Inteligencia artificial pública y gratuita: la vía eslovena que no convence a los expertos
El gobierno presenta una plataforma para garantizar el acceso a esta tecnología, con el reto de garantizar la privacidad y la soberanía digital a los ciudadanos
BarcelonaEs la gran revolución del siglo. La inteligencia artificial ha transformado la industria, las finanzas, la salud y la vida de los ciudadanos. En poco más de tres años, los usuarios se han acostumbrado a las gestas tecnológicas de ChatGPT y otros procesadores de inteligencia artificial para externalizar desazón y decisiones del día a día que antes requerían más tiempo y esfuerzo. Y todo apunta a que estamos sólo al principio.
Pero hay un detalle importante: esta revolución está principalmente en manos de empresas privadas, muchas de las cuales ofrecen funcionalidades sólo accesibles con suscripciones de pago. Así, los servicios más avanzados quedan fuera del alcance de un gran grosor de la población, un agravio que podría ser un obstáculo para el acceso universal a una tecnología que se está volviendo esencial para el funcionamiento de la sociedad.
Ante este acelerado auge, Eslovenia quiere establecer un precedente y convertirse en el primer país del mundo en crear una plataforma nacional de IA generativa con acceso gratuito para todos los ciudadanos. El objetivo es garantizar que todos los individuos, empresas, universidades e instituciones del país puedan utilizar las herramientas más punteras sin depender de las grandes corporaciones.
La estrategia, presentada por el primer ministro, el liberal Robert Golob, a mediados de noviembre, pretende garantizar el acceso gratuito a la IA generativa, es decir, la que crea nuevos contenidos, textos, sonidos e imágenes, a todos los eslovenos y asegurar "que los datos no puedan ser gestionados por multinacionales, sino únicamente por el propio usuario", explicó. El ejecutivo asegura que el procesamiento y almacenamiento se ubicarán dentro de la Unión Europea y que el usuario conservará el control sobre sus datos, algo que, a priori, debería reforzar la privacidad de los ciudadanos respecto a modelos comerciales entrenados con datos agregados. Todo ello se hará en lengua eslovena, en una apuesta por desarrollar más contenido en esta lengua que hablan dos millones de personas.
La plataforma, que debería entrar en funcionamiento durante la primera mitad de 2026 según los plazos anunciados por el gobierno, contará con una inversión de 10 millones de euros anuales. Este jueves se cierra la primera etapa de licitación para las empresas que quieran optar por ella.
Pero si los usuarios ya tienen acceso a la versión gratuita de herramientas comerciales como ChatGPT o DeepSeek, ¿cuál es el sentido de destinar recursos a una plataforma propia? El experto en inteligencia artificial del instituto esloveno Jozef Stefan lo explicaba en la radio nacional con la siguiente metáfora: "La diferencia es tan grande como presentarse a una carrera con un coche urbano medio en lugar de un monoplaza de alta competición. Si queremos competir, necesitamos el mejor equipamiento", sentenciaba.
Si bien el gobierno no ha entrado a detallar las especificidades de la iniciativa, de la licitación se desprende que el objetivo final no es desarrollar un modelo propio de IA generativa desde cero, sino crear una plataforma mediante acuerdos con proveedores y, en paralelo, consolidar infraestructura para desarrollar y desplegar modelos propios.
Menos soberanía digital
Sobre cómo articular esta fórmula, hay mucha controversia. Un acuerdo del Estado con grandes proveedores como ChatGPT, Google Gemini o Anthropic Claude conseguiría efectivamente garantizar el acceso gratuito a la tecnología más puntera. Pero, paradójicamente, alejaría a Eslovenia de tener soberanía digital, ya que la haría más esclava de los intereses y de las orientaciones nacionales de las grandes corporaciones. Esto es lo que denuncian decenas de expertos y organizaciones de diversos ámbitos que han dirigido una carta abierta al primer ministro expresando sus preocupaciones. Opinan que esta iniciativa "pone en peligro la seguridad y se opone a las orientaciones estratégicas nacionales y europeas".
Uno de los reclamos de la carta es que los recursos destinados a la nueva plataforma deberían servir al desarrollo de una IA nacional "pública y de código abierto". Pero lo que genera más inquietud son las dudas sobre la seguridad de los usuarios y de los datos personales. En un país donde el 88% de los niños entre 12 y 15 años y el 92% de los alumnos de secundaria utilizan esta tecnología, preocupa cómo se garantizará que los datos sean privados y no estén a disposición de terceros para el entrenamiento de modelos comerciales, tal y como ha asegurado el primer ministro.
La iniciativa, que ha sido recibida como una medida electoralista por la falta de concreción, también ha decepcionado a una parte del sector tecnológico del país, que da por hecho que el contrato se adjudicará a alguna empresa estadounidense. "Lo que no ha entendido el sector del país es por qué se han favorecido grandes tecnológicas americanas en lugar de las europeas o por qué no se opta simplemente por apoyar el desarrollo de la IA aquí: tenemos grandes científicos y logros académicos en este ámbito", dice al ARA Blaz Abe, periodista económico del diario esloveno Finance Business News Daily. Abe sostiene que, de lograrse aplicar correctamente, podría ser una iniciativa interesante y reproducible a escala europea, pero se mantiene prudente: "Es difícil mojarse con la información que se ha publicado hasta ahora".