Cada catalán pierde 260 euros en la financiación autonómica
El 'conseller' Giró insiste que el modelo actual provoca "la infrafinanciación" de la Generalitat
BarcelonaCatalunya fue la segunda comunidad autónoma que más dinero aportó al sistema de financiación autonómica en 2020, pero, en cambio, solo fue la décima en ingresos recibidos, según datos de la liquidación del sistema de financiación publicados por el departamento de Economía de la Generalitat este jueves. Se repite así el patrón habitual de los últimos años en cuanto al reparto de recursos con el modelo de financiación.
Según los datos, Catalunya aportó hace dos años 2.779 euros por habitante al sistema de financiación, un 17% más que la media estatal, que fue de 2.374 euros per cápita. Solo Madrid, con 3.347 euros por persona, aportó más recursos. Ahora bien, una vez aplicados los diversos métodos de reparto, los ingresos de la Generalitat cayeron hasta 2.519 euros per cápita, un 1,5% por debajo de la media de dinero ingresado por los diferentes gobiernos autonómicos, que fue de 2.558 euros por habitante. Así pues, si calculamos lo que aportó y lo que recibió cada catalán, la conclusión es que cada ciudadano perdió 260 euros.
En comparación con la media, sin embargo, Catalunya recibió 39 euros por persona menos de lo que le tocaba según la media, a pesar de haber aportado 405 euros de más.
En un comunicado, el conseller de Economía, Jaume Giró, ha insistido que los datos "vuelven a poner de manifiesto" el "reparto arbitrario de los recursos entre comunidades" fruto del sistema de financiación actual. "Mientras que Catalunya pierde siempre entre 7 y 8 posiciones, otras comunidades con una capacidad tributaria muy por debajo de la media reciben sistemáticamente más recursos por habitante que Catalunya", ha lamentado.
Giró ha vuelto a denunciar "la infrafinanciación histórica de Catalunya" que provoca que "se evaporen" millones de euros que "cada año genera Catalunya" y limita los recursos que recibe la Generalitat una vez cerrada la liquidación.
Sin negociación para la reforma
Pese a las quejas del conseller, sin embargo, Catalunya no es la comunidad autónoma más perjudicada por el sistema. Sí que se da esta situación en otros aspectos de las cuentas públicas, como por ejemplo la inversión del Estado –sobre todo en infraestructuras–, en las que Catalunya acostumbra a tener cifras de ejecución mucho más bajas que el resto de autonomías. Esto explica que la Generalitat no tenga ahora mismo como prioridad la reforma del sistema de financiación, pero, por el contrario, mantenga un discurso mucho más duro contra el gobierno español en cuanto a las inversiones.
De hecho, el febrero pasado el mismo Giró rechazó de pleno una primera propuesta del ministerio de Hacienda de reforma del sistema, añadiendo que no se encontraba en un proceso de negociación con la administración de Pedro Sánchez.
Quien sí que tiene interés a rehacer el sistema es el gobierno valenciano. El ejecutivo presidido por el socialista Ximo Puig es uno de los más perjudicados, puesto que a pesar de ser solo la novena comunidad autónoma en recaudación por habitante, cae hasta la decimoquinta posición en ingresos, de un total de quince territorios. En la misma situación se encuentran Murcia, que pasa de la undécima autonomía que más aporta a la decimotercera en recursos finales, y Andalucía, que es la decimotercera en recaudación y la decimocuarta en ingresos. Puig ha sido, desde hace años, el principal impulsor de la reforma del modelo en vigor, pero no ha tenido nunca la complicidad del gobierno catalán, ya fuera durante los años del Procés como posteriormente.
El modelo de financiación afecta a quince de las diecisiete autonomías, puesto que Navarra y las tres diputaciones provinciales del País Vasco tienen garantizado un sistema de financiación foral propia, de forma que no participan en la caja común del sistema.