Aumento "alarmante" del narcotráfico en Barcelona con un 70% más de procedimientos judiciales, casi el doble que en Madrid
La Fiscalía alerta de que el tráfico de cocaína ha crecido en Catalunya de forma "extraordinaria"
BarcelonaLlamo de atención de la Fiscalía por el aumento "alarmante" del narcotráfico en la demarcación de Barcelona. El pasado año hubo un 71,49% más de causas por tráfico de drogas que en 2023, y las que más crecieron son las relacionadas con drogas duras. De 4.234 procedimientos judiciales en el 2023 se escaló a 7.261 en el 2024, una cifra que sitúa a Barcelona como la provincia con más causas de todo el Estado y con casi el doble que Madrid, que el año pasado acumuló 3.891.
Los datos constan en la memoria anual de la Fiscalía General del Estado, publicada este viernes, y "confirman un problema muy preocupante", advierte el ministerio público. El incremento de casos en Barcelona está muy por encima de otras demarcaciones catalanas (0,53% en Lleida, 2,60% en Girona y 11,03% en Tarragona) y de la media estatal, con un 23%, que se suma al crecimiento sostenido de los últimos años. En total, el pasado año hubo cerca de 29.800 procedimientos por narcotráfico en todo el Estado, entre los que la Fiscalía destaca un crecimiento "extraordinario" del tráfico de cocaína. Esta sustancia se ha intervenido principalmente en puertos, y el de Barcelona es uno de los que acumula más casos junto con el de Valencia y el de Algeciras.
La Fiscalía General ve tres factores esenciales tras la problemática del narcotráfico en Catalunya. Dos tienen que ver con la geografía: la costa, con un "puerto comercial de enorme importancia y tráfico intenso"; y la proximidad a la frontera francesa, que es el paso terrestre a Europa tanto del hachís proveniente de Marruecos como de la cocaína que entra por los puertos y el cannabis que, en buena parte, se cultiva en Cataluña. El tercer elemento clave para la Fiscalía es la "tolerancia" o "empatía" social respecto al cannabis.
En el balance anual del ministerio público, los fiscales antidroga de Catalunya avisan del riesgo de que el país pase de ser una zona de tráfico a ser el territorio principal de producción de cannabis. Hasta ahora, las intervenciones de cannabis que pasaban por Catalunya por venderse en otros puntos de Europa eran principalmente de hachís, pero últimamente esta sustancia ha ido a la baja en favor de la marihuana cultivada aquí mismo. Lo refleja la irrupción de las mulas del cannabis. Esta figura ganó relevancia en las estadísticas de la Fiscalía en el 2023 con 23 detenciones en Barcelona, y el año pasado también se arrestó a quince viajeros que pretendían embarcar en vuelos hacia Tailandia, Reino Unido, Dinamarca, Islandia, Países Bajos, Malta, Hungría, Alemania y Gám.
Plantaciones y crimen organizado
Respecto a la "tolerancia" o "empatía" social hacia el cannabis, la Fiscalía General alerta de que "la benevolencia con la que se observan las plantaciones de cannabis no corresponde con el peligro que arrastra esta actividad", advierte la memoria fiscal. El ministerio público considera que esta simpatía se sustenta en un consumo muy extendido, en la "banalización" del consumo y en la proliferación de clubs cannábicos "que se promocionan incluso como un atractivo turístico" en la ciudad de Barcelona y que han llevado al consistorio a aumentar las restricciones.
Lejos de ello, la Fiscalía describe el cultivo de marihuana como una "gran amenaza para la seguridad" de Catalunya y que puede abrir paso al crimen organizado. De hecho, recuerda que en las cuatro demarcaciones catalanas ya se han dado casos de enfrentamientos con armas de fuego relacionados con robos de plantas y hojas de marihuana, y otros graves incidentes con violencia, detenciones ilegales y "varios homicidios que reflejan con claridad una oscura realidad que va creciendo desde hace años".
Propuesta para endurecer las penas
El narcotráfico está también presente en el apartado de la memoria que recoge las propuestas de reforma legal del ministerio público. Una quiere responder al "escandaloso incremento" de plantaciones indoor y los pinchazos de luz con los que se sostienen. La Fiscalía advierte que las penas por tráfico de marihuana y por defraudación eléctrica son bajas y esto puede atraer a grupos organizados, y quiere elevarlas para equipararlas a otros países de Europa. En España la defraudación eléctrica se castiga con una multa, y el tráfico de menos de 10 kilos de cannabis implicaría una pena de entre uno y tres años de cárcel. La Fiscalía propone un agravante al delito de defraudación del suministro eléctrico para que, cuando esté vinculado a plantaciones de grupos organizados, comporte penas de prisión.
La segunda propuesta de reforma legal vinculada al narcotráfico tiene que ver con la gasolina de las embarcaciones de alta velocidad que transportan hachís hasta las costas del Estado. Los petaderos son las personas que transportan y almacenan en casas o naves que llaman guarderías grandes cantidades de gasolina que después suministran a estas embarcaciones. La Fiscalía alerta de las dificultades de perseguir penalmente esta pieza clave en la logística del narcotráfico por las dificultades de demostrar que la gasolina está relacionada con un movimiento de droga y las dificultades de encuadrar esta conducta en el redactado del Código Penal. Por ello, propone añadir un tipo penal "que castigue sin más la tenencia o transporte de gasolina sin el cumplimiento de los requisitos de la normativa administrativa".