Las industriales claman contra el aumento del coste energético

BarcelonaEl incremento de los costes de la energía compromete la rentabilidad de las empresas industriales. En esto han coincidido cuatro representantes del sector en Catalunya, reunidos en un debate en el Círculo Ecuestre. El más claro de todos ha sido Julio Rodríguez, consejero delegado de Ciments Molins, que ha dicho que el aumento de los costes de la energía compromete un 25% del resultado operativo de la compañía. Pero lo han secundado los otros tres: Jordi Mercader, director general de Miquel y Costas; Xavier Pujol, consejero delegado de Ficosa, y Francesc Rubiralta, presidente de Celsa.

El problema, además, se agrava en el caso de Ficosa por la crisis de los microchips, que "se ha convertido en una guerra diaria de aumentos de precios", según Pujol. El problema resta competitividad. Lo ha explicado Francesc Rubiralta: mientras en España el precio del MWh supera los 200 euros, en la vecina Francia es de 45 euros. En definitiva, un aumento de precios que, de una manera u otra, se acabará trasladando a los clientes y, finalmente, a los consumidores. "La inflación es lo último que necesitábamos después de dos años de covid", ha remachado Xavier Pujol. Pero el horizonte no está claro. Esta subida de precios "no es tan coyuntural como les interesaría en los bancos centrales", ha apuntado Mercader.

Una inflación que no solo se produce por el incremento de precios de la energía y las materias primas, sino también por la falta de talento y gente formada. Quien lo sufre más es Ficosa. Xavier Pujol ha explicado que en las fábricas de Estados Unidos hace dos años ya que sufren la denominada Gran Dimisión, es decir, empleados que dejan el trabajo, sea para dejar de trabajar o para cambiar de trabajo. "La inflación de la mano de obra no creo que se solucione", explica Pujol, que en el ámbito global también cree que la escalada de precios es "peor de lo que nos dicen" y que "ha venido para quedarse".

En lo que también han coincidido todos los participantes es, por un lado, en pedir a las administraciones un marco jurídico estable para poder hacer con tranquilidad las grandes inversiones que requiere la industria, sobre todo, como ha dicho Rubiralta, para pasar de una economía carbonizada y lineal a una economía descarbonitzada y circular. Y, en segundo lugar, también han pedido que se haga un buen uso de los fondos europeos. ¿Qué se puede pedir a las administraciones? La respuesta de Xavier Pujol es clara: "Que regulen según las necesidades, pero, sobre todo, que no molesten".

Reforma laboral

Con matices, todos los participantes se han mostrado a favor de la reforma laboral, a pesar de pedir más flexibilidad para hacer frente a las puntas de demanda. Pero también ha habido críticas para los políticos. "Tenemos unos administradores malos", ha protestado Xavier Pujol, que ha pedido más coordinación en la transición energética. Y también un mejor trato fiscal para Catalunya. "Una Catalunya moderna tiene que tener una estructura fiscal diferente", ha indicado, porque "si no, la locomotora de España se empobrece".