La tauromaquia vuelve (por un día) a la Monumental de Barcelona

BarcelonaEnvejecido, masculinizado y, sobre todo, muy taurino. Así es el público que se ha congregado este jueves en la Monumental de Barcelona para rememorar el pasado de tradición y sangre de la plaza de toros catalana. Casi 300 personas embriagadas de nostalgia y todavía enfadadas por la eliminación del Premio Nacional de tauromaquia han acudido a la cita organizada por la Federación de Entidades Taurinas de Catalunya. ¿El objetivo? Reivindicar el toreo en la capital catalana, que lleva 13 años sin celebrar la muerte en directo de ningún animal. Esta vez tampoco ha habido toros, pero sí los ole, los capots y las banderas de España, que han vuelto a la arena una década después de la prohibición de las corridas de toros.

Ahora bien, a la comunidad taurina catalana le está costando hacer el relevo generacional y no tiene grandes expectativas de cara al futuro. José Luis cree que nunca más se verán toros en Barcelona. "Si somos cuatro gatos, míranos", se lamenta. Como él, la mayoría de asistentes cree que la tauromaquia no volverá a la capital catalana, pero el ambiente de esta tarde en la Monumental es festivo. Paco, por ejemplo, se ha engalanado especialmente para la ocasión: tiene una bandera de España en cada mano y la cabeza de un toro dibujado en el pecho: "Cómo debe ser en un día como hoy", dice sonriendo.

La celebración con motivo del Día Internacional de la Tauromaquia comienza con la lectura de algunos textos de Mario Cabré, "un gran poeta y un gran torero". Mientras dentro de la plaza se lee Manolete, una de las obras de Cabré, se sienten las protestas de unas 40 personas que desde fuera reclaman la abolición de la tauromaquia en el conjunto del Estado. Convocados por Pacma y Animal Save Barcelona, ​​los manifestantes tratan de boicotear, sin éxito, la jornada y proclaman a gritos que "la tortura no es arte ni es cultura". Dentro, mientras, siguen con la lectura del poema: Miedo Córdoba la Mayor / corren sollozos de muerte: / la flor blanca del toreo / se marchita sin moverse.

Pese a la presencia policial, algunos de los asistentes al encuentro taurino se han encarado con los animalistas que están fuera de la plaza. Es el caso de Antoni, a quien han tenido que separar de los antitaurinos. "Son un grupo de maricones", dice mientras sus amigos le hacen entrar en la arena para evitar problemas. Cuenta que echan mucho de menos los toros, una actividad que según él genera muchos puestos de trabajo. Su amigo Francisco le ayuda a rematar este argumento: "A los enanitos, por ejemplo, les han quitado el trabajo. Dicen que nos burlamos de ellos y no es así".

También han acudido a la cita los diputados de Vox en el Parlament Joan Garriga y Alberto Tarradas y el líder del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, ​​Daniel Sirera, que s ha probado con el capote ante las cámaras de los medios de comunicación. Lucía y su mítica canción Entre dos aguas y del griterío de los asistentes. Éste ha sido uno de los platos fuertes de la jornada en la Monumental, propiedad del Grupo Balañá. La organización ha agradecido la valentía a María José Balañá, quien no ha querido responder a las preguntas del ARA.

El acto ha acabado con la lectura del manifiesto, que ha animado a luchar, reivindicar y disfrutar de los espectáculos taurinos. La presidenta de la Federación de Entidades Taurinas de Cataluña, Lorena Paricio, cree que eliminar el Premio Nacional de la tauromaquia "ha servido para fortalecer más la fiesta", aunque sólo han sido capaces de convencer a 300 personas para que la celebren con ellos .