De pasar lista a dar clase cuando el docente falta: ¿qué funciona contra el abandono escolar?
El Consorcio de Educación de Barcelona encarga un análisis para conocer qué medidas son más efectivas en institutos de alta vulnerabilidad
BarcelonaEn Cataluña, la tasa de abandono escolar prematuro es del 13,7% (alumnos que dejan sus estudios antes de cumplir 18 años). Aunque existe una importante motivación socioeconómica, muchas de las causas que hacen que un adolescente se marche de las aulas antes de lo que se quisiera se esconden tras prácticas diarias aparentemente intrascendentes. Así lo indica el estudio Evaluación de las medidas para garantizar la continuidad de los estudios hasta los 18, un análisis que el Consorcio de Educación de Barcelona ha encargado a la consultora KSNET para conocer cuáles de las acciones que se están realizando en los centros escolares vulnerables de la capital catalana están siendo más eficaces para luchar contra el abandono escolar.
Para realizar el estudio, se han analizado 137 institutos de alta vulnerabilidad –con más de un 30% de alumnos socioeconómicamente vulnerables– de Barcelona y se han distinguido las prácticas que realizan los institutos que tienen menos abandono escolar del esperado teniendo en cuenta las características de sus alumnos y los que, por el contrario, han considerado más que se esperaba. De este modo, se ha detectado que hay ciertas dinámicas que se repiten en los institutos "más efectivos" en la lucha contra el abandono escolar prematuro, entre las que se encuentran desde aspectos tan rudimentarios como pasar lista todos los días hasta trabajar para que cuando un docente toma la baja se siga impartiendo su materia.
De este modo, el estudio ha comprobado que más del 70% de los institutos vulnerables que despuntan por tener una tasa de abandono más baja de la esperada realizan un registro diario de asistencia de los alumnos –algunos incluso realizan un control de quien viene a cada franja horaria–. De hecho, el informe asegura que los estudiantes de los centros en los que siempre se pasa lista tienen entre 10 y 14 puntos porcentuales menos de probabilidad de abandonar los estudios. En cambio, se ha comprobado que el avisar a la familia cuando un alumno no viene a clase no tiene un impacto positivo adicional.
Otro de los factores relevantes en la lucha contra el abandono es la continuidad a la hora de impartir materia. En este sentido, el 36,8% de los centros de secundaria que tienen menos abandono de lo que cabría esperar priorizan el hecho de seguir dando clase y avanzar materia cuando un docente falta, aunque no sea sustituido. El estudio relaciona directamente las faltas frecuentes del profesorado con una mayor probabilidad de abandono de los alumnos. Concretamente, apunta que más de 3 faltas de media por profesor en un curso puede aumentar en casi tres puntos la probabilidad de que un estudiante se desvincule de la educación.
Leer para combatir el abandono
El análisis encargado por el Consorci de Educació de Barcelona también tiene en cuenta el impacto que puede tener el hábito lector en las posibilidades de abandonar los estudios. En este sentido, el estudio confirma que el 50% de los centros que han despuntado por una tasa baja de abandono promueven "siempre" el hábito lector y un 33% organiza actividades de lectura individual dentro del aula, una práctica que no aplica ninguno de los institutos con una proporción más preocupante de abandono.
Finalmente, la relación del instituto con las familias también es un factor clave a la hora de reducir la tasa de abandono escolar. Según el análisis, un 68,4% de los institutos más efectivos dispone de un plan de comunicación con las familias y un 50% les envía encuestas de satisfacción.