Sánchez anuncia ahora que España enviará armas a Ucrania y enfada a Unidas Podemos
La ministra lila Ione Belarra denuncia que la medida "nos lleva a un escenario incierto de conflicto mundial"
MadridEl presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, ha anunciado este miércoles en el Congreso de los Diputados que España "entregará a la resistencia ucraniana material militar ofensivo", además del que se vehicula a través del fondo europeo por la paz. Sánchez ha querido dejar atrás la polémica sobre el envío de armas, según ha dicho, "para que nadie cuestione el compromiso de España con Ucrania", pero no lo ha conseguido porque sus socios de gobierno no han tardado ni cinco minutos en mostrar su discrepancia.
La ministra de Derechos Sociales y secretaria general de Podemos, Ione Belarra, ha dicho que "contribuir a la escalada bélica no resolverá antes el conflicto y nos lleva a un escenario incierto de conflicto mundial". Belarra ha lamentado que Sánchez no haya hecho "referencias a las vías diplomáticas para buscar una solución dialogada". "[El envío de armas] no es la medida más eficaz para que el conflicto acabe cuanto antes mejor". Desde la tribuna, el portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique, ha insistido que el envío de armas "es un error porque no es eficaz".
No obstate, la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, ha dejado claro que "el presidente Sánchez cuenta con todo nuestro apoyo", evidenciando así que tampoco hay unidad dentro del espacio lila sobre esta cuestión y que, en todo caso, la estabilidad del ejecutivo no peligra. En el turno de réplica, Sánchez también ha quitado hierro a las discrepancias internas y ha naturalizado que haya "matices" entre los diferentes grupos, a pesar de que ha dejado claro que considera que Unidas Podemos "se equivoca en esta cuestión, porque Ucrania tiene estatus de país agredido". "El debate sobre la entrega de armas está superado después de la decisión europea de usar el fondo de la paz", ha defendido Sánchez.
Y es que antes de hacer el anuncio, el presidente español había defendido que la manera correcta de hacerlo, tal como había dicho el Alto Representante para la Política Exterior Europea, Josep Borrell, era a través de este mecanismo europeo, que prevé enviar material ofensivo a Ucrania por valor de 450 millones de euros. "Y España es el cuarto país que más recursos aporta a este fondo", ha remarcado. Finalmente, sin embargo, el ejecutivo rectifica y se alinea con la mayoría de países europeos, que han decidido enviar armas a Ucrania más allá del fondo. En cuanto a las sanciones, el presidente español también ha anunciado que España reclamará en el marco de la OCDE y la UE que Rusia sea considerado un "paraíso fiscal", un paso más en la escalada de sanciones contra el régimen de Vladímir Putin.
Aplausos al representante ucraniano
El presidente español ha iniciado su intervención dirigiéndose directamente al ministro consejero encargado de negocios de la embajada de Ucrania en Madrid, Dmitro Matiuschenko, que estaba en la tribuna de invitados. Sánchez ha lamentado las víctimas y el dolor del pueblo ucraniano en medio de los aplausos de toda la cámara. En su discurso, ha dejado claro que la intención de Putin no es solo Ucrania, sino "poner en cuestión la arquitectura de seguridad europea". "Putin no quiere una potencia geopolítica a sus puertas que representa unos valores opuestos a los del autoritarismo que él practica", ha dicho Sánchez.
En su intervención, el presidente español ha hecho un llamamiento al resto de formaciones políticas para que haya un "pacte de unidad sobre la respuesta a la invasión y para mitigar los efectos económicos de la guerra". Sánchez ha advertido que las sanciones aprobadas contra Rusia tendrán un fuerte impacto en la economía española. "Las medidas tendrán un coste y exigirán sacrificios" ha dicho, y ha señalado algunos sectores que pueden resultar afectados: las exportaciones a Rusia, las inversiones de empresas españolas en aquel país y el flujo de turistas rusos a España. Pero también el alza de precios de la energía y de materias primas, que acabará repercutiendo en "el poder adquisitivo" de las familias. "Hay que pagar con este sacrificio el que los ucranianos pagan con su vida".
En este sentido, el líder socialista ha avanzado que su ejecutivo trabaja en un plan nacional sobre el impacto de la guerra en diferentes ámbitos, como el energético, el empleo, el turismo o el sector primario. También ha anunciado la prórroga de las medidas aprobadas para reducir el precio de la factura de la luz hasta el 30 de junio y ha pedido a la oposición que el pacto incluya "quitar del debate político" la gestión de los fondos europeos, muy cuestionada por el PP. Finalmente, ha detallado inversiones concretas para acelerar la "transición energética", como por ejemplo 500 millones para fomentar el autoconsumo, un plan de rehabilitación energética de los edificios de la administración general del Estado y 1.000 millones para planes como el almacenamiento de hidrógeno.
Gamarra sustituye a Casado
Por parte del PP, la encargada de dar la réplica ha sido la nueva coordinadora general, Cuca Gamarra, mientras que el aún presidente del partido, Pablo Casado, no ha acudido al Congreso. Gamarra ha celebrado el cambio de Sánchez en cuanto al envío de armas. "Damos apoyo a su rectificación. Y si sus socios le fallan, recorreremos juntos este camino", le ha prometido. Gamarra ha denunciado que Sánchez era hasta ahora el líder europeo "con un compromiso más bajo con Ucrania", un país al cual "ha dejado solo". La portavoz popular ha ofrecido sus votos para sacar adelante medidas que no tengan el apoyo de sus socios de gobierno y de investidura en una intervención muy aplaudida por la bancada popular.
El líder de Vox, Santiago Abascal, también ha hurgado en la división entre los socios del gobierno subrayando que muchos diputados y ministros de Unidas Podemos no habían aplaudido el anuncio de Sánchez de enviar armas a Ucrania. "Los suyos socios son cómplices directos de esta agresión y son los aliados internacionales de Vladímir Putin", ha dicho Abascal, que ha vuelto a pedir la dimisión de Sánchez. Echenique, por el contrario, ha contestado que Vox son "los emisarios de Putin en España".
La posición de los independentistas catalanes
Por su parte, el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, ha defendido que los ucranianos "tienen el legítimo derecho a la autodefensa" y ha reclamado que España lidere en Europa "la persecución del dinero de los oligarcas rusos" y también la acogida de refugiados. En su discurso, sin embargo, ha denunciado que antes de Ucrania Rusia ya había masacrado a los chechenos en medio del silencio internacional y ahora se ignora la tragedia de los curdos "porque Turquía pertenece a la OTAN". Para Rufián, la vía económica será más efectiva para parar a Putin que el envío de armas anunciado por Sánchez, con el cual ha mostrado su "desacuerdo" en los pasillos del Congreso.
La portavoz de Junts, Miríam Nogueras, también ha defendido que hay que hacer frente a Putin porque "la paz no solo se tiene que proclamar sino que se tiene que defender desde todos los organismos, la UE y también la OTAN". "Basta de desmarcarse, es hora de mojarse", ha dicho Nogueras dirigiéndose al representante diplomático ucraniano y proclamando en catalán el apoyo "a todos los ciudadanos ucranianos y su lucha". El portavoz del PDECat, Ferran Bel, ha sido explícito al mostrar su apoyo al envío de armas a Ucrania y también ha invitado a Sánchez a adaptar el presupuesto a la nueva realidad económica. Por su parte, el portavoz de la CUP, Albert Botran, ha hecho un discurso muy crítico con la OTAN y Estados Unidos, a quien ha acusado de "querer militarizar Ucrania y toda la región".
En su réplica, Sánchez ha agradecido el tono de Rufián y ha compartido con él que "hay que ir más allá de la pancarta" para buscar soluciones estructurales a largo plazo para afrontar crisis como la de Ucrania. En cambio ha mostrado su absoluta discrepancia con la intervención de Botran. Al final de la sesión, la bancada socialista y la del gobierno, también Yolanda Díaz, han aplaudido la intervención de Sánchez. La presidenta del Congreso, Meritxell Batet, se ha dirigido finalmente a Matiuschenko para recordarle que "su libertad es la libertad de Europa".
