Los gimnasios DIR piden un rescate de 25 millones al Estado
La deuda y la pandemia empujan a la cadena de fitness a solicitar el apoyo financiero de la SEPI
Las dificultades del grupo de gimnasios DIR han empujado a la compañía a pedir un rescate al Estado a través de la SEPI, la empresa pública que ha habilitado un fondo especial para empresas perjudicadas por el covid, según ha podido confirmar el ARA. Esto se sumaría al crédito de 2,6 millones que la compañía recibió de la Generalitat en diciembre pasado, tal como avanzó este diario la semana pasada.
En concreto, DIR ha pedido 25 millones a la SEPI, una cifra equivalente a toda la deuda de la empresa de fitness y que es el importe mínimo que se puede pedir a este fondo especial antipandemia. La petición, presentada a principios de marzo, se realizó a través de la sociedad Centres d’Activitats Físiques SA, holding que agrupa a las numerosas compañías del grupo de gimnasios, que da trabajo a más de 900 personas.
La SEPI tiene seis meses para aceptar o rechazar la petición. Transcurrido este tiempo, si no se ha dado respuesta, se da por desestimada. El problema es que, según las fuentes consultadas, los acreedores han puesto como límite el mes de junio para que DIR consiga el apoyo de la SEPI. Para los acreedores, la entrada de la empresa pública en el capital de DIR sería la única solución en una compañía muy endeudada ya antes de la pandemia y que ahora se ha encontrado con una caída en picado de los ingresos por culpa del covid. En cambio, DIR considera que la reapertura total de los gimnasios permitiría mejorar su situación rápidamente.
Acceder a la SEPI no es fácil, y la prueba es que a estas alturas las empresas que han recibido la ayuda del fondo anticovid se pueden contar con los dedos de una mano: Air Europa, Ávoris (división del grupo Barceló), Duro Felguera y Plus Ultra. El rescate de esta última compañía, una aerolínea casi desconocida, ha levantado una gran polvareda en Madrid y seguramente hará que la SEPI sea "más restrictiva", según fuentes próximas a esta empresa pública.
De hecho, hay otro grupo de gimnasios, Holmes Place, que también pidió el rescate a la SEPI y no lo ha conseguido, según avanzó El Confidencial. Holmes Place tiene en España una dimensión similar a la de DIR, tanto en facturación como en deuda. La cifra que este grupo de origen británico había pedido a la SEPI (26 millones) también era parecida a la de su competidor catalán.
Para acceder al dinero del fondo anticovid de la SEPI (que está dotado con 10.000 millones de euros) se tienen que cumplir una serie de requisitos. "Tienen que ser empresas muy tocadas, que en caso contrario morirán", afirman los que conocen el funcionamiento de este mecanismo. Entre las condiciones que se tienen que cumplir, quizás la más subjetiva es que tienen que ser "empresas estratégicas". En caso de que acceda, la mayoría del dinero de la SEPI tiene forma de préstamo participativo (como en el caso del crédito concedido por la Generalitat) y el Estado podría convertirse en accionista de la compañía. Si esto pasara, el gobierno central pasaría a ser el accionista mayoritario, puesto que DIR tiene un capital de poco más de tres millones de euros.
El escenario antes del covid
En el caso de DIR, el covid se añade a las dificultades tradicionales de un grupo que llegó a la pandemia con una deuda elevada, según las voces con las que ha hablado este diario. Las fuentes explican que la deuda financiera neta suponía unas diez veces su ebitda (beneficios antes de impuestos, intereses y amortizaciones) antes del covid, una proporción que se considera arriesgada. Aun así, el fundador de DIR, Ramon Canela, asegura al ARA que el ebitda fue de 6,3 millones en 2019, año del que la compañía todavía no ha publicado los resultados consolidados.
Aún así, estas mismas voces admiten que los números son complicados de hacer porque es una empresa con muchas sociedades y diferentes tipologías de deuda. En concreto, el grupo está integrado por 42 empresas: cada gimnasio es una sociedad diferente y, por otro lado, hay sociedades que agrupan algunas actividades, como Recepcionistes DIR SA o DIR Sistemes d’Informació SL. En casi todas DIR tiene la mayoría del capital, pero no hay ninguna donde tenga el 100%. Siempre tiene algunos pequeños accionistas.
El grupo, líder en Catalunya, ha sufrido una dura competencia en los últimos años, con el auge del fitness y la llegada de nuevas cadenas de gimnasios, especialmente las low cost.
Pero la crisis del covid ha afectado a todo el sector y, en el caso de DIR, ha hecho caer la facturación a la mitad. En 2019 ingresó más de 50 millones y la previsión es que en 2020 la cifra estuviera alrededor de los 25 millones. Ramon Canela, fundador del grupo y propietario de un 85% del accionariado, lo explicó en una entrevista a TV3 este lunes: "Nosotros facturábamos 50 millones. Si nos han cerrado cinco o seis meses, ya puedes hacer números", explicó.
De la deuda de 25 millones que tiene DIR, aproximadamente la mitad está en manos de los bancos y la otra mitad en manos de inversores particulares, que básicamente son clientes. Este junio a DIR también le vence una emisión de un millón de euros que está en manos de este tipo de pequeños inversores.
Para poder acogerse a su rescate, la SEPI debe considerar que la compañía en cuestión es una empresa estratégica. ¿Pero cuáles lo son? Según se detalla en el BOE, serán compañías importantes por su relación con la salud, la seguridad pública o por su carácter tractor para el resto de la economía. También se valoran aspectos como una naturaleza innovadora o el carácter esencial de los servicios que presta.