Cuatro multas de los Mossos en 19 minutos: "Me chillaba en la cara y daba golpes al coche"

BarcelonaNoemí todavía digiere lo que le pasó la noche de lunes a martes mientras volvía a casa del teatro. "Circulaba con el coche por la C-58 hacia Terrassa, venía de Barcelona y un coche de los Mossos me hizo parar para multarme, porque iba conduciendo por el carril del medio", explica al ARA por teléfono. Hasta aquí todo normal. Ella indicó a los agentes que circulaba por el carril central porque hacía poco que había adelantado a una furgoneta y se había mantenido en este porque, a esas horas y sin nadie más en la autopista, se sentía "más segura". Ellos le respondieron, dice, que no se puede conducir por el carril del medio, aunque no haya más coches en la carretera y le pusieron una multa. "Cuando me la dieron en mano la cogí les dije que de acuerdo, y añadí: «Realmente, tenéis poco trabajo», y supongo que este comentario, que lo hice educadamente, les sentó fatal", relata Noemí. Eran las 23.52 h. Le ordenaron que retomara la marcha y ella volvió a incorporarse a la circulación.

A partir de aquí empezó lo que ella describe como un "acoso" constando que provocó que lo pararan varias veces, cada pocos metros, y le acabaran poniendo hasta tres multas más. Todo en menos de 20 minutos, tal como corroboran las cuatro multas a las cuales ha tenido acceso el ARA. "Cuando me incorporé me siguieron y me volvieron a obligar a parar. El otro mosso salió del coche gritando, enloquecido, corriendo hacia mí y me abrió la puerta del coche y se puso a gritarme: «¡¿Nos quieres matar, o qué?!»", explica Noemí, que asegura que sintió miedo y desconcierto. "No sabía qué estaba pasando y tenía la sensación de que me quería pegar", asegura. Le pidió calma y entregó el carné al agente, tal como le había requerido.

Según el relato de la mujer, el mosso fue hasta el vehículo oficial a hacer comprobaciones y ella siguió esperando dentro de su coche "un rato largo", parada en el arcén, mientras no le devolvían el carné. "Al final decidí acercarme hacia ellos con el coche para preguntar qué pasaba porque estaba muy angustiada –explica–. Entonces se alteraron mucho, me avanzaron y atravesaron el coche frente a mí", continúa. Noemí asegura que la pareja de agentes le dijo que habían buscado su nombre y su empresa en Google y que ahora le querían hacer un test de alcoholemia, que dio negativo. A continuación le pusieron dos multas más: la primera por circular negligentemente a las 00.01 h y la otra por no hacer caso a la autoridad a las 00.05 h. Después le dijeron que retomara la marcha, dice.

"Yo estaba temblando y supernerviosa porque me habían hablado muy mal. El mosso más joven, el que me había abierto la puerta, me chillaba en la cara, y daba golpes al coche", relata Noemí, que asegura que retomó la marcha muy alterada. "Al cabo de un momento ya los volvía a tener detrás, no me lo podía creer", asegura la mujer. Esta vez la paraban porque "con los nervios" se había olvidado de encender las luces traseras. La cuarta multa llegó a las 00.11 h. "Ya no podía más y les dije que de acuerdo, pero que esto no quedaría así, que me parecía que estaban abusando de su autoridad", dice Noemí, a lo cual ellos le habrían respondido que todavía recibiría una quinta multa por haberse incorporado a la calzada sin poner el intermitente.

Acciones legales

"Yo creo que simplemente tenían ganas de multarme y ya está", asegura esta conductora que ha hecho pública su historia en un hilo de Twitter en el que detalla el tono "de burla" y desafiante que habrían tenido los agentes y la sensación de violencia, espanto e impotencia que sintió ella. Interior no ha querido dar detalles del caso, pero los portavoces del departamento aseguran al ARA que la conselleria ya está "recopilando información" para revisar la actuación de los dos agentes implicados. Por su parte, después de hacer público el caso en las redes sociales, Noemí asegura que está buscando un abogado y se plantea no solo denunciar a los agentes, sino también escribir una carta para poner su caso en conocimiento del Síndic de Greuges. "Quiero que esto no pueda volver a pasar", concluye la conductora.