¿Se puede reabrir la causa por el ataque terrorista de la Rambla?
La familia del niño fallecido de Rubí se plantea querellarse contra el ex director del CNI tras las declaraciones de uno de los condenados
MadridLas afirmaciones de uno de los condenados por el 17-A, Mohamed Houli, que ha asegurado que el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) conocía las "intenciones" del imán de Ripoll, Abdelbaki Es Satty, no han sorprendido a los abogados de una de las acusaciones del juicio. Concretamente, la de los padres de Xavi, el niño de 3 años fallecido en la Rambla, que durante el procedimiento intentó que se investigara si los servicios secretos estaban detrás de los ataques o, al menos, si cometieron una negligencia grave. "Lo estamos estudiando y viendo cómo lo enfocamos", afirma en el ARA el letrado Jaume Alonso-Cuevillas, que adelanta la intención de presentar una nueva querella contra el responsable del CNI en ese momento, Félix Sanz Roldán, y sus responsables políticos. Si sería contra el expresidente Mariano Rajoy, la ex ministra de Defensa María Dolores de Cospedal o el ex ministro del Interior Juan Ignacio Zoido, no está todavía decidido. Cuevillas cree que no hay base suficiente para condenar a nadie, pero sí para abrir una investigación.
Juntos ha acompañado desde el Congreso esta teoría, según la cual, además, no estaría acreditado que Es Satty hubiera muerto en la explosión de Alcanar del 16 de agosto del 2017, aunque se encontró una oreja suya entre los escombros. La formación de Carles Puigdemont ha encontrado en esta comisión de investigación del Congreso la fórmula para indagar más en lo que quedó fuera del juicio. Prácticamente no se abordó la figura del imán ni sus vínculos con el CNI, pese a que en el sumario ya constaban las visitas de agentes secretos y de la Guardia Civil en el 2014 en la cárcel de Castellón, donde cumplía una condena por un caso de tráfico de drogas. De hecho, documentos desclasificados aportados a la comisión de la cámara baja han dado más información sobre estos contactos, si bien reflejan que el CNI va descartar Es Satty como posible confidente y le perdió la pista porque no percibía que estuviera radicalizado. "Tenían la célula monitorizada", asegura, por el contrario, el abogado Cuevillas, quien también recuerda que el excomisario José Manuel Villarejo insinuó que en el CNI "se le fue de las manos". El pasado diciembre, en su comparecencia en la comisión, Villarejo dijo que los servicios secretos habrían podido "evitar" los atentadospero que ni mucho menos los provocaron.
El letrado apunta a que la intención no es reabrir la causa, que incluso contó con la confirmación de la sentencia al Tribunal Supremo, sino abrir una nueva. Por la materia que trata debería estar en la Audiencia Nacional, pero si se incluye a Zoido en la querella, que es eurodiputado, debería estar en el Supremo por su condición de aforado. El objetivo, añade, es "que se investigue lo que no quiso investigarse", siguiendo la misma línea que ha llevado a los padres de Xavi a elevar el caso al Tribunal Europeo de Derechos Humanos para forzar al Estado a esclarecer todos los hechos. La estrategia de Cuevillas difícilmente contará con la anuencia de la Fiscalía, que durante el juicio del 17-A ya no dio pábulo a estas tesis. Fuentes del ministerio público conocedoras del caso califican de "tontería" lo que afirmó Houli en el Congreso y creen que "no tiene ningún sentido" intentar reabrirlo. Atribuyen las manifestaciones a que el condenado esté en prisión.