"El Banco Popular estaba secuestrado por el Opus Dei"
El libro 'Opus' del investigador británico Gareth Gore llega a España este miércoles
Madrid"Si ese libro hubiera tenido que salir primero en España, no se habría publicado". Quien hace esta reflexión es el periodista e investigador británico Gareth Gore. Este miércoles, su obra Opus (Pórtico, 2024) desembarca en el Estado traducida en castellano y catalán, tras salir a la venta en Estados Unidos. "Creo que en España el Opus Dei habría utilizado su influencia y su poder para parar su publicación", reitera Gore, que atiende al ARA en Madrid.
A ojos del autor, la influencia de la institución religiosa comprende tres mundos: el empresarial, el político y la esfera social y cultural. De hecho, las más de 500 páginas del libro, de las que más de un centenar son notas bibliográficas, buscan constatar el peso de esta triangulación en España, y cómo se ha extendido a otros lugares del mundo, entre ellos Estados Unidos. Sin embargo, como cualquier historia hay un inicio. Y en este caso es la caída del Banco Popular.
La quiebra en el 2017 de uno de los buques insignia de la banca española es lo que ha permitido a Gore publicar un libro que va más allá de la crónica sobre cómo el Popular pasó de ser una de las entidades más sólidas de Europa a estar al borde de la quiebra. Gore explica al ARA que inicialmente no buscaba hacer un libro sobre el Opus Dei. "Tenía que ser un libro sobre el banco, que más tarde se convirtió en una biografía de Luis Valls-Taberner [presidente del Banco Popular entre 1972 y 2004]", detalla el investigador. Es precisamente a partir de la figura de Valls Taberner –banquero históricamente vinculado al Opus Dei– como Gore descubre que la entidad financiera se había convertido nada menos que "en un cajero automático para el Opus Dei", tal y como se describe en el libro. A partir de ahí, la obra desemboca en su título secundario: Ingeniería financiera, manipulación de personas y el auge de la extrema derecha en la Iglesia católica. Desde la institución religiosa no se esperaron a la publicación del libro en el Estado y ya emitieron un comunicado afirmando que transmite una "imagen falsa" del Opus Dei.
Un banco "secuestrado"
"Durante más de sesenta años, un grupo tenebroso de hombres que habían jurado una vida de celibato y autoflagelación controló en secreto al banco [Popular] y se aprovechó de sus cargos para desviar miles de millones de euros", se explica en el libro. Este grupo se bautizó como Sindicatura y llegó a ser el primer accionista de Popular. De hecho, en los años 60, en pleno franquismo y poco antes del aterrizaje de Luis Valls-Taberner en la presidencia, el Banco Popular "ya se había convertido en el engranaje central de un extenso motor financiero del Opus Dey que llegaba a las profundidades de toda la economía española", explica el libro.
La Sindicatura acabó "secuestrando" al banco. Gore llega a esta conclusión después de haber podido entrevistar a Javier Valls-Taberner, hermano de Luis Valls Taberner, antes de que muriera en el 2022. Según se detalla en el libro, a través de un entramado de empresas y fundaciones vinculadas al Opus Dei, la llamada Sindicatura fue comprando acciones del Banco Popular hasta acumular capital suficiente y, por tanto, poder. "Controlaba casi el 10% del banco cuando éste quebró [en el 2017]", continúa el libro. En el momento de mayor efervescencia en la entidad, la participación valía más de 2.000 millones de euros, asegura el autor.
A través de estas empresas y fundaciones, la institución religiosa recibía importantes flujos de dinero del Banco Popular. Cuando Luis Valls-Taberner accedió a la presidencia, esta maquinaria siguió funcionando con su visto bueno. "[El banquero] llegó a establecer una red de sociedades offshore a lugares como Panamá y Liechtenstein para facilitar la transferencia de grandes sumas de dinero a cualquier lugar del mundo donde el Opus Dei pudiera necesitarlo", se explica el libro.
Expansión internacional
Estos ingresos, pero también otros, fueron los que permitieron al Opus Dei dar el salto fuera de España, donde la institución religiosa nació hace casi cien años de la mano de Josemaría Escrivá de Balaguer. La intención era propagar su influencia en otras partes del mundo y penetrar en la sociedad. Aquí fueron claves las residencias para numerarios, un cuerpo de élite del Opus Dei donde se "reclutaban" a jóvenes estudiantes –todos hombres– con la idea de que fueran altos cargos de la administración y empresarios.
"El Opus Dei siempre ha buscado a personas que ya están en el poder o que están a punto de tenerlo. Siempre se ha fijado en los estudiantes más inteligentes", asegura Gore al ARA. Hoy, esta estrategia se plasma en el centenar de centros educativos, universidades y escuelas de negocio vinculadas a la institución religiosa y repartidas por todo el mundo, también presentes en España: "No me sorprende que haya muchos empresarios del Ibex 35 que estén vinculados al Opus Dei. Esto no quiere decir que estén dando dinero a la institución, creo que ahora tiene más que ver con la influencia", reflexiona el periodista.
El desembarco en otros países, sin embargo, ha ido de la mano de escándalos que Gore también recoge en el libro. Destacan aquellos que afectan a mujeres pobres, muchas de ellas menores de edad, que el Opus Dei reclutó como numerarias para que fueran las "chicas" de los hombres. Algo que también ocurrió en España. Actualmente, Argentina tiene un proceso judicial abierto contra la institución religiosa por tráfico de mujeres y explotación laboral. "[Estas mujeres] tenían condiciones de vida equiparables a la servidumbre", se explica en el libro
La influencia de Escrivá sobre Valls-Taberner
Sin embargo, el papel de Luis Valls-Taberner no puede entenderse sin la influencia que Escrivá y su ambición tuvieron sobre él: "Formaba parte de un grupo que había decidido consagrar su vida al Opus Dei y que había hecho votos de pobreza, castidad y obediencia al movimiento". En el mismo libro se explica cómo el que fue presidente del Banco Popular pasaba noches en una residencia del Opus Dei en las afueras de Madrid donde "se ataba una cadena con pinchos en el muslo como castigo, para mantener el cuerpo en estado de servidumbre y recordar el sufrimiento de Cristo". "Creo que el Opus Dei abusó de él [de Luis Valls-Taberner] y de alguna forma fue una víctima suya", reflexiona el investigador. "Él era un católico creyente y quería hacer cosas buenas con su influencia y el banco, pero hay momentos en los que tiene una batalla moral interna [...]. Ha ayudado a la organización a crear un sistema de abuso y manipulación y, al mismo tiempo, ha sido víctima del propio sistema", añade Gore.
La vinculación con el Opus Dei siguió durante la época de Ángel Ron, que llegó al trono del Banco Popular en el 2006, tras la muerte de Luis Valls-Taberner. Sin embargo, dos años antes ya había sido nombrado copresidente de la entidad junto con Javier. "Lo que ocurrió en el Popular durante aquellos años de crecimiento insólito también ocurrió a otras entidades. La diferencia fue la reacción una vez llegó la crisis [financiera]. El hecho de no poner freno, creo que fue más una decisión de Ron, y no tanto del Opus Dei, aunque la institución se benefició de ello", reflexiona Gore.
¿Nadie lo vio? ¿Ningún organismo supervisor?
— La influencia del Opus es muy discreta. No me sorprende que a nadie le llames la atención, aunque sé que, por ejemplo, que dentro del Banco de España, cuando estalló la crisis en el Popular, les extrañaba la forma de gobierno corporativo de la entidad. Les hacía mala espina, pero nunca llegaron a denunciarlo.
"Quizá sin el poder del Opus Dei dentro del banco y, por tanto, sin una obsesión por la independencia [de la entidad] y el control, se habrían abierto las puertas a otros accionistas antes de quebrar por completo y hoy todavía veríamos el famoso logo del Popular por las calles, pero es difícil de saber", reflexiona Gore. Si bien tener todas las respuestas no siempre es fácil, el investigador británico confía en que, al menos, sí lleguen las preguntas: "Confío en que este libro sólo sea el principio".