Guerra entre los árbitros de Primera División: "No te puedo llamar rata porque no llegas ni a hámster"
El presidente del Comité Técnico de Árbitros insultó así al leridano Estrada Fernández, que ha llevado unos audios al juzgado
BarcelonaEl árbitro leridano Xavier Estrada Fernández ha llevado al juzgado de lo social número 32 de Madrid los audios de un seminario del Comité Técnico de Árbitros (CTA) donde, sin mencionarlo directamente, se siente como el presidente del ente, Luis Medina Cantalejo, le insulta y la amenaza. Es una muestra más de la guerra entre Estrada Fernández y el CTA, que suma un nuevo capítulo que deja a Medina Cantalejo en una posición muy comprometida.
La semana pasada se celebraba el juicio que debía determinar si la Federación Española de Fútbol (RFEF) vulneró los derechos fundamentales de Estrada y los abogados del catalán presentaron los audios del citado seminario del CTA. El presidente del comité arbitral cogió la palabra y ante 160 árbitros e informadores, atacó a uno de los presentes: “Decirte rata me parece demasiado, yo creo que no llegas ni a hámster, ni a ratón. Eres un personaje que posiblemente no ha llegado a sus metas deportivas y ahora estás dando muestras del porqué. ¿Querías cargarte la reunión, verdad?”
La reunión a la que se refería Medina Cantalejo era la rueda de prensa donde compareció él mismo junto con Andreu Camps, secretario general de la RFEF. Ese día se obligó a todos los colegiados a hacer acto de presencia para transmitir una imagen de unidad, pero hubo uno que no pasó por el tubo: Estrada Fernández.
Unos días antes, el leridano había denunciado a José María Enríquez Negreira, exvicepresidente del CTA, anticipándose a la Fiscalía. Esta decisión no gustó a Medina Cantalejo, acostumbrado a la obediencia de sus subordinados, y perdió los estribos hasta el punto de definir a Estrada como “un traidor y mal compañero”.
Las amenazas a Estrada Fernández: "Te echaré"
En el contenido de los audios se percibe un Medina Cantalejo beligerante, con un tono impropio de un presidente, que no le basta con la retahíla de insultos, sino que también clama venganza: “En algún momento meterás la pata y te echaré, aunque sea el último que haga en el CTA. Te echaré con toda la mala leche que tengo, que ya sabéis que a veces es mucha. Pero ahora no. No voy a gastar ni un ápice de adrenalina contigo. Ten cuidado, porque si te pillamos te mandaremos a la calle porque eres la mayor deshonra de la historia del arbitraje español”.
Tras este episodio de máxima tensión, el resto de árbitros, informadores y directivos guardaron silencio y seguidamente se procedió a analizar las jugadas polémicas de la jornada.
La cronología del caso, repleta de golpes bajos
- El 24 de febrero, Estrada Fernández presenta una querella contra Enríquez Negreira y su hijo.
- El 2 de marzo, Medina Cantalejo convoca a los medios de comunicación y define a Estrada como “traidor”.
- El 31 de marzo, el árbitro leridano denuncia a la RFEF por reclamar sus derechos laborales.
- En abril se celebra el seminario de los audios.
- El 17 de mayo se produce un hecho crucial: José Alcoba, exárbitro asistente y también específico de VAR, gana el juicio contra la Federación y tiene derecho a percibir una indemnización o reincorporarse a su puesto de trabajo. Un precedente demoledor que favorece a los intereses de los colegiados denunciantes. Ese mismo día se celebró el acto de conciliación entre Estrada y la RFEF, sin que se llegara a ningún acuerdo.
- El 20 de mayo envían Estrada Fernández a una furgoneta para llevar a cabo sus funciones de VAR. Un agravio comparativo injustificable, ya que a la misma hora se disputaban dos partidos de Primera División y la jornada unificada de Segunda. Todos sus compañeros pudieron trabajar desde las salas VOR ubicadas en el edificio de Las Rozas.
- El 21 de mayo, Vinicius fue expulsado a Mestalla. El CTA utilizó la polémica con el Madrid como pretexto para apartar a todos los árbitros VAR por criterios teóricamente deportivos. Pero la realidad distaba mucho de lo que quisieron hacer creer. Entonces, todos los árbitros habían seguido el camino marcado por Estrada y estaban en pie de guerra contra la Federación.