Toque de atención de Díaz en el PSOE: "El acuerdo está muy lejos"

MadridSuperada la fase de la investidura fallida de Alberto Núñez Feijóo, llegó el momento de Pedro Sánchez y, por primera vez, alzó la voz Sumar. Se ha dado por supuesto que habrá un entendimiento entre el PSOE y la formación liderada por Yolanda Díaz para reeditar un gobierno de coalición, pero la vicepresidenta segunda del gobierno en funciones ha comparecido este lunes para dar un toque de atención a los socialistas. "Hoy por hoy estamos muy lejos", ha advertido desde la sala de prensa del Congreso, tras trasladarle a Felipe VI en el marco de la ronda de consultas que los 31 votos de Sumar en Sánchez no están garantizados.

Hay preocupación en el espacio que lidera Yolanda Díaz. Sospechan que la ambición del PSOE no vaya más allá de "consolidar" al gobierno actual, en lugar de impulsar nuevos avances sociales y económicos. La también ministra de Trabajo ha explicitado que quiere incrementar el salario mínimo, abordar la financiación autonómica y que existen diferencias con el socio mayoritario en relación a vivienda, fiscalidad y sobre la reducción de la jornada laboral. No ha hecho más concreciones ni tampoco ha situado líneas rojas. Por el contrario, se ha querido mostrar "optimista" que el acuerdo llegará.

De hecho, la semana pasada Díaz dio por hecho que se repetirá el gobierno de coalición, por lo que fuentes de la Moncloa relativizaban este cambio de discurso. Creen que es lógico en el momento político actual –el de la formalización de la candidatura de Sánchez para la investidura– que los potenciales socios hagan valer su cuota de poder y Sumar no lo había hecho hasta ahora. Fuentes del equipo de Díaz sostienen que se había mantenido la discreción en las negociaciones, pero ahora es momento de empezar a advertir que, si no hay avances, no se dará un “cheque en blanco” a Sánchez.

“No estaríamos en un gobierno por no hacer nada”, insisten desde el entorno de la también ministra de Trabajo. ¿Quiere esto decir que Sumar se plantea investir a Sánchez pero quedarse fuera? El equipo de Díaz no se moja, anota que no se está hablando del organigrama del gobierno, sino de los contenidos, pero no es éste el planteamiento. De hecho, El Periódico de España publicaba este lunes que Sumar reclama cuatro ministerios al PSOE, entre ellos Trabajo, Derechos Sociales, Sanidad y las competencias en vivienda. La líder de Más Madrid, Mónica García, y la exalcaldesa de Barcelona, Ada Colau, serían las candidatas a asumir estas carteras, según dicho medio. En cambio, Sumar estaría dispuesta a devolver de nuevo Igualdad al PSOE, lo que permitiría a Díaz justificar ante Podemos que no cuente para nada con la actual ministra, Irene Montero.

En la formación lila siguen reclamando su propio papel dentro de Sumar y en los últimos días han defendido que les correspondería liderar un ministerio, dado que se han quedado fuera de la dirección del grupo parlamentario en el Congreso. Nacho Álvarez, todavía en Podemos, podría ser uno de los nombres elegidos por Díaz, aunque ya no forma parte del núcleo dirigente del partido lila, sino que ya prácticamente se le considera más cercano a Sumar. Actualmente es el secretario de estado de Derechos Sociales, número 2 de Ione Belarra, pero podría pasar a ser el titular del ministerio. Quien ya ha anunciado su renuncia a los cargos orgánicos de Podemos es Alejandra Jacinto, ex candidata de la formación lila en las elecciones del 28-M en la Comunidad de Madrid, en las que se quedó a las puertas de entrar en la Asamblea de Madrid. Jacinto, que durante la campaña fue portavoz de Sumar en materia de vivienda, explicó en un comunicado que vuelve a su faceta de abogada.

ERC y el referéndum

Podemos también discrepa de Sumar por estar criticando a Junts y ERC por insistir en el referéndum. No se puede pedir que "renuncien" a sus planteamientos, ha defendido su coportavoz, María Teresa Pérez, sobre los independentistas. Los republicanos mantienen que la consulta debe formar parte de las negociaciones, si bien la número 2 del partido, Marta Rovira, ha sido este lunes menos tajante que lo que decía la propuesta de resolución impulsada por Junts y ERC que el viernes aprobó el Parlament y que provocó un pequeño choque con el PSOE.

En el texto decía que las fuerzas catalanas "no apoyarán una investidura de un futuro gobierno español que no se comprometa a trabajar para hacer efectivas las condiciones para la celebración del referéndum". En cambio, en una entrevista en Catalunya Ràdio, Rovira ha dicho: "Debemos poder dialogar sobre cómo se puede votar en Catalunya". La dirigente de ERC ha subrayado que se trata de que el PSOE se comprometa a lo mismo que en el 2019: una mesa de negociación en la que se pueda hablar de todo. Díaz se ha limitado a repetir la consigna de la "discreción y responsabilidad" y no ha querido abordar nada de la cuestión que afecta a Catalunya.

La amnistía es la principal pata de la carpeta catalana y cuenta con el rechazo de la derecha parlamentaria . También de Coalición Canaria, que la semana pasada votó favorablemente de la investidura de Feijóo, pero que está abierta a apoyar a Sánchez. ¿Es una línea roja el olvido judicial del Proceso para la diputada canaria, Cristina Valido? Por el momento no. Tras visitar a Felipe VI, no quería avanzar cuestiones que todavía no estén formalmente sobre la mesa –de hecho, ha asegurado que el PSOE no se ha puesto en contacto con ella– y que deberá ser una decisión que tomen los órganos de dirección del partido.

El PNV quiere protagonismo

Otro líder político que ha pasado por la Zarzuela en el marco de la ronda de consultas es el portavoz del PNV, Aitor Esteban, aunque ha sido el lendakari, Íñigo Urkullu, quien ha enviado un mensaje de reivindicación de su partido. En una entrevista en la Cadena SER, ha avisado de que será necesario un acuerdo de legislatura con el PSOE para que Sánchez necesitará sus votos todas las veces que quiera aprobar leyes en el Congreso, y se ha quejado de una supuesta estrategia de "priorizar" EH Bildu para que los jeltzales "vean disminuida su representación". Nacionalistas e independentistas vascos mantienen su propia guerra con las elecciones en Euskadi de la primavera del próximo año en el horizonte.

La semana pasada se encargó de hurgar en esta rivalidad durante el debate de investidura el propio Feijóo, que este domingo coincidirá con Santiago Abascal en la manifestación contra la amnistía que ha convocado Sociedad Civil Catalana en Barcelona. Antes, este martes, el rey encargará a Sánchez la investidura, seis años después de su discurso contra el 1-O y con una amnistía sobre la mesa. La previsión es que la presidenta del Congreso, Francina Armengol, no ponga todavía fecha para el pleno de investidura.