Pol Guasch: "Vuelvo a menudo a 'Las noches blancas' porque contiene la vida que se abre en verano"

Barcelona"Las noches de verano, tan largas. La soledad. La compañía que la cura. La sensación de descubrir cómo se alivia el dolor del corazón. El enamoramiento. El rechazo. El perdón. O el intento de perdón". Así describe Polo Guasch (Tarragona, 1997), autor de Napalm en el corazón (Anagrama, 2021) y Ofrecido en sus manos, el paraíso crema (2024), una de las novelas breves más emblemáticas de Fiódor M. Dostoyevski. Publicada en ruso en 1848, la protagoniza un joven soñador y solitario que durante uno de sus paseos por las calles de San Petersburgo coincide con una joven, Nástenka, por la que enseguida se siente atraído.

"Las cuatro noches y una mañana que cuenta la novela contienen vidas enteras, como las buenas historias: me gusta la forma en que Dostoievski captura ese momento en el que parece que todo toma sentido, que todo encaja, que todo funciona , sin saber por qué –asegura Guasch–. Las noches blancas contiene la vida que se abre en verano, también esa tristeza que va de la mano de las experiencias felices, de los momentos de iluminación. Vuelvo a menudo, sobre todo para recuperar la intensidad con la que se viven las cosas que son realmente importantes: el amor, la soledad". Meses después de publicar la segunda novela, Ofrecido en sus manos, el paraíso crema –que ha sido muy bien acogida por los lectores–, Guasch ha visto como su debut, Napalm en el corazón, aparecía en inglés en la prestigiosa editorial Faber, y el libro ya ha recibido críticas entusiastas, como la que ha escrito David Hayden para The Guardian: "Es profundamente extraño y bonito, impecable a nivel formal y líricamente elevada". Este verano, el libro también llegará a Alemania (Wallstein) ya Estados Unidos (Macmillan).