El gas y el buen tiempo dan una tregua fugaz al precio de la luz

La electricidad en el mercado mayorista volverá a dispararse mañana un 74%, hasta los 181 euros

El gasoducto North Stream, al mar Báltico, entra en funcionamiento este miércoles / EFE
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BarcelonaEl 2021 empezó con el precio de la electricidad en el mercado mayorista alrededor de los 60 euros el megavatio hora y siguió con una escalada que lo ha conducido hasta máximos históricos nunca vistos, por encima de los 300 euros. En los últimos días, sin embargo, la luz ha entrado en una espiral bajista que ha durado cuatro días y que ya empieza a difuminarse. Este martes el precio se ha situado en una media de 104 euros, un 8,6% más que el lunes, y se disparará un 74% mañana, hasta los 181 euros. Este respiro navideño, apuntan los expertos, se explica por la relajación del precio del gas, el buen tiempo -que ha hecho bajar la demanda energética- y la parada de las fábricas por las vacaciones.

"Si hace un año y medio nos hubieran dicho que el precio estaría por encima de los 140 euros, nos habría parecido imposible, pero ahora celebramos que se acerque a los 100", apunta el presidente de Grupo de Gestores Energéticos, José Enrique Vázquez. En su opinión, el clima ha jugado a favor de la moderación del precio de la luz, pero este efecto durará poco y los precios volverán a subir en enero y en febrero con la previsible bajada de las temperaturas. "La industria se volverá a poner en marcha y necesitaremos de nuevo los ciclos combinados de gas", explica este experto.

En su opinión, la exportación de gas de los Estados Unidos, que también podría explicar parte de la relajación en el incremento del coste de la electricidad, tampoco tendrá un impacto duradero. "No se ha resuelto el problema ni con Putin ni con Argelia", recuerda. En las últimas semanas y ante el recorte en los envíos de gas ruso en plena crisis con Ucrania, Europa ha empezado a recibir barcos norteamericanos cargados de esta fuente de energía. "Era una pequeña esperanza, pero a la larga si los Estados Unidos tienen que ayudar a alguien no será el Viejo Continente, sino el Reino Unido, con el que tienen un pacto energético muy potente", añade Vázquez. El mercado ibérico, recuerda, no está tan pendiente de Putin como del precio marcado por los argelinos.

Precios más caros en enero

¿Y qué tiene que pasar para que el precio del gas deje de ser un problema en 2022? Joan Vila, presidente de la Comisión de Energía de la patronal Pimec, lo tiene claro: "Más capacidad de generación de renovables". El empresario considera que el mercado se ha vuelto del todo cortoplacista y no está previendo los problemas que seguirán apareciendo en el futuro. "Esto es consecuencia de un modelo económico que se ha basado en la especulación", denuncia. Considera que la gran volatilidad de precios en un bien tan esencial como la electricidad es otro "síntoma del agotamiento" de este sistema, que acaba teniendo graves efectos en la economía real de las familias y las empresas. "Los meses de enero y febrero serán altos, no hay ninguna duda", coincide.

Para Vila, la situación actual también nace de un problema regulatorio. Desde la patronal, proponen un sistema en el que haya tres subastas diferentes, para cada fuente de energía, para que el precio del gas deje de tener tanta influencia en el mercado mayorista. "Hasta hace poco era una anomalía, pero era asumible. Ahora ya no", indica el experto. En este sentido, lamenta que Europa se esté convirtiendo en un freno a la hora de cambiar la regulación y la manera en la que se fijan los precios de la energía.

Cuando faltan tres días para que se acabe el 2021, el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, todavía tiene una promesa por cumplir. El dirigente socialista aseguró en una entrevista en septiembre pasado que los españoles acabarían pagando de media por la factura de la luz menos que en 2018, el último año con la electricidad más cara. "Lo que prometió era una falacia y lo sabía desde el primer día", dice José Enrique Vázquez, del Grupo de Gestores Energéticos, que pone en entredicho el cálculo matemático que usará el ejecutivo para justificar las palabras de Sánchez.

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