Titán, el cabo de la policía de Llinars vinculado al narcotráfico

Llinars del VallèsLos vecinos de Llinars del Vallès conocen con el apodo de Titán a uno de los cuatro agentes de la Policía Local del municipio detenidos este martes en una operación contra el narcotráfico de marihuana. Los Mossos d'Esquadra los han arrestado esta mañana por su vinculación con un grupo dedicado al cultivo de esta droga y por blanqueo de dinero. Pero la detención de Titán, cabo de la Policía Local, no ha extrañado mucho a los vecinos, que hacía tiempo que lo tenían fichado. "Sorpresa, ninguna. Lo sabía todo el pueblo. Estábamos esperando a que cayera en un momento u otro, porque estaba metido en muchas historias", asegura Anna. Otro grupo de vecinas, que prefieren no identificarse, lo definen como un hombre que "chuleaba cuando patrullaba, con fisonomía de gimnasio", y al que "no es la primera vez que relacionan con algún camello".

Hasta ahora el balance oficial de esta operación, que ha avanzado a primera hora El Periódico, no incluye más detenciones, pero no se descarta que, aparte de los cuatro agentes, haya más arrestados por la implicación en esta trama del tráfico de marihuana, sobre todo de miembros de la banda con la que hacían negocios. En cuanto al cabo de Llinars, ya hacía unos años que levantaba sospechas entre los vecinos. “Se lo llamaba Titán porque se lo ve como un héroe con una parte oscura”, comenta Joan. Las dudas aumentaron cuando, en diciembre de 2019, acabó herido en un tiroteo al lado de un área de servicio de la AP-7. Le dispararon mientras hablaba con un confidente que murió por los disparos. Entonces los Mossos abrieron una investigación que habría desencadenado el dispositivo de esta mañana y que hasta ahora no se había hecho público que hubiera dado resultado.

Los vecinos de Llinars ven a Titán como el líder “de una mafia”. Su nombre volvió a coger fuerza hace pocos meses, cuando circuló un vídeo por WhatsApp sobre el cabo y que en las últimas horas ha vuelto a hacer que los móviles del municipio sacaran humo. Una voz en off robótica habla de él con su apodo, lo vincula con grupos de narcotraficantes y repasa algunos operativos que ha hecho la Guardia Civil contra el cultivo de marihuana en naves industriales de Llinars. De hecho, los vecinos hacen notar, suspicaces, que precisamente la Guardia Civil ha desplegado varios dispositivos en pocos años contra el tráfico de cannabis en el sector industrial del municipio: “Es verdad que hay un polígono, pero son muchas plantaciones. ¿Por qué Llinars?”

Los Mossos investigan si Titán y los tres otros agentes de la Policía Local –uno de los cuales es el hermano del cabo– garantizaban a los narcotraficantes que pudieran cultivar marihuana sin riesgo de ser delatados. El Ayuntamiento, a diferencia de los vecinos, ha expresado “sorpresa” por la implicación de los agentes. Tampoco dentro del cuerpo de policía local -que tiene una plantilla de diecinueve agentes- se lo esperaban. El jefe de la Policía Local, el inspector Amado Ferreras, aseguraba en declaraciones a la ACN que los compañeros están "en shock" y que no había ninguna sospecha sobre la participación de los agentes detenidos en la organización criminal. El consistorio apartará a los agentes si, después de que pasen a disposición judicial, el juez considera que hay suficientes indicios para mantenerlos como investigados. En previsión de que esto pueda pasar, el gobierno municipal ya ha puesto en marcha los trámites para poder relevar a los policías lo antes posible y que no afecte al servicio.

Los Mossos han hecho 28 registros, sobre todo en Llinars y Barcelona, en domicilios particulares y otros edificios, uno de los cuales es la comisaría de la Policía Local de Llinars, que es donde han estado más horas inspeccionando: desde la mañana hasta la tarde, con tres de los cuatro agentes. Los investigadores han salido con cajas llenas de documentación. Antes también habían registrado un restaurante y una nave del polígono de Llinars.