Cocaína escondida en la silla de ruedas: la nueva forma de entrar droga por aire
La Policía Nacional detiene a dos 'mulas' con movilidad reducida en el aeropuerto de El Prat en dos días
BarcelonaSobre el papel, estaba en Barcelona para realizar turismo. Venía de un vuelo procedente de Brasil, y viajaba solo, pese a tener graves problemas de movilidad: iba con una silla de ruedas eléctrica. En el aeropuerto de El Prat, cuando los agentes de la Policía Nacional le preguntaron por qué había elegido Barcelona, dudó. Se puso nervioso y se mostró dubitativo, y evadió el tema sacando uno nuevo aún más sospechoso: su silla de ruedas eléctrica no iba, debía moverse manualmente, porque había tenido problemas durante el vuelo. La silla de ruedas no iba porque no tenía batería: dentro de las cajas a las que deberían ir engranajes y cables, en realidad había cocaína.
Los agentes de la Policía Nacional le habían detenido porque saben que esta técnica, la de utilizar personas con discapacidad física para mover la droga, está al alza. Los grupos criminales, normalmente originarios de Sudamérica, buscan las llamadas mulas entre personas vulnerables de esos países. Ahora, se fijan especialmente en las que tienen problemas de movilidad para evadir controles en los aeropuertos. A principios de mes, la policía detectó a este hombre con una silla de ruedas eléctrica y, repasando su ficha, vieron que cumplía el perfil de mula. Era un joven y vulnerable. Todo esto, sumado a sus dudas, terminó con un registro a fondo y la detección en el espacio de la batería de 10 paquetes envasados con más de siete kilos de cocaína. El hombre acabó detenido.
Segundo caso
Solo hizo falta un día para comprobar que esa nueva táctica para introducir droga es ya una tendencia. Al día siguiente, la Policía detuvo en el aeropuerto de El Prat a otro hombre que iba con una silla de ruedas eléctrica. También era joven, sufría graves problemas de movilidad y viajaba solo. De nuevo, en las baterías de la silla hallaron 3,8 kilogramos de cocaína. En ese caso, el vuelo procedía de Colombia.
Fuentes policiales recuerdan que los grupos criminales de la droga se aprovechan de la vulnerabilidad de estas personas para utilizarlos de mulas de la droga. Sumada a su vulnerabilidad económica y social, en estos casos también las hay de salud. Éstas mulas a menudo no saben lo que implica transportar droga ya qué penas se pueden enfrentar.