El análisis de Antoni Bassas: 'Detrás de la vuelta de La Caixa'
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Hoy todo son traídas para La Caixa y para su presidente, Isidre Fainé, porque ayer por la tarde La Caixa anunció que volvía a Cataluña. Desde 2017 la sede la tenían en Palma, en Mallorca.
Precisamos: lo que han vuelto son la Fundación La Caixa y su grupo de inversiones Criteria. La Fundación la Caixa es una de las primeras del mundo. Este año, por ejemplo, su obra social y cultural (cada vez más social que cultural) repartirá 655 millones de euros. ¿De dónde sale todo ese dinero? De los beneficios de Criteria, cuya cartera de activos asciende hoy a unos 29.000 millones de euros. Criteria participa en Naturgy, Telefónica, ACS, Colonial, Veolia y Puig.
Lo que no ha devuelto es CaixaBank, el banco en el que más de medio país tiene una cuenta. La sede seguirá estando en Valencia. De momento vale lo que declaró el máximo directivo de CaixaBank, Gonzalo Cortázar, hace unas semanas: "No hay ninguna novedad, seguimos en Valencia, nuestra vocación de estar en Valencia no tiene plazos, por lo que hablamos de carácter indefinido. No moveremos la sede". Y añadió que la CaixaBank de hoy "ahora es una entidad distinta" de la del 2017, entre otras cosas porque absorbió a Bankia en el 2021.
La decisión de devolver a Cataluña la sede social de la Fundación La Caixa y Criteria es empresarial. Como dijeron ayer en el comunicado, "ya no se dan las circunstancias que causaron el traslado temporal de las sedes a Palma en el 2017", por lo que es bueno para el negocio. Y es bueno para el legado que quiere dejar Isidre Fainé, que este año cumplirá 83, y que desde el 2017 siempre ha tenido que contestar la misma pregunta: ¿cuándo volverá?
Pero, al mismo tiempo, la trascendencia política de la decisión es enorme, y el gran beneficiado es Pedro Sánchez y, después, Salvador Illa. Volvemos al comunicado: "Ya no se dan las circunstancias". Esta mañana en TV3 el ministro de Economía ha declarado: "Ahora se dan las condiciones para tomar decisiones naturales", ergo las condiciones soy yo, Pedro Sánchez, el PSOE. Justo cuando el PP insiste en que
España se rompe, que el Estado se vacía en Catalunya, el mercado le contesta que no, que España está suficientemente unida para que Barcelona deje de ser vista por el mercado como una sede inestable política y jurídicamente. El regalazo que significa esto para Sánchez permite repetir lo que la unidad de España está en peligro cuando gobierna el PP, no el PSOE.
Que en el 2017 se fuera CaixaBank fue un duro golpe para Catalunya, y fue una decisión que podía estar justificada por el pánico del momento, aunque era una alarma insuflada por el Estado, del rey hacia abajo, para conseguir un castigo. Lo que no tenía mucho sentido que se marchara era la Fundación: ¿cómo podía ser impopular o verse afectada por un boicot una Fundación que repartía cada año cientos de millones de euros por toda España? Y que ahora no vuelva CaixaBank, igual. Si ahora ya "no se dan las circunstancias" negativas para la Fundación y para Criteria, ¿por qué no devuelve CaixaBank (que sería el equivalente de la vuelta del Banc Sabadell)? Es el primer banco de la Península, cotiza en el Ibex y el 18% pertenece a España. Aquella salida de La Caixa encomendó el pánico a otras 4.000 empresas. Ahora que La Caixa ha vuelto, en parte, ¿volverán todas?
Buenos días.