Se acabaron las dos copas: el Estado rebajará a la mitad el nivel de alcohol permitido al volante

BarcelonaEl gobierno español estudia endurecer las tasas permitidas de alcohol a los conductores para reducir la siniestralidad en las carreteras. Así lo confirmó este jueves el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que avanzó que se está trabajando "en serio" en los trámites parlamentarios para rebajar de los 0,5 gramos por litro en sangre actuales a los 0,2, así como bajar los 0,25 miligramos por litro de aire aspirado actuales hasta los 0,10. Inicialmente, la dirección general de Tráfico (DGT) quería reducir estos umbrales a conductores profesionales y novatos. Ahora, sin embargo, la idea es aplicarla a todos los conductores.

Fuentes del ministerio consultadas por el ARA han aclarado que el cambio se haría a través de una reforma del Reglamento de Circulación, y subrayan que se impulsa con la intención de aumentar la protección a los usuarios más vulnerables: motoristas, ciclistas y peatones. La modificación podría tardar aún un tiempo en estar en vigor porque, pese a que fuentes gubernamentales han asegurado que la idea es trasladar la propuesta al Congreso "lo antes posible", habrá que superar la fase de debate parlamentario. Según los últimos datos estatales, y sólo este verano, 241 personas han perdido su vida en las carreteras españolas. En Cataluña han muerto 33.

De momento, el Observatorio Estatal de la Seguridad Vial –un organismo adscrito a la DGT– estudia los detalles de la propuesta para valorarla. Entre otros aspectos, se trabaja en una comparativa de las tasas de alcoholemia permitidas en otros países de Europa. Los datos en los que se basa el ministerio señalan que la tasa más común en la Unión Europea (UE) es de 0,5 gramos por litro en sangre, siendo más habitual que se rebaje al 0,2 para los conductores noveles y profesionales, como camioneros o chóferes de autobús. En España, en la actualidad, los conductores profesionales o los que tienen menos de un año de experiencia al volante tienen una tasa límite de 0,3 gramos por litro en sangre.

Ahora bien, en la UE todavía no hay muchos países donde el límite general sea de 0,2, tal y como plantea el ministerio: Estonia, Polonia y Suecia. En cambio, en Eslovaquia, Hungría, República Checa y Rumanía la tasa se rebaja hasta el 0,0. Fuentes del ministerio han explicado al ARA que los datos demuestran que la siniestralidad ha caído en los países que han rebajado la tasa de alcohol permitida en el volante. Grande-Marlaska aseguró que existe una "coincidencia generalizada" en esta propuesta por parte de las asociaciones de víctimas y de seguridad vial, y que la población es "madura" para sacar adelante esta medida.

Alcohol y drogas, detrás de la mitad de los accidentes

Según el último anuario estadístico de siniestralidad en Catalunya, que es de 2022, aproximadamente poco más del 1% de los conductores catalanes circulan con una tasa de alcohol por encima de la permitida. Sin embargo, un 14% de los que sufrieron un accidente al volante habían bebido, y el porcentaje se duplicaba (28,2%) entre los que perdieron la vida en estos siniestros. Sin embargo, el anuario no permite saber el total de conductores que mueren porque iban bebidos –no se hacen pruebas toxicológicas a todos los finados– ni las víctimas mortales provocadas por estos accidentes.

Según los datos de los Mossos d'Esquadra, en la última década en Catalunya se han detectado una treintena de positivos cada día. Hablamos de 125.000 positivos en diez años (del 2012 al 2022), aunque no siempre se han realizado el mismo número de controles. En estos datos están sumados los positivos tras sufrir un accidente, haber hecho una imprudencia o que han pillado en un control preventivo. En 2012 se realizaron 400.000 controles y engancharon a más de 14.000 personas que dieron positivo. En el 2022 los infractores fueron 11.000, pero apenas se realizaron 130.000 controles. Sin embargo, tras la pandemia fuentes de los Mossos alertan de que han encontrado uno de los índices de positividad más altos.

Los datos de ámbito estatal también corroboran que el alcohol (así como otras drogas) es uno de los principales factores de riesgo de accidentalidad al volante. La memoria anual del Instituto Nacional de Toxicología constata que más de la mitad de los conductores fallecidos el año pasado en accidentes de tráfico en España dieron positivo en alcohol, drogas o psicofármacos. En concreto, fueron el 53,6% de las 862 víctimas a las que se realizó la autopsia y un análisis toxicológico. Entre estas sustancias, el alcohol es la que se detectó con mayor frecuencia: un tercio de las víctimas mortales habían bebido y la gran mayoría de los que dieron positivo lo hicieron con una tasa muy alta, igual o superior a 1,2 gramos por litro en sangre.

El 2,8% de los conductores catalanes incumplen

En Catalunya, en los primeros cinco meses del año, el alcohol estuvo involucrado en 1.405 accidentes sin víctimas mortales, explican en el ARA desde el Servei Català de Trànsit (SCT). En el mismo periodo, se han realizado un total de 65.050 pruebas de alcoholemia, 1.847 de las cuales revelaron que el conductor superaba el límite actual (0,5 o 0,3 si era novato o profesional). Estos datos que recopila Trànsit indican que, este año, el 2,8% de los conductores a los que se realizó una prueba entre enero y mayo de 2024 incumplían el límite legal de alcoholemia.

Ahora bien, ¿cuántos conductores habrían superado el límite de alcohol en sangre permitido al volante si ya estuviera en marcha la rebaja que plantea el ministerio? Durante estos cinco meses, entre los 65.050 conductores que se sometieron a un test de alcoholemia hubo un millar que dieron un resultado inferior a 0,5 pero superior a 0,2. Es decir, unas 1.000 personas que cumplían con el límite legal actual estarían por encima del umbral que ahora se estudia fijar. Sumados a los 1.847 positivos registrados entre enero y mayo, la cifra de conductores que superarían el límite de alcohol subiría hasta un hipotético 4,3% con la nueva regulación.

¿Quién daría positivo?

En caso de que se apruebe este nuevo umbral, ¿a partir de cuántas copas se dará positivo? Según un estudio del RACC, y teniendo como referencia a un conductor hombre que pese entre 70 y 90 kg y una conductora de entre 50 y 70 kg, con una sola copa de vino o cava (100 ml y 12 grados de alcohol) él dará una tasa de entre 0,16 o 0,20, en el límite de la legalidad. En cambio, ella le superará: dará entre 0,25 y 0,35.

Si lo que beben es una jarra de cerveza (330 ml y 5 grados de alcohol), ambos superarían el umbral: el conductor dará entre 0,21 y 0,28 y la conductora, entre 0,34 y 0 ,48. Y si es un combinado (70 ml y 17 grados de alcohol), el varón dará una tasa de entre 0,31 y 0,40. La tasa de ella subiría hasta el 0,49 o el 0,69.

Este verano, los Mossos d'Esquadra han desplegado controles simultáneos en las carreteras y autopistas con mayor siniestralidad: la C-25, la C-37, la C-15, la AP-7, la C-17, la C-58 y la C-32. En este caso, se han centrado en otros dos grandes factores de riesgo en la carretera, las distracciones y el exceso de velocidad. Grande-Marlaska también ha explicado que se está intensificando la vigilancia en las carreteras de toda España, con lo que este año se alcanzarán los 6 millones de controles de alcoholemia y los 120.000 drogas.