Carreteras llenas y hoteles abiertos: empieza la Semana Santa con la amenaza de la cuarta oleada

BarcelonaLa Semana Santa del 2020 estuvo marcada por el confinamiento total de la población y, un año después, la Pascua llega este jueves a las puertas de la cuarta oleada de la pandemia. A pesar de la amenaza del virus, en Catalunya se prevé mucha movilidad. Hay dos datos que lo ejemplifican: el Servicio Catalán de Tráfico estima que entre este jueves y viernes salgan del área de Barcelona entre 331.700 y 377.000 vehículos y que los hoteles de las comarcas de Girona tengan una ocupación de entre el 60% y el 80%.

De hecho, entre el domingo y el lunes se prevé que vuelvan a Barcelona y su área metropolitana entre 514.000 y 585.000 vehículos –más de 414.000 vehículos ya salieron de Barcelona el fin de semana pasado–. Todo ello, hará difícil la circulación en la AP-7, la C-16, la C-17 y las carreteras hacia la Costa Brava –como la N-II, la C-31 y la C-65–, y Costa Daurada, como la N-340. En esta segunda fase de la Semana Santa, los Mossos d'Esquadra movilizarán a 1.428 efectivos, que establecerán 1.070 controles en vías principales y secundarias, entre los de alcoholemia y drogas (259), distracciones (219), elementos de seguridad pasiva (198), velocidad (150), motocicletas (132) y transporte (112).

Además, los Mossos, junto a las policías locales, Protección Civil y agentes rurales, se desplegarán también por los parques naturales para evitar aglomeraciones y que se respeten las restricciones por el coronavirus. En este sentido, los Bomberos de la Generalitat han enviado un comunicado para hacer un llamamiento a la prudencia y a hacer actividades en la naturaleza "de manera segura", y recomiendan planificar, equiparse bien y tener un estado físico y mental adecuado al nivel de la actividad. Recuerdan, también, que hay restricciones vigentes, como que no se puede salir de Catalunya y que la movilidad está permitida pero solo con miembros de la la misma burbuja.

Ocupación desigual en el territorio: se estanca en Barcelona y sube en el Pirineu y en la Costa Brava

Las previsiones son que la mayoría de turistas aprovechen el periodo de vacaciones para escaparse de Barcelona, sobre todo a la Costa Brava y al Pirineu. Las reservas hoteleras están impactando de manera desigual en el territorio: con el turismo internacional cercado, los hoteles están prácticamente vacíos en Barcelona, mientras que las reservas repunten en Girona, Lleida y Tarragona.

Según ha dicho a Europa Press el director general del Gremio de Hoteles de Barcelona, Manel Casals, la ciudad solo tiene el 25% de los hoteles abiertos y prácticamente "sin clientes". El gerente de la Federación Intercomarcal de Hostelería y Turismo (FIHRT), Daniel Brasé, también ha calificado la situación de incierta, a pesar de que celebra que "haya muchas reservas" en les Terres de l'Ebre y la Catalunya Central, sobre todo de casas rurales.

En Girona se prevé una ocupación de entre el 60% y el 80%, mientras que en Tarragona, que depende del turismo internacional, la situación es más incierta y están abiertos el 80% de los campings y la mitad de los apartamentos, pero solo el 20% de los hoteles. En el Pirineu de Lleida nueve de cada diez plazas ya están ocupadas.

Turismo de vacunación en el Pirineu

En el Pirineu, además, los alcaldes han denunciado que se está produciendo "el turismo de vacunación", personas de otros puntos de Catalunya que aprovechan la Semana Santa para venir a vacunarse a las comarcas de montaña. Raimón Monterde, alcalde de Sort, ha dicho al ACN que es "incomprensible" que, por un lado, se limite la movilidad y, por el otro, se "promueva la movilidad en cuanto a la vacunación". Monterde ha denunciado esta práctica y ha afirmado que a un vecino del Pallars "nunca se le ocurriría" ir a vacunarse a Barcelona. El presidente del Consell del Pallars Sobirà, Carlos Isus, ha pedido a Salud una solución y ha sentenciado que "las vacunas del Pallars tienen que ser para la gente del Pallars".

Las personas que se pueden poner la vacuna reciben un SMS a su teléfono móvil, con el que pueden pedir la cita. También lo pueden hacer las personas de los colectivos afectados aunque no hayan recibido el mensaje. Lo hacen a través de una página web que les ofrece varios días y horas, y los diversos puntos de vacunación disponibles, algunos de los cuales pueden estar lejos de casa suya. La web despliega un menú con el medio centenar de espacios habilitados para la vacunación que se pueden elegir, independientemente de la localidad de residencia, y se van actualizando periódicamente, así que si no se encuentra la opción deseada en un primer intento se puede seguir intentando. El gran interés para recibir la vacuna de AstraZeneca provocó la semana pasada que en pocos días ya se llenaran casi todas las citas en Barcelona y las zonas más pobladas de Catalunya, pero todavía quedaban vacunas disponibles en áreas más apartadas de las conurbaciones urbanas.