¿Una puerta en Marte?: la fotografía del Curiosity que genera teorías alienígenas
El robot de la NASA difundió una imagen que se hace viral a pesar de que se trata de un fenómeno geológico frecuente
BarcelonaEn agosto del 2012 un aparato todoterreno de la medida de un coche aterrizó en el planeta Marte. Era el Curiosity y tenía una misión: investigar si podría haber habido vida en el planeta rojo. Diez años después, el vehículo de la NASA ha fotografiado lo que puede parecer una puerta excavada en una pared de roca. La fotografía se ha hecho viral –y ha sido compartida con todo tipo de memes con el hashtag #MarsDoor– porque ha dado alas a todo tipo de especulaciones: desde un escondrijo para marcianos hasta un portal hacia otro universo. En realidad, sin embargo, todo apunta a un fenómeno mucho menos extraordinario.
Según ha explicado el geólogo Sanjeev Gupta en el diario The Daily Telegraph, "no hay nada extraño en la imagen". "Solo son procesos geológicos normales. La grieta es una fractura, que son abundantes en Marte y en la Tierra. No hacen falta terremotos marcianos para producirlas", ha apuntado el experto, que trabajó en la misión del Curiosity.
Además, la imagen puede engañar mucho, porque lo que parece una puerta grande en realidad se trata de un agujero pequeño, de unos 30 por 45 centímetros, según han explicado los responsables del Jet Propulsion Laboratory de la NASA en Snopes, un portal de verificación de noticias. Las mismas fuentes han explicado que, a pesar de que la foto llame mucho la atención porque se rompe la irregularidad del paisaje de Marte con líneas rectas, se ha constatado que hay fracturas lineales en toda la zona de la imagen. Es posible que los terremotos que se producen en Marte hayan provocado tensión en la roca y se haya roto. Por lo tanto, nada de alienígenas: la supuesta "puerta" solo se trata de un engaño visual, un tipo de ilusión óptica.
Muchos descubrimientos
En esta década, la NASA ha anunciado varios grandes hallazgos del Curiosity: unas moléculas orgánicas formadas hace 3.000 millones de años; un tipo de roca, la mugearita, que no se sabía que existía en Marte y que en la Tierra está en zonas muy concretas, como por ejemplo en volcanes de Hawai y algunas islas oceánicas; o indicios de agua salada líquida (salmuera).
Una de las tareas del róver es entender qué clima y qué condiciones atmosféricas se dan: el Curiosity ha detectado que la atmósfera de Marte es mucho más delgada que la nuestra, cosa que provoca que las oscilaciones de temperatura entre estaciones y entre el día y la noche sean mucho más fuertes. En un día normal “cálido” el termómetro sube hasta los 0 °C en el cráter Gale, el lugar de Marte donde vive el aparato, pero se han llegado a registrar picos de temperatura de hasta 16°. El día en verano es soportable, pero por la noche incluso a las estaciones cálidas se baja por debajo de los -60 °C. En invierno el termómetro cae hasta rozar los -100°.