Simulacro a la vuelta de la esquina: el miércoles sonarán las alarmas de riesgo químico y los móviles de 500.000 personas

BarcelonaEste miércoles a las 10 de la mañana pasarán dos cosas que romperán la tranquilidad de los vecinos del área metropolitana de Barcelona. Primero, unas 500.000 personas, según los cálculos de Protección Civil, oirán que su móvil hace un fuerte ruido estridente y, de repente, aparece una pantalla emergente con un símbolo de peligro. Nadie correrá ningún riesgo, ya que será un simulacro de Protección Civil avisando de que es necesario confinarse. El segundo hecho extraordinario será que sonarán las sirenas de riesgo químico del Baix Llobregat, Barcelonès, Vallès Occidental y Vallès Oriental.

El objetivo es comprobar que las sirenas y las alertas funcionan correctamente, familiarizar a la población con los sonidos de aviso y concienciarla sobre la necesidad de confinarse en caso de encontrarse en una situación de emergencia. Por eso se activarán 50 sirenas de 22 municipios y la alerta abarcará un área de medio millón de personas. Coincidiendo con esta prueba, se realizarán varios simulacros de confinamiento en Sant Boi de Llobregat, el municipio catalán que concentra más población en una zona teórica de riesgo químico.

En total se pondrán a prueba 50 sirenas, ocho de ellas de la comarca del Barcelonès. Así, en Barcelona ciudad sonarán las de la Zona Franca y el Port y las que hay en Hospitalet de Llobregat. En el Baix Llobregat se activarán un total de 26, ubicadas en los municipios de Cornellà de Llobregat, El Prat de Llobregat, Viladecans, San Boi de Llobregat, San Juan Despí, San Feliu de Llobregat, Santa Coloma de Cervelló, San Andrés de la Barca, Martorell, Abrera, Olesa de Montserrat y Esparreguera. En cuanto al Vallès Occidental, sonarán en Castellbisbal, Polinyà, Santa Perpètua de Mogoda y Terrassa. En el Vallès Oriental las sirenas que se activarán serán las de Granollers, Lliçà de Vall, Montornès del Vallès y Parets del Vallès. Quedarán al margen de la prueba las existentes en la zona de la Tordera, que se incluirán en el simulacro que se llevará a cabo después del verano en Girona.

La nueva prueba de riesgo químico, que es la segunda de este 2024, va en la misma línea que las que se realizaron el año pasado y tiene por objetivo preparar a la población que vive en una zona de potencial riesgo químico. "Lo que queremos es que conozcan cómo sonarían las sirenas y al mismo tiempo sensibilizar a la ciudadanía para que todo el mundo piense qué debería hacer si se encontrara realmente en una situación como esta", ha explicado la directora general de Protección Civil, Marta Cassany. El sonido de las sirenas durará 15 minutos y, tal y como ya viene siendo habitual, de forma simultánea, los ciudadanos que se encuentren en el área de influencia recibirán un mensaje en el teléfono móvil explicando que en caso de que la emergencia fuera real haría falta confinarse "en el lugar en que se encuentran o en el edificio más cercano si es que están en la calle".

Protecció Civil ofrecerá en su página web y por redes sociales la posibilidad de participar en una encuesta sobre la experiencia. El objetivo de esta herramienta es comprobar si la cobertura teórica se corresponde con la real. Aparte, las personas con sordera recibirán un mensaje de texto informándolas sobre la prueba y también se ha contactado con entidades que trabajan con personas con autismo para indicarles que existen mecanismos para "reducir" el impacto auditivo.