¿Dónde podemos ir a realizar una calçotada? Os proponemos 10 sitios
Es tiempo de buscar un lugar al que ir con amigos y familiares a comer la cebolla calzada más querida

A la espera de que la ciudad de Valls organice como cada año la gran fiesta de la calçotada, que este año será el domingo 26 de enero, en el que los participantes baten récords de comida calçots por minuto, le recomendamos algunos de los lugares donde puede ir a comer con el único objetivo de pasarlo bien. Probablemente no haya ninguna otra comida que hermane más amigos y familiares en un manjar en el que es necesario mirar al cielo, como bien decía el añorado director Bigas Luna: "El calçot, el porrón y los castellers salen de la tierra y me hacen mirar al cielo". Y, por último, comer es saborear buenas propiedades nutricionales, porque los calçots aportan fibra y son beneficiosos porque alimentan las bacterias, especialmente las que deben estar más presentes en el colon: los lactobacilos y las bifidobacterias. Sea como fuere, aquí tenéis una propuesta de restaurantes para entablarte mirando al cielo.
Empecemos por Valls:
El Esportell del Bou
Picamoixons, Valls
En medio de Picamoixons, junto a la iglesia, encontramos L'Esportell del Bou. Es un restaurante rústico y amplio que hace un menú de calçotada con todo lo que debe tener: comida ilimitada y tiempo ilimitado, porque no se turnan. El menú consta de aperitivo, calçots, salsa, salchichón, butifarra negra, judías, alcachofa, patata al rescoldo, cordero... Y su naranja y crema. Es muy importante que reserve previamente. Y una curiosidad: el restaurante lo dirige la cuñada del cocinero Eduard Xatruch, del mejor restaurante del mundo, el Disfrutar. A menudo acude y, además, es uno de los restaurantes que siempre recomienda.
Las Velas
Cuello de Lille, Valls
Hace muchos años, este restaurante se llamaba el Mirador del Alt Camp. Al carecer de electricidad, debían iluminarse con velas. De ahí el nombre actual y de ahí, también, que sean unos cracks en el arte de la brasa. El menú de calçotada tiene todo lo que debe tener como buen menú tradicional. Si reserva mesa, al ser un mirador, las vistas son espectaculares. Pida mesa cerca de la ventana y póngase la medalla de expertos ante el resto de comensales.
Casa Félix
Valles
Llevan más de cincuenta años haciendo calçotadas y, claro, tienen la mano rota. Siguen el esquema de menú tradicional, por 44 euros por persona. Y ofrecen la versión infantil (hasta 12 años) por 20. Una de las ventajas es que es también el Hotel Fèlix. Ideal, pues, si sois de los que después de la comilona queréis hacer una buena becaina.
Masía del Plan
El Pla de Santa Maria
En este restaurante defienden que hacen las calçotadas"cómo las hacen las familias en el Alt Camp". Vale 47,50 euros y te puedes llevar el babero de recuerdo, que hace ilusión. Si se les pide previamente, le pueden hacer una cata de vermuts precalçotada. Si sois más de 30 hacen descuento, y también disponen de menú infantil. claro, calçots. En este último caso, el menú cuesta 44 euros.
Hostal Grau
Santes Creus
El menú es infalible: consta de calçots cocidos a fuego vivo, salchichón del Alt Camp, morcilla negra con judías del ganchillo, carne de cordero a la brasa con patata y alcachofa al rescoldo y pastel de crema quemada y, por supuesto, la naranja, pelada y azucarada. Su precio es de 49,50 euros. Y la curiosidad es que si desea reposo, en el hostal también puede hacer noche. De hecho, durante el tiempo de calçotadas puede reservar el pack de calçotada y reposo, que incluye alojamiento en el hotel, cena, desayuno y menú de calçotada. ¡Y todo esto en un lugar emblemático, Santes Creus!
Cal Mosso
Santes Creus
Junto al monasterio de Santes Creus, otro restaurante emblemático, Cal Mosso, que asegura preparar la auténtica calçotada de Valls. Por 48 euros por persona, podrá comer un menú que consta de aperitivo (vermú, aceitunas y secallona); calçots en salsa de calçots de la Vicenta; parrillada de carne a la brasa con cordero de Sarral y salchichón, butifarra negra, frijoles del ganchillo, alcachofas y alioli, y, de postre, crema catalana. El precio también incluye bebidas y cafés.
Restaurante Castaños
San Fost de Campsentelles
Este establecimiento es un lugar sencillo en el que hacen menú entre semana y carta el fin de semana. No tienen un menú encorsetado de calçotada, sencillamente son especialistas en brasa y calçots, y las alcachofas son las estrellas de esta época del año. Mantel de cuadros, platos de barro en la pared y muchas familias suelen ser la tónica habitual del lugar, que tiene unas buenas vistas. Antes de entrar en el comedor encontrará la parrilla al rojo vivo en la entrada, siempre fascinante de ver. Como no hay menú, suele salir más económico.
Belbo Terrenal (Hotel Me Barcelona)
Barcelona
Los calçots, ilimitados. Sí, lo está leyendo bien. Los calçots que puede comer sin límite de número exacto han entrado en los hoteles de cinco estrellas. Y con excelencia. Lo demuestra Belbo Terrenal, situado en la primera planta del Hotel Me Barcelona, en la calle Caspe. Cada sábado y domingo, desde el 1 de febrero, y de 13 a 16 h, en la terraza, amplia y luminosa, las parrillas cuecen los calçots, la carne (costillas y butifarras), las alcachofas y las judías de Santa Pau, que se pueden comer junto con alioli de ajo cocido. Los calçots, tantos como se quieran, se acompañan con la salsa romesco, pan tostado y tomate de mojar. De postre, crema catalana. Y, para beber, vino en porrón, copa de cava y agua. El precio de todo ello es de 55€, incluyendo bebida. Lo mejor de la experiencia: la calidad de los calçots comidos junto al paseo de Gràcia.
Can Cortada
Barcelona
Can Cortada es una masía que hace caer de espaldas por la belleza. Es patrimonio artístico y una buena opción si tiene visitas y ganas de calçotada, pero no tiene la posibilidad de salir de Barcelona. Su menú de calçotada vale 48,90 euros por persona e incluye 20 calçots por cabeza, parrillada de carne y crema. Aparte de bebidas, pan, cafés, infusiones... Es importante tener presente que cuando se hace la reserva debe decirse que se quiere hacer el menú de calçotada.
El disparate
Barcelona
Si lo que se quiere es hacer un menú de calçotada más económico en Barcelona, la opción es El Disbarat, en el barrio de Gràcia. Ofrecen un menú por 34,5 euros que incluye doce calçots por persona, un segundo, postre y bebida. Los segundos van con frijoles con tocino, patata y alcachofa, y pueden ser entraña de ternera, secreto, trío de butifarras, conejo a la brasa o suquet de rape con gambas. Tienen opciones vegetarianas. Y en el postre encontrará muchas variedades. Además de la crema catalana, hay flan de huevo, tiramisú, miel y requesón y helado de limón. Es imprescindible ir con la reserva hecha.