada diputado del grupo, y una persona más para los grupos pequeños como coordinador de grupo, por lo que esto evidencia que el PSOE le cedió asesores. Además, hay otros dos asesores de los republicanos que corresponden a los presidentes de comisión –Inés Granollers, de Industria y Turismo, y Jordi Salvadó, de Juventud e Infancia–. En total, pues, once.

El personal técnico puede ser de varias categorías: la más baja es la de asistente, que es la que cumple esta relación de 1 a 1 con los diputados. Y la más alta es la de asesor: nombrar a un asesor equivaldría a dos asistentes. Por ejemplo, Junts ha optado por tener cuatro asesores –mejor pagados– en lugar de los 8 que hubieran tenido si hubieran optado por los de menor categoría, informa Ot Serra.