Mas de Enric endurece la normativa para asignar trabajos a los presos
La prisión evaluará con un informe de seguridad los riesgos de cada interno
BarcelonaCambios relevantes en la política de seguridad de la prisión de Mas d'Enric después del trágico asesinato de la cocinera del centro a manos de un preso que trabajaba con ella, hace dos meses y medio. El lunes, la dirección de la cárcel ubicada en El Catllar (Tarragonès) aprobó una normativa interna que regula las ocupaciones laborales de los internos y que ya ha entrado en funcionamiento este martes. Una de las principales novedades es que se han clasificado los destinos laborales en cuatro niveles de seguridad según riesgo. Así, la mayoría de los trabajos en la cocina, la panadería o en zonas de carga y descarga serán de muy alto riesgo. Otras tareas menores en la cocina serán de riesgo alto, así como las tareas en la lavandería, tienda o polideportivo. La mayoría de los talleres están clasificados como riesgo medio, según informa el ACN.
La norma también refuerza los criterios que marcan si un preso puede entrar a trabajar en un destino introduciendo un nuevo elemento, un informe de seguridad preliminar que elaborará la Unidad de Seguridad Interior y que evaluará el perfil del interno y el riesgo del trabajo al que quiere acceder. Después, el equipo multidisciplinar, formado por los trabajadores que tratan a los internos en su día a día, recibirá el informe y elevará otro a la Junta de Tratamiento –que se reúne semanalmente– para que haga una propuesta al Centro de Iniciativas para la Reinserción (CIRE), la empresa que gestiona las tareas en prisión.
En todo este proceso se seguirá teniendo en cuenta una herramienta de ayuda clave de la que disponen los equipos de tratamiento, el RisCanvi, un algoritmo que calcula las probabilidades de que un preso reincida. El lunes, el ARA reveló que en Mas d'Enric no se siguió correctamente el protocolo cuando no se hizo un nuevo test RisCanvi al preso que acabó asesinando a la cocinera tras una agresión a otro interno cuatro meses antes del crimen. Núria es la primera trabajadora de una cárcel muerta a manos de un preso de la historia penitenciaria catalana, y este caso ha provocado la implementación de más medidas de seguridad, como las que se han materializado este martes en Mas d'Enric . Por ejemplo, ahora los presos que cometan una falta disciplinaria muy grave pueden ser apartados de cualquier puesto hasta tres meses. Hasta ahora, la sanción era de un mes. También se intensificará el control de los presos que se encuentran en primer grado.
Estas medidas llegan después de la destitución del director de la cárcel y también de la reubicación de los presos que estaban en la cocina y habían sido condenados por delitos de sangre. Sindicatos y Gobierno también pactaron un paquete de nuevas medidas de seguridad, como que la comida ya llegue cortada o que los cuchillos estén anclados en las mesas.