"Los bomberos aún no han podido entrar": al menos 4 fallecidos y 14 desaparecidos en el incendio de Valencia

Los bomberos siguen trabajando para poder entrar en el edificio que desde ayer por la tarde quema en el barrio de Campanar de Valencia. Si bien las llamas ya no son visibles desde el exterior, los equipos de emergencia siguen enfriándolo. Están utilizando drones para detectar las zonas calientes del inmueble. En la comparecencia de esta mañana, las autoridades explicaron que por el momento hay al menos cuatro muertos y 14 desaparecidos. La cifra de personas no localizadas es difícil de determinar, ya que, tal y como han explicado las autoridades, existen distintos extranjeros en el edificio que alternan estancias en Valencia con otras fuera. Esto dificulta saber si pueden estar en el edificio o no. Se espera que se actualicen las cifras una vez que los bomberos hayan podido acceder al edificio, que todavía sigue demasiado caliente por las llamas. Hay 15 heridos, 7 de los cuales son bomberos y, según ha explicado el presidente de la Generalitat Valenciana, a 6 han tenido que ingresarlos en el hospital, pero no se teme por su vida. A estas alturas, los bomberos también trabajan con drones para saber si existe riesgo de derrumbe del edificio.

El fuego se declaró ayer sobre las 17.30 horas por causas que todavía se desconocen y se propagó rápidamente por la fachada del edificio hasta consumirlo del todo. En el inmueble había 138 pisos divididos en dos bloques. "Algunos lo han perdido todo", ha explicado la alcaldesa de Valencia, María José Català. El inmueble afectado, que se construyó en el 2005, está en el cruce de la avenida del Maestro Rodrigo y la calle Poeta Rafael Alberti. Entre las personas heridas se encuentran nueve hombres de entre 25 y 57 años, cuatro mujeres de entre 27 y 81 años y un menor de 7 años. “Salvo dos mujeres que han sido dadas de alta in situ, el resto han sido trasladados a diferentes hospitales”, ha informado el Centro de Coordinación de Emergencias. Hasta el lugar de los hechos se desplazaron 22 dotaciones de bomberos y se activaron cuatro ambulancias. La Generalitat Valenciana ha declarado tres días de luto.

Los bomberos llevan trabajando desde ayer por la tarde para apagar el fuego y rescatar a los vecinos que habían quedado atrapados por las llamas. Durante el rescate se han vivido escenas dramáticas, como la de algunos residentes refugiados en los balcones mientras el fuego devoraba el edificio detrás de él. Ha sido el caso de un hombre y una mujer que pudieron ser rescatados después de mucho rato con una maniobra que los bomberos hicieron con dos grúas: mientras con una controlaban el fuego en las plantas inferiores, con la otra se acercaban para evacuarlos. Los bomberos también han habilitado colchones hinchables para que los vecinos de los pisos más bajos pudieran saltar y escapar del fuego.

Los motivos de la expansión

El incendio sorprendió por su rápida propagación, y aunque todavía se desconocen tanto las causas del fuego como el motivo de su expansión, expertos y algunos vecinos pusieron en el punto de mira el revestimiento del edificio, construido en 2005, y las fuertes rachas de viento. Cuando se construyó el edificio, la promotora FBEX, que ya no existe, hizo un anuncio en el que catalogaba sus materiales de "máxima calidad" e "innovadores".

La voz más autorizada hasta ahora ha sido la vicepresidenta del Colegio de Ingenieros Técnicos Industriales de Valencia, Esther Puchades, quien además fue el especialista que peritó el edificio ahora quemado. En declaraciones a la televisión pública À Punt recogidas por Efe, el especialista ha atribuido la voracidad del incendio al revestimiento de poliuretano de la fachada. Según ha explicado, bajo las piezas de aluminio colocadas en la fachada del edificio hay poliuretano, un producto "totalmente inflamable" que, a su juicio, "es el que ha provocado la expansión de las llamas en menos de media hora". El fuerte viento que soplaba a esa hora en la ciudad, con rachas de entre 50 y 60 kilómetros por hora, también ha contribuido a la propagación.