El "reto radical" que plantearon en el Instituto de Arquitectura Avanzada

BarcelonaLas palas de los aerogeneradores pueden durar más de veinte años, sin embargo, uno de los retos de futuro del sector de las energías renovables será reciclarlas. Fuentes de Acciona Energía afirman que en los próximos años en España se recuperarán unas 20.000. De momento las han utilizado para usos tan insólitos como hacer de apoyo a placas de una planta fotovoltaica y para hacer suelas de zapatos, y siguen investigando para ver qué nuevos usos pueden tener en la industria aeronáutica, la química y la construcción . De hecho, construirán una planta en Lumbier (Navarra) para su reciclaje. En sintonía con la dinámica medioambientalista de la compañía se encuentra el pabellón de madera que encargó al Instituto de Arquitectura Avanzada de Cataluña (IAAC) con motivo de la Copa América de vela. "Fue un encargo muy radical", afirma el arquitecto Vicente Guallart, el autor del pabellón barcelonés junto al director de la institución, Daniel Ibáñez, y el también arquitecto Oriol Carrasco. “No podía haber nada que hubiera generado más emisiones de las necesarias, y los materiales debían ser descarbonizantes. Todos los pabellones de los alrededores tienen todo lo que no tiene éste”, subraya Guallart.

Para ser sostenible al máximo, el pabellón no debía consumir energía en su funcionamiento y los materiales debían responder a la economía circular. Otro de los requisitos del encargo fue que debían utilizar el mínimo de madera nueva, por lo que los arquitectos construyeron la base con las maderas con las que construyeron hace dos años otro pabellón con motivo de la Mobile World Capital . Con la ventaja de poder crear un espacio abierto, los arquitectos aplicaron medidas como placas fotovoltaicas y ventiladores que entran en funcionamiento cuando existe demasiada humedad. En cuanto al cierre de la fachada, han utilizado tela de PVC reciclada y algunas palas de aerogeneradores. El cálculo final de las emisiones de la construcción del pabellón es de 25 toneladas de dióxido de carbono, mientras que la madera que se utilizó absorbió 70. Así que el recuento es de 35 toneladas a favor. Asimismo, dicen, estas 25 toneladas son 25 veces menos que si hubieran optado por una estructura metálica. "Se trata de promover la energía sostenible y renovable, reducir las emisiones de dióxido de carbono y hacer pedagogía de lo que se puede hacer con las energías renovables y del autoconsumo energético", subraya la directora de comunicación de Acciona Energía, Emma Reineros.