Martorell lidera la carrera de los aparcamientos disuasorios en el área metropolitana

BarcelonaLa primera piedra se puso en marzo y los vecinos están sorprendidos de lo rápido que se ha levantado este gran aparcamiento. El de Martorell es uno de los aparcamientos disuasorios, los llamados park and ride (aparca y monta, en inglés), más grandes proyectados en el plan que la Generalitat puso en marcha el pasado diciembre y también es el que de momento avanza más rápido. Este gran edificio está situado junto a la estación de Ferrocarriles de la Generalitat (FGC) de Martorell Central y tendrá capacidad para más de 300 vehículos, el triple de los que caben actualmente.

A principios del próximo año, los vecinos del área metropolitana que necesiten desplazarse a través de este nudo ferroviario ya podrán acercarse a la estación, aparcar el coche y continuar en tren para evitar el tráfico de entrada en Barcelona en hora punta, por ejemplo. El objetivo es facilitar la intermodalidad en este punto "estratégico", según FGC, en lo que se refiere a las comunicaciones hacia Barcelona (plaza Espanya) y hacia Igualada, Olesa y Manresa, así como conectar con las líneas de Rodalies que enlazan Martorell con Granollers y también Sant Vicenç de Calders con Manresa. "Es el mejor ejemplo del modelo de movilidad integrada que FGC está implementando. El aparcamiento dispondrá de información en tiempo real que se podrá consultar en la app y en la web de FGC para que los usuarios puedan saber la disponibilidad de plazas libres y planificar mejor los desplazamientos", explica el presidente de FGC, Toni Segarra.

El de Martorell es uno de los mayores aparcamientos disuasorios que hay proyectados y el que está más avanzado, pero no es el único. El plan que el Govern acordó el pasado diciembre prevé construir una cuarentena más, con más de 300 plazas cada uno. Algunos de los más importantes serán, precisamente, el de Martorell, pero también los de las estaciones de tren de Viladecans, Quatre Camins, Sant Quirze y Castellbisbal.

También los habrá más pequeños. En total, sumarán 14.677 plazas nuevas de aparcamiento en 102 estaciones de 81 municipios: 10 en paradas de autobuses, 28 en estaciones de Ferrocarrils y 64 en estaciones de Rodalies. Una vez terminados se pasará de las 12.780 plazas de aparcamiento actuales a más de 26.000 en toda la área metropolitana. El objetivo del plan es reducir el uso del coche y, de rebote, recortar hasta 23.700 toneladas anuales de emisiones de CO₂ a la atmósfera. También se quiere minimizar la contaminación acústica y dar cabida a las nuevas formas de transporte como los patinetes y las bicicletas: por eso estos nuevos aparcamientos incluirán zonas para guardar los vehículos de transporte personal.

Esta modalidad de aparcamiento lleva años estudiandose, pero ahora parece haber cogido velocidad de crucero en Catalunya. Los encargados de realizar estos aparcamientos son, según consta en el plan del Govern, Adif y FGC. La Autoritat Metropolitana del Transport (ATM), además, cumple la función de coordinadora y será la encargada de fijar sus precios. Desde Renfe informan que, en estos momentos, todavía no han podido empezar ninguno de los aparcamientos que se situarán en sus estaciones. "Estamos a la espera de las indicaciones de la Generalitat y de ATM para desarrollar el proyecto que anunciaron para instalar 64 park and ride en las estaciones de Rodalies", argumenta la operadora, que añade: "Estas futuras instalaciones son importantes para favorecer el uso del transporte público. Son medidas complementarias a las obras que se están ejecutando en el marco del plan de Cercanías, así como a la compra de 101 trenes nuevos que Renfe ya ha realizado".

Fuentes de Territori matizan que el Govern no dicta cuáles son los aparcamientos que es necesario hacer y que la construcción y puesta en marcha es más rápida o más lenta dependiendo de los trámites y las recalificaciones que necesitan los terrenos.

Precios unificados, pero no gratuitos

La ATM todavía no ha definido el precio que tendrán estos nuevos aparcamientos. Pero está claro que no serán gratuitos -si se muestra el billete de tren-, como ocurre ahora con algunos de los aparcamientos del AMB (Área Metropolitana de Barcelona). Sin embargo, ya el pasado diciembre, cuando se aprobó el plan, el director general de la autoridad del transporte, Pere Torres, dejó claro que habría "importantes bonificaciones" para los usuarios del transporte público para intentar, así, que los conductores que no lo utilizan ocuparan las plazas para ahorrarse un aparcamiento. "No podemos prohibir el uso del aparcamiento en función de si vas a hacer una cosa u otra", dijo entonces Torres. "Por eso, la solución para nosotros es que haya unas tarifas, no necesariamente baratas, y que el precio caiga en picado si se va en transporte público", aclaró.

Actualmente, las más de 12.700 plazas de aparcamiento intermodal existentes tienen un modelo de precios mixto: algunas se pagan, otras son gratuitas y otras solo lo son durante 24 horas. El objetivo del plan del Govern también es unificar sus precios para tener un único sistema en toda Cataluña.