El Gobierno quiere reordenar las titulaciones universitarias
En las preinscripciones de julio el 40% de los estudiantes no entraron en la primera opción que habían elegido
BarcelonaCuatro de cada diez universitarios no entran en el grado y centro que han elegido en primera opción. Esta proporción, que en etapas educativas como puede ser la formación profesional (FP) sería alarmante, es una tendencia que se repite en el sistema universitario catalán. Este 2025, en la preinscripción del mes de julio, sólo un 58% (27.927) de los estudiantes a los que se asignó una plaza consiguieron silla al grado y universidad que habían elegido en primera preferencia. En la preinscripción del mes de julio del año pasado, el 62% de los universitarios consiguieron estudiar dónde querían, el mismo porcentaje que los que lo consiguieron en 2023.
Este desequilibrio entre oferta y demanda de estudios universitarios en Cataluña es sólo una de las consecuencias de un hecho que está obstaculizando que la sistema universitario catalán evoluciona estudios y universidades son de hace casi 30 años. Concretamente, ambos decretos son de los años 1996 y 1997. Por este motivo, el departamento de Investigación y Universidades ya ha puesto manos a la obra para aprobar un nuevo decreto que debe permitir replantear el ordenamiento de titulaciones.
"El decreto es previo a la creación del espacio superior de educación europeo y es un sistema algo obsoleto en cuanto a los trámites administrativos que deben tenerse en cuenta para realizar la programación universitaria", ha admitido la consellera de Investigación y Universidades, Núria Montserrat, este lunes en una entrevista en TVE. De momento, Montserrat ha explicado que a finales de mayo la conselleria informó al Govern de una consulta pública sobre las titulaciones universitarias en Catalunya. Este proceso ya se ha cerrado y sus conclusiones se publicarán en octubre. Todo ello debe servir para realizar un mapeo de todas las titulaciones para, "con rigor y análisis", ver qué titulaciones hay y qué plazas están llenas o no. "Esto debe servir para, a partir de ahí, tomar decisiones", ha defendido Montserrat.
La consellera también ha insistido en la necesidad de este análisis profundo, ya que el 40% de los estudiantes no entren en su primera opción en julio no quiere decir que no estudien lo que quieren. "Debemos tener en cuenta que el estudiante pone la misma titulación en diferentes centros de Catalunya", ha recordado Montserrat. Es decir, que un alumno puede no haber entrado en el grado de la universidad que quería, pero sí haber conseguido estudiar el mismo grado en otro centro. "Eso es lo que necesitamos estudiar muy bien", ha insistido la titular de Investigación y Universidades.
¿Suprimir titulaciones?
El nuevo decreto podría servir para abordar aspectos como que este año sólo se haya matriculado un alumno en el grado de filología románica de la Universidad de Barcelona (UB), o que cada año haya estudiantes con vocación de médico que no pueden entrar en medicina por falta de plazas, a pesar de haber obtenido una nota muy alta en la selectividad. De hecho, Montserrat ha sido contundente en este sentido: "El análisis nos va a permitir ordenar y establecer qué titulaciones hacen falta".
Fuentes del departamento de Universidades detallan que el objetivo de crear un nuevo decreto es "actualizar y unificar los procedimientos de planificación y ordenación garantizando seguridad jurídica, eficiencia y coherencia con la normativa catalana, estatal y europea".
Según se expone en la consulta pública previa a poder iniciar el proyecto de decreto de programación y ordenación del sistema universitario de Cataluña, la futura norma debería redefinir la regulación en tres ejes: la programación universitaria, la oferta de plazas y la ordenación universitaria. Por tanto, el nuevo decreto podría cambiar los criterios para decidir cuántas plazas se ofrecen cada año de cada grado y máster en todas las universidades públicas y también de las privadas que lo soliciten.
En el documento donde se exponen los motivos para redactar un nuevo decreto también se establece que en el apartado de ordenación universitaria deberán incluirse los procedimientos para implantar y suprimir estudios universitarios oficiales; para crear, modificar o suprimir centros docentes universitarios, y también para realizar "modificaciones sustanciales de estudios".
400 plazas para medicina
Además, entre otros procedimientos, el nuevo decreto deberá regular también el reconocimiento de hospitales universitarios y de hospitales asociados a las universidades, un aspecto clave para ampliar las plazas de estudios con una alta demanda como medicina y enfermería. En este sentido, Montserrat ha recordado que hasta 2028 el ejecutivo pretende ampliar con 400 nuevas plazas los estudios de medicina en Cataluña (sumando tanto las de las universidades públicas como las privadas). Además, se han acortado los plazos para que un hospital se acredite como universitario y, por tanto, pueda ofrecer prácticas para los estudiantes de medicina. La consellera ha puesto el ejemplo del Hospital de Tortosa, al que se dio la acreditación como centro universitario en sólo 4 meses, mientras que, hasta ahora, para realizar este procedimiento y recibir luz verde se podría tardar hasta 13 meses.