España esquiva la sexta oleada del covid, de momento

BarcelonaLa transmisión del coronavirus se acelera en toda Europa y no hay ningún país ajeno a la amenaza de una nueva oleada, ni siquiera los que registran cifras bajas de contagios como España. Este es el diagnóstico del director regional para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Hans Kluge, que ha alertado de que el continente revive el “punto más crítico” de la pandemia: algunos territorios que todavía tienen poca población vacunada sufren una explosión de casos que puede comprometer sus sistemas sanitarios y que puede disparar la circulación del virus en países cercanos que tienen la campaña de inmunización a medias. “Europa vuelve a estar en el epicentro mundial [de la pandemia]”, ha afirmado visiblemente preocupado Kluge, que lo ha atribuido a las desiguales tasas de vacunación entre los países y al hecho de que algunos gobiernos hayan continuado relajando las medidas de contención a pesar de la inestabilidad epidemiológica.

El jefe de medicina preventiva del Hospital Clínic, Antoni Trilla, subraya que Europa es ahora el principal foco de infección de covid en el mundo, pero con intensidades diferentes en función de cada país, de su política restrictiva anticovid y de la tasa de vacunación que han logrado. Por ejemplo, por ahora, los indicadores epidemiológicos y asistenciales permiten afirmar que España esquiva la sexta oleada. Con un 80% de la población total vacunada, es el único país europeo que tiene una incidencia acumulada los últimos siete días inferior a los 30 casos por cada 100.000 habitantes (25,4) y menos de 1.800 hospitalizados entre todas las comunidades. 

“La situación en España es muy buena, pero tenemos que ser prudentes. Nada nos blinda y puede ser que después nos llegue una decepción”, avisa Trilla, en referencia al aumento de casos que viven países vecinos como Francia (61 casos cada 100.000 habitantes) y Portugal (50). La tendencia se reproduce en Catalunya, que con un 74,3% de toda la población con la pauta completa, registra una incidencia de 28 casos y 327 ingresados en los centros hospitalarios (79 en las unidades de críticos). La secretaria de Salud Pública, Carmen Cabezas, prevé que los próximos días haya un incremento de los contagios de covid.

"En Europa hay altísimas incidencias acumuladas y esto nos avisa de que el virus todavía está", ha dicho también este jueves la ministra de Sanidad, Carolina Darias, que ha hecho un llamamiento a la vacunación de la población no vacunada ante el crecimiento de los casos de coronavirus en Europa. En efecto, de momento es indiscutible que la situación en Catalunya y en el resto del Estado es muy diferente de la de algunos países bálticos y de Europa Central y del Este. Estonia, Georgia, Croacia y Eslovenia tienen algunos de los peores indicadores epidemiológicos (véase el gráfico) y ninguno de ellos ha conseguido superar el 60% de vacunados. Y tampoco Rusia, que en un solo día ha contabilizado 1.195 defunciones, supera el tercio de inmunizados. “Hay una relación directa entre la tasa de cobertura vacunal y la de las infecciones”, asegura Trilla, también investigador en el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal). 

El médico e investigador de la Universidad de Leicester Salvador Macip coincide en que la vacuna ha trazado “una diferencia mayúscula”, sobre todo en las entradas en hospitales y las defunciones, entre el oeste y el este de Europa. Pero también ha permitido reducir la circulación del virus, tal como evidencia el mapa de incidencia acumulada. “Ahora bien, no podemos olvidar que una pandemia es global y mientras el virus circule, si afecta a un país, afectará al resto”, recuerda. Y añade: “Los colores de un mapa son volátiles y dependen mucho de cuestiones como las medidas de contención, como el uso de la mascarilla, o de control, como las pruebas diagnósticas para confirmar que los que entran en el país libremente no están infectados”.

Curvas "con dientes de sierra"

Pero si las vacunas son efectivas, ¿cómo se explica que los países con al menos un 70% de vacunados también se tiñan progresivamente de rojo en el mapa de contagios europeo? “Asistimos a una aceleración de los contagios y, por lo tanto, a un crecimiento de los casos, pero no se disparan las consecuencias graves porque las vacunas, a pesar de que no son perfectas, son muy efectivas”, insiste Trilla, que dice que la prueba del algodón para tomar decisiones son las hospitalizaciones. Como Alemania, que se enfrenta a su cuarta oleada con un nuevo récord de contagios diarios, unos 34.000 positivos, y se plantea reintroducir restricciones como el uso de la mascarilla en los espacios interiores antes de que haya un aumento de la ocupación hospitalaria. 

“La situación es muy diferente de la que se vivía antes de las campañas de vacunación, sobre todo en términos de mortalidad. Mueren muchísimas menos personas”, afirma Macip, que explica que España puede “aprender de lo que pasa en Europa” para evitar reproducir el error de ahora en adelante. “Que un país logre unos buenos indicadores no significa que pueda volver la hoja y vivir como si no existiera. Por salud mental hay que recuperar normalidad, pero con cierto control. El virus no deja de circular por mucho que se reduzca su transmisión al mínimo con ayuda de las vacunas. Siempre que nos relajemos, los contagios subirán”, resume. De hecho, advierte de que tener una curva de contagios “con dientes de sierra” será la tónica de la mayoría de países gracias a las vacunas. Es decir, que habrá episodios de aceleración de contagios y, después, de freno.

La ministra de Sanidad ha afirmado que, teniendo en cuenta los niveles de vacunación, España está en una situación "óptima" para llegar a la inmunidad de grupo. "Estamos en las condiciones óptimas para poner punto final al covid, pero no podemos bajar la guardia", ha dicho. También la influyente revista The Lancet, concretamente la sección de medicina respiratoria, plantea la posibilidad de que España "esté a punto de lograr" esta anhelada inmunidad. "Después de levantar la mayoría de medidas de control, la tasa de infecciones (y particularmente la de ingresos hospitalarios) se ha ido reduciendo, y esto es lo contrario a lo que ha pasado en las oleadas anteriores. La única explicación plausible son las elevadas cifras de vacunación en este país", subraya el estudio.

Pero los expertos consultados son más escépticos. Trilla subraya que la inmunidad de grupo implicaría que podemos parar la transmisión del virus solo con vacunas. "Y mientras haya elementos que puedan afectar a su efectividad, sean variantes o una pérdida a largo plazo de la protección, continuarán haciendo falta medidas para controlar el virus", plantea. También Macip cree que es "prematuro" hablar de inmunidad de grupo sabiendo que las vacunas no son esterilizantes (no evitan los contagios a pesar de reducirlos). "Esto no significa que no se pueda llegar. De hecho, yo confío en que será posible llegar. Ahora bien, para hacerlo habrá que vacunar a todos los que no han querido hacerlo o no han podido, incluidos los niños", apunta.