'Behind the scenes' en Cervelló, el pueblo catalán aspirante a ganar el nuevo 'Grand Prix'

BarcelonaEl secretismo se hacía eco en el Ayuntamiento de Cervelló, un pueblo catalán de menos de 9.000 habitantes que había recibido una llamada de la productora del Grand Prix. El mítico programa de televisión quería volver a ser el rey de verano y Cervelló entraba en sus planes. Por su parte, el municipio del Baix Llobregat se había conjurado: quería repetir la hazaña de Tordera, ganadora del concurso en 1998.

Las semanas previas a la trascendente elección de Cervelló, toda la tranquilidad a la que están acostumbrados los sus habitantes se tranformó en locura. Luces, cámara y acción, los técnicos abarrotaban los rincones del pueblo. El Grand Prix les había pedido un vídeo en el que debían explicar por qué Cervelló era digno de participar en el programa. “El Ayuntamiento informó de la necesidad de grabarlo, pero nadie sabía cuál era el motivo. Sólo había rótulos con '¿quieres participar en un conocido programa de verano?'", cuenta Dani Úbeda, concejal de deportes del pueblo y participante del Grand Prix.

El argumento del vídeo no dejaba indiferente a nadie. Salía el alcalde, pero era una mezcla entre su cargo y el personaje del monopolio, caracterizado por una vara. En el sketch había un comité de expertos para encontrar a los participantes por el concurso, pero cada uno de ellos era peor que el anterior. "Los deportistas caían, eran patéticos. Vamos, un desastre", continúa Dani. Sin embargo, el alcalde acababa explicando por qué el suyo era el mejor pueblo.

La carrera a contrarreloj que acabó obteniendo sus frutos. Cervelló había sido seleccionado. Empezaba la pelea con otros 7 pueblos del estado: Aguilar de Campoo, Alfacar, Brión, Colmenarejo, Los Montesinos, Tineo y Yepes. Conocida la noticia, hubo una fiebre de solicitudes. "Cuando abrimos la inscripción, se habían apuntado 60 personas en todo el tiempo y cuando se confirmó, los inscritos se duplicaron", asegura Úbeda en el ARA.

Los 35 elegidos (30 titulares y 5 suplentes) debían tener un perfil joven y deportivo —según el filtro que ponían en el Grand Prix— para evitar incidentes en caso de caída. Entre los participantes, algunos no sabían de la existencia de este programa porque no habían nacido. Otros enloquecían: "Casi me muero, siempre lo he visto de pequeña, pensaba, ojalá estar allí", explica Alicia Bullón, participante del concurso.

Volverán los Troncos locos, La patata caliente y los Bolos y los disfraces tampoco faltarán: "La de bebé o la de pingüino, además hay una prueba de una rampa en diagonal para escalar, será un constante de caídas. Se rumorea otro reto con música trap...", comenta el concejal. Desde la productora, Europroducciones, desvelan algunos detalles que ya se han visto en los dos primeros programas: "Habrá una rampa para jugar en La Guardería y Escala como puedas, una plataforma giratoria para Alicia en el País de las Caidillas, los Ki-monos, una gincana aérea sobre la piscina, ventiladores gigantes...". Por si alguien echa de menos las míticas manos, estarán presentes, pero no precisamente con la misma forma de siempre.

Además, esa vaqueta convertida en el símbolo y logotipo del programa pasa a la historia "Es una persona disfrazada", celebra Albert Domínguez, también concursante. Eso sí, aquella vaquilla que te daba un revolcón, como bien decía la canción del programa, ahora la sacará a pasear al alcalde cuando active el comodín para molestar a rivales: "Diremos que el estilo de su vestuario será similar a las mascotas de la NBA", continúa la productora.

A pesar de la gran expectación generada, seguramente el miedo a no adaptarse también se encuentra presente: "El enfoque es de hace veinte años casi (bailes, retos…), entonces deben hacer un programa más moderno, son los jóvenes quienes mueven las redes", dice Alicia Bullón. Sobre los ensayos, Úbeda habló con el alcalde de Tordera: "Me dijo que, pese a llevar a los mejores atletas, casi todo depende de la suerte. Vamos, que si te ponen de Bebé goloso mientras te echan bolas en una cinta, no puedes prepararlo". Lo que sí han hecho es un grupo de WhatsApp para pensar conjuras para vencer al azar. "Creo que podemos ser un ejemplo a seguir, y con ganas todo se puede, será una experiencia inolvidable", acaba Albert.

De momento, Cervelló buscará repetir el éxito de Tordera y como bien explica Josep Mercader, uno de los ganadores con el pueblo catalán en 1998, "Regresamos a casa como si hubiéramos ganado la Champions", recuerda. Que tengan suerte.