La familia como infierno cotidiano
La directora Sandra Romero debuta con 'Por donde pasa el silencio', un intenso drama sobre cuidados, masculinidades y relaciones tóxicas
- Dirección y guión: Sandra Romero Acevedo
- 98 minutos
- España (2024)
- Con Antonio Araque, Javier Araque y Mona Martínez
Volver a casa no suele ser una experiencia placentera cuando eres el protagonista de un drama familiar. Por donde pasa el silencio, primer largometraje como directora de Sandra Romero, trata de la visita de un hombre en la treintena a su hermano gemelo con graves problemas de salud. El perfil del enfermo anticipa que no estamos ante un drama social buenista y condescendiente, sinó de otra cosa: Javier muestra un carácter volátil y, desgastado por el dolor, grita su resentimiento.
La película incluye escenas extraordinariamente incómodas en las que los intérpretes profesionales y no profesionales (los tres hermanos protagonistas lo son en la vida real) asaltan a la audiencia con sus reproches apasionados. Romero dimensiona el trabajo actoral como un aspecto central de este relato que se explica a través del lenguaje de la ficción, pero que trata de alimentarse de vínculos y dolores de la vida real. Encuadres con la cámara en la mano, moderadamente oscilantes, acentúan la sensación de retrato sin adulterar. No hay embellecimientos estéticos propios del cine indie de diseño, ni muchas concesiones en general: no nos aguarda un cuento ejemplarizante e inspirador sobre la asunción de responsabilidades en un contexto difícil, sino una dura escenificación de la impotencia colectiva a la hora de cuidar y de cuidarse, de un cierto sálvese quien pueda (a)social para contemplar con abatimiento.