A prisión un estafador profesional que engañaba a médicos
Abrió cuatro locales en Barcelona haciendo creer que serían centros médicos y debía 100.000 euros
BarcelonaTenía 15 antecedentes por estafas, pero esto no impidió que en el último año engañara a nuevas víctimas. Montó un grupo criminal con cuatro personas más porque quería estafar a médicos y para hacerlo creíble alquiló tanto material como inmuebles, que no pagó nunca: debía más de 100.000 euros. Los Mossos d'Esquadra han detenido al hombre, de 45 años, como líder de este grupo, que en los últimos 12 meses –desde enero del 2020 y hasta enero de este año– abrió cuatro locales en Barcelona haciendo creer que serían centros médicos. También han arrestado a su hombre de confianza, de 52 años, pero todavía no han encontrado a los tres otros colaboradores del grupo. El juzgado ha enviado al líder a prisión y el hombre de confianza ha quedado en libertad.
La estafa piramidal empezaba con los inmuebles. En el año que duró el negocio, alquilaron cuatro viviendas para vivir y cuatro locales comerciales para simular que los convertirían en centros médicos. Para convencer a los propietarios que pagarían el alquiler, enviaban un primer justificante por correo electrónico de una transferencia bancaria. Pero este justificante no servía de nada porque, una vez lo habían obtenido, “habían anulado la transferencia”, explica el jefe de la unidad de investigación de los Mossos en Barcelona, el subinspector Isaac Cuevas. A la hora de la verdad, pues, los propietarios no recibían ni un euro.
Para llenar los locales que habían alquilado y dar credibilidad al relato de que serían clínicas privadas, el grupo también alquiló a cinco empresas material informático –ordenadores e impresoras– así como de oficina que tampoco pagaba. Con este material, según Cuevas, obtenían beneficios porque después lo vendían en tiendas de segunda mano. Los espacios querían tener la apariencia de estar funcionando y por eso estaban los colaboradores del grupo, que simulaban que trabajaban. El objetivo, dice el subinspector, consistía en contactar con médicos para animarles a compartir consulta y el jefe de los estafadores les aseguraba que también se dedicaba a la medicina. Solo una víctima le adelantó el dinero con una paga y señal.
Historial en toda España
El líder del grupo es un estafador profesional que se llama Tomás Sánchez Pacheco, según ha avanzado El Periódico, quien en periodos anteriores ya había actuado en al menos 15 ocasiones en toda España –en Catalunya acumulaba cuatro antecedentes y también había pasado por Madrid, Andalucía y Galicia–. El hombre no tenía “ningún inconveniente” por facilitar sus datos reales, explica Cuevas, a pesar de que esto le costó que posibles víctimas no cayeran en su trampa. El subinspector advierte que el grupo se preparaba para cometer estafas más grandes: buscaban locales grandes y ostentosos en “lugares estratégicos” de Barcelona.
En cuanto a los tres colaboradores que los Mossos no han podido detener, dos hombres y una mujer de entre 23 y 33 años, tienen dificultades para localizarlos porque son itinerantes y, por lo tanto, no pasan mucho tiempo en un mismo lugar.