"El frío lo ha matado todo"

Lleida"El frío lo ha matado todo”, asegura Marc Abadias, labrador de Gimenells (Lleida), después de las tres noches de heladas vividas esta semana en las comarcas del Pla de Lleida. La madrugada del domingo los termómetros llegaron a marcar -6 grados en algunos puntos del territorio, una temperatura que el lunes por la noche se repitió en algunas zonas y que afectó de lleno al campesinado, que ha visto afectados sus cultivos.

Según los informes elaborados por el departamento de Acción Climática y por Agroseguro, las heladas de estos días han perjudicado entre un 50% y un 100% de las cosechas de fruta con hueso y almendras de las comarcas de Ponent y del Pirineo. Esto, según cifran, representa cerca de 50.000 hectáreas de fruta dulce y almendras en las comarcas de la Noguera, el Pla d'Urgell, el Urgell, Les Garrigues y el Segrià.

En el caso de Abadias, el labrador calcula que las heladas han afectado toda su producción de fruta con hueso. “Ahora solo me queda esperar a que la aseguradora evalúe los daños y que pague lo que toca”, explica, dando ya por perdida la temporada de fruta con hueso. Según la Federación de Cooperativas Agrarias de Catalunya (FCAC), este cultivo, que incluye el melocotón, la nectarina, el paraguayo, la platerina y el albaricoque, es el más perjudicado por las bajas temperaturas logradas.

Desde la organización también destacan una importante afectación de la manzana, que en algunas zonas puede llegar a pérdidas del 100%, y la pera. Carlos Mòdol, agricultor de peras de Montoliu de Lleida, ha visto afectadas todas sus fincas y sitúa las pérdidas de entre un 70% y 80% de la producción. “Las heladas han sido un desastre, las temperaturas bajas duraban muchas horas, desde las 12 de la noche hasta las 8 de la mañana”, explica el labrador.

Según Mòdol, “hay gente que ha hecho fuego para intentar frenarlo y también se han utilizado sistemas de riego, pero la fruta no puede aguantar tres noches seguidas con temperaturas bajo cero”. El agricultor ahora está probando de recuperar parte de la cosecha con productos químicos “para intentar remontar”, aunque no lo ve claro y asegura que “se perderán muchos ingresos, por no decir todos, y los gastos seguirán”. Jaume Gardeñes, responsable de fruta dulce del sindicato Unió de Pagesos (UP), también está tratando parte del cultivo de manzana para salvarlo. “Llevamos entre 48 y 72 horas sulfatando árboles frutales con productos químicos, como aminoácidos, para intentar reducir el daño”.

Alguns agricultores, sin embargo, se muestran escépticos con este tipo de prácticas. Oriol Ribes, labrador de Alcarràs, todavía no ha evaluado las posibles pérdidas, pero afirma que, “en fruta con hueso, lo que está muerto ya no se puede recuperar”. Según Ribes, es demasiado temprano para valorar los daños, aunque remarca que la situación es complicada porque “la floración se ha avanzado respecto a décadas atrás y estas heladas de abril, que antes también podían pasar, afectan más duramente los cultivos”.

La campaña de verano, afectada

“Hacía casi 30 años que no nos encontrábamos con una helada así”, asegura Gardeñes desde UP. El agricultor expone que ya hace tiempo que las producciones no son muy buenas y asegura que “hay fincas que hace más de tres años que no pueden cosechar”. “Por el momento de abril en el que estábamos esperábamos tener una muy buena campaña este año, pero no será así”. Según el agricultor, esta temporada la fruta perderá calidad: “No será excelente, pero no quedará otra opción que venderla”. El agricultor también asegura que la baja producción afectará “miles de puestos de trabajo, tanto directos como indirectos”, y que “todo el sector lo pasará mal”.