Paneque en el punto de mira por Cercanías: el pleno votará su reprobación
Los comunes y la CUP proponen alargar la gratuidad de Cercanías hasta 2026

BarcelonaEl debate monográfico sobre Cercanías se cerrará el jueves con la consejera de Territorio, Transición Ecológica y Vivienda, Sílvia Paneque, en el punto de mira. Junts, Esquerra y la CUP piden su reprobación en las propuestas de resolución a votar mañana. Ahora bien, los junteros van aún más allá y también reclaman su cese. En las próximas horas los grupos deben negociar sus propuestas y habrá que ver si llegan a un acuerdo para que alguna de las peticiones de reprobación salga adelante. Se necesitaría el apoyo de los tres grupos independentistas y al menos de la bancada del PP, que ya ha dicho que votará a favor de reprobar a la consellera, al igual que Vox. Los comunes no se han pronunciado todavía al respecto.
De hecho, la única petición que lleva el grupo de Jéssica Albiach en sus propuestas de resolución es que los responsables de Adif "asuman responsabilidades políticas" si dentro de seis meses el servicio no se ha solucionado. Por el contrario, los republicanos piden directamente la dimisión del presidente de Renfe, Álvaro Fernández, y el presidente de Adif, Luis Pedro Marco. El PP, por su parte, ataca a los socialistas por el otro flanco y dispara contra el ministro de Transportes, Óscar Puente, del que pide la reprobación.
El traspaso de Cercanías
El traspaso de Cercanías es una de las cuestiones que llevan a varios grupos en sus propuestas. Tanto socialistas como republicanos defienden sus diferentes pasos para materializarlo, como que la nueva operadora entre en funcionamiento el próximo año. Esquerra, sin embargo, aprovecha para poner una nueva fecha: el 1 de julio de este año quieren que Renfe tenga hecho un inventario de los activos, recursos financieros y recursos humanos que tendrán que ser traspasados a la nueva operadora. En cambio, en la línea de lo que ha ido defendiendo en los últimos meses, Junts exige un traspaso "real y efectivo" de toda la red de Cercanías, Media Distancia y Avant y que la gestione "una empresa pública 100% catalana de la mano de Ifercat y de Ferrocarrils de la Generalitat".
Por otra parte, los republicanos también defienden sacar adelante un plan de formación de maquinistas y personal de mantenimiento que, llegado el momento, evite el boicot del personal de Renfe y Adif en la operación. Una medida que también defiende al PSC, que también quiere programar ya el traspaso de las líneas R1, R2 Sur, R3, R4 y R16. Se trata de un gesto de buena voluntad hacia los republicanos después de que hayan tenido que tragar un sapo que, al menos durante dos años, la nueva operadora de Cercanías sea una filial del grupo de Renfe debido a la presión de los sindicatos. En cambio, el PP pide al Ejecutivo español que detenga las negociaciones con la Generalitat por el traspaso de Cercanías.
La gratuidad de Cercanías hasta 2026
La CUP y los comunes plantean la gratuidad de Cercanías y Media Distancia al menos un año más, hasta el 2026, si ni el Estado ni el Gobierno pueden garantizar que los trenes pasen a la vez (o, incluso, que pasen). Los cuperos concretan hasta el 2026, mientras que el grupo de Jéssica Albiach defiende mantener las bonificaciones hasta que el servicio "funcione con normalidad". Ahora los usuarios pueden viajar sin coste con el abono del ministerio de Transportes, pero esta medida caducará el 30 de junio de 2025. Los socialistas, por su parte, no hacen referencia a esta cuestión en sus propuestas, pero apuestan por implementar, a partir de 2026, un sistema de "tarifa plana conjunto por Cercanías y Regionales", siempre. El PSC también defiende buscar "mecanismos" para "reducir durante el segundo semestre de 2025 la discriminación de precios por la distancia diferente de viaje" entre Regionales y Cercanías.
Sobre la mesa los grupos también sitúan propuestas para mejorar la coordinación entre las administraciones competentes, mantener informados a los usuarios de las incidencias y actualizar el Plan de Cercanías. Los comunes, por ejemplo, defienden un plan de choque para geolocalizar los trenes (y así unificar la información sobre el servicio) y también piden crear la figura de un "coordinador/a de Cercanías" que proponga el Govern y que se encargue de la ejecución de este Plan de Cercanías. El grupo de Jéssica Albiach también aprovecha para pedir al Ejecutivo que, ante esta crisis, se centre en los trenes y aparque ya los planes de ampliar el aeropuerto de Barcelona.
Por otro lado, Junts y la CUP ponen el dedo en la llaga en la desinversión histórica del Estado en Cataluña en este ámbito. De hecho, los cuperos pedirán que se constituya en el Parlament una comisión de estudio de cuánto debe el gobierno español a la Generalitat a cuenta de las obras no ejecutadas en Cercanías en los últimos años. El objetivo final es que el Estado transfiera ese dinero a Catalunya como compensación.