Una marca de relojes de lujo en el local barcelonés de los 20 millones de euros

BarcelonaUn inversor internacional ha comprado por unos 20 millones de euros el local que se encuentra en el edificio de paseo de Gràcia 111, el inmueble de pisos de lujo que gestiona Mandarin Oriental Residences. El edificio, que en su día adquirió el fondo KKH Property Investors, había sido conocido como sede del Deutsche Bank y alojaba oficinas, sin embargo, después de una gran rehabilitación integral, se convirtió en un inmueble de pisos de lujo, una vez que el gobierno municipal vetó el proyecto inicial de hacer un hotel de lujo de la cadena Four Seasons.

La operación de venta ha tenido el asesoramiento inmobiliario de la consultora Cushman & Wakefield y CBRE por la parte vendedora y de Font&Yildiz por la parte del comprador. El local, junto a la emblemática Casa Seat, se convertirá a partir de 2025 en una tienda insignia de la marca de relojes de lujo Patek Philippe, a la que no pueden acceder todos los públicos: el reloj más barato tiene un precio superior a los 17.000 euros.

Cushman & Wakieflield no sólo ha asesorado en la venta del local, sino que a principios de este año también asesoró en el alquiler a la marca de relojes de lujo. Francesc Oltra, socio de capital markets de esta consultora, destaca que la operación demuestra el interés de los inversores en la compra de locales comerciales. "Desde 2020 que no se vendía un local en el paseo de Gràcia, no por falta de compradores, sino justo por el contrario, por la falta de bonos locales en venta", indicó. En este sentido, Oltra señala que el comercio vive "un momento muy sólido y los inversores lo saben y apuestan por ese tipo de activo".

Atracción por el lujo

El aterrizaje de Patek Philippe en este lugar del paseo de Gràcia muestra una vez más el atractivo de esta vía de Barcelona para el comercio de lujo, sobre todo en lo más alto. Precisamente el local está en un edificio considerado como uno de los más lujosos de la ciudad. De hecho, este inmueble fue protagonista ya por sus precios, en este caso residenciales, cuando se vendió el ático.

Fue el precio más alto pagado por un piso en España, 40 millones de euros, cuando se realizó la operación en enero del 2023. Es un piso de 650 metros cuadrados y unas vistas espectaculares de toda Barcelona. Se trata del piso más caro de la historia de España, tanto por el precio global como por el del metro cuadrado: 61.538 euros el metro.