"Hay admiraciones que te hacen pequeño y admiraciones que te hacen crecer"

La historia de amor del atleta Anna Comet

Anna Comet y su pareja
20/08/2025
2 min

La atleta Anna Comet conoció a su marido hace veinte años, cuando ambos eran entrenadores de esquí alpino. Su historia de amor empezó con una gran amistad. "Éramos dos personas que nos entendimos muy bien desde el principio, nos explicábamos muchas cosas y íbamos juntos a todas partes. Es lo que sois muy buenos amigos hasta que un día te das cuenta de que tienes más ganas de estar con esa persona que con cualquiera de los otros amigos. Cuando esto te ocurre repetidamente, empiezas a pensar que quizás ahí hay algo. ser muy bonito", dice Comet.

Conocerse profundamente como amigos, añade, fue interesante porque "no tuvimos que hacer ningún personaje ni intentar agradarnos; cada uno ya sabía cómo era el otro y todo fue sencillo y natural". El primer beso fue una Nochevieja y desde entonces ya no se han separado más.

El atleta tiene claro que la clave para un amor feliz es el respeto y la admiración. "Yo siento una gran admiración por él y él por mí. Hay admiraciones que te hacen pequeño y admiraciones que te hacen crecer –dice Comet, que siente que tan ella como Marc han crecido muy juntos–. Es bonito saber que tienes a alguien al lado con quien puedes contar y todavía nos divertimos juntos. compartimos muchos valores. Sobre todo ahora que somos padres, veo que importante es compartir valores. Es muy difícil educar a alguien si no tienes unas bases compartidas".

Comet cree que a amar se aprende. "Yo he aprendido a amar viendo cómo me han amado a mí. Todo el mundo tiene una manera de amar y yo me he fijado mucho en cuáles me han gustado para intentar transmitir lo mismo a las personas que quiero".

Con Marc, dice, han tardado en tener hijos y eso les ha permitido vivir muchas aventuras: en Perú, Nepal, Costa Rica o Estados Unidos. Ahora, la aventura, explica Comet, es cómo hacer compatible la maternidad con el deporte de élite. "Volverte a poner en forma después de un embarazo es un reto. A las tres semanas de haber dado a luz empecé a entrenar. Tengo mucha energía, pero a las 9 de la tarde ya no soy persona", confiesa risueña.

stats