¡Eureka!

¿De dónde sale el 'papel albal' que tienes en el cajón de la cocina?

El origen de la popular marca del papel de aluminio se remite a la década de 1960 en Francia

EUREKA web
15/01/2025
3 min
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El 15 de junio de 2013 la plaza de la Constitución de Albal, en l'Horta Sud del País Valencià, se llenó de vecinos y vecinas. La estampa era única: en las manos, llevaban platos de croquetas caseras, quiches y empanadas hechas con sobres de los días anteriores. Los convocaba la empresa que, desde 1965, ha hecho popular en toda Europa el nombre de este pueblo de 17.000 habitantes. "Tenemos un reto: convertir el municipio de Albal en el que menos comida derrocha de toda España", aclaraba a la prensa Guiomar Uriarte, entonces directora de marketing de Albal, la compañía homónima famosa por producir papel de plata, papel film y varios tipos de envase para la conservación de alimentos. Pero, ¿qué une al pueblo valenciano con la empresa? Aunque en muchas casas siempre se ha relacionado el producto con el municipio, nada tienen que ver, más allá de campañas publicitarias de concienciación.

El origen de la marca Albal debemos ir a buscarlo en la década de 1960, en Francia. En 1965, el grupo Péchiney, por entonces uno de los más importantes del sector del aluminio, empezó a comercializar, por primera vez a gran escala, el papel de plata. Lo hicieron bajo el nombre comercial de Albal, surgido de la combinación de las palabrasaluminioyembalajeen francés. Detrás del producto, existía una trayectoria de más de un siglo. Péchiney trabajaba ese metal desde 1855 y lo hacía en todas sus etapas: desde la extracción de la bauxita –la roca que contiene el aluminio– hasta la transformación y venta en mil aplicaciones distintas. De hecho, a principios de 2000, la empresa llegó a ser la cuarta compañía mundial del ramo, con 320 fábricas en 50 países y una plantilla de casi 35.000 trabajadores. El producto que les hizo más famosos en sus hogares fue el papel de plata.

"El objetivo era proporcionar a los franceses un envase práctico y saludable para mantener los alimentos dentro y fuera de la nevera", rememora la compañía. El papel de plata ya existía desde finales del siglo XIX, pero Albal supo llevarlo al gran consumo, en un formato de rollo. El mismo año, otra empresa, Melitta, puso a la venta el primer rollo de film transparente para envolver alimentos. Albal se fijó y, diez años más tarde, comercializó uno similar, además de una versión para el microondas y una línea de bolsas transparentes aptas para la conservación y la congelación. El destino de ambas marcas acabaron convergiendo: hoy, Albal es propiedad de Melitta, con sede central en Alemania.

Un buen papel empresarial

En 1996 Melitta se juntó con la compañía americana SC Johnson & Son para fundar Cofresco. Éste es el nombre de la compañía que todavía hoy controla Albal, y que agrupa varias marcas dedicadas a la producción de artículos para almacenar y preparar alimentos. Tiene presencia en más de 20 países de Europa, cuenta con un millar de empleados y alcanza 70 millones de hogares del continente. Solo en 2023 facturó 284,6 millones de euros, según los informes financieros de la compañía.

"La clave del éxito no se encuentra sólo en la calidad de su papel de aluminio, sino en haberlo ido desarrollando y mejorando", analiza Neus Soler, profesora de marketing de la Universitat Oberta de Catalunya ( UOC). De hecho, la marca presentó en 1985 una versión reforzada de su papel de plata –el Superalu–, y en 2012, la extraresistente, con una aleación especial que le hace resistente al calor y más difícil de romper. "En un tipo de producto como éste, que es fácil de copiar, esto le ha hecho mantener la ventaja competitiva hacia otras marcas", reconoce Soler. Para la experta, dado que Albal ha sabido mantener la ventaja competitiva a lo largo del tiempo, ha creado un fuerte valor de marca. "Muchos consumidores llaman, en genérico, al papel de plata comopapel albal", dice para justificarlo. La innovación también se ha traducido en diversificación: hoy Albal también comercializa bolsas con cremallera y cierre hermético, papel de horno, film transparente hecho con materiales reciclados, recipientes de aluminio... El último producto de la familia nació en 2022: unas tapas de silicona para mantener frescos los alimentos más tiempo.

Las fechas clave
  • 1965
  • <p><span style="background-color: rgb(255, 255, 255); color: rgb(0, 0, 0);">El grupo Péchiney lanza a Francia Albal, el primer rollo doméstico de papel de aluminio.</span></p> 1975
  • <p><span style="background-color: rgb(255, 255, 255); color: rgb(0, 0, 0);">Albal pone en el mercado rollos de film transparente y para microondas.</span></p> 1985
  • <p><span style="background-color: rgb(255, 255, 255); color: rgb(0, 0, 0);">La marca mejora su papel de plata con una versión reforzada y se estrena en el campo de las bolsas de congelación, con las Ziploc.</span></p> 1996
  • <p><span style="background-color: rgb(255, 255, 255); color: rgb(0, 0, 0);">Se funda Cofresco, la marca que, todavía actualmente, cobija a Albal.</span></p> 2012
  • <p><span style="background-color: rgb(255, 255, 255); color: rgb(0, 0, 0);">La empresa sigue mejorando su producto emblemático, con una versión aún más resistente.</span></p> 2022
  • <p><span style="background-color: rgb(255, 255, 255); color: rgb(0, 0, 0);">La mayoría de sus productos se fabrican con un 70% de recursos reciclados.</span></p> 2023
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