Turismo

El lento regreso del turismo

El sector turístico cierra el 2021 con 5,6 millones de visitantes internacionales, menos de la mitad que en 2019

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El consejero de empresa y Trabajo, Roger Torrent, este miércoles en Madrid.

MADRID"Queremos que [el 2022] sea el año de la reactivación turística, a pesar de las incertidumbres". Así se ha expresado este miércoles el conseller de Empresa y Trabajo, Roger Torrent, que a pesar de que no ha querido anticipar una previsión concreta de cuántos turistas esperan que lleguen este año –"Es demasiado aventurado", ha dicho– se ha mostrado optimista de cara a "consolidar la recuperación". Pero esta es una carrera de fondo para la que todavía falta más de la mitad del recorrido: si bien el 2021 cerró con la llegada de 5,6 millones de visitantes internacionales (un 101,3% más que en 2020), la cifra continúa estando un 62% por debajo de los niveles previos a la pandemia, según ha explicado Torrent durante la inauguración del estand de Catalunya en la feria internacional de turismo Fitur, que ha levantado las persianas esta mañana en Madrid.

Después de dejar atrás el año negro que supuso el 2020 para el turismo, el sector abraza con optimismo este 2022. Por un lado, por la aceleración de la vacunación en todo el mundo y, por el otro, por el impacto más bajo que las autoridades atribuyen a la variante ómicron a pesar de los contagios. "Tenemos un sector turístico preparado", ha sostenido Torrent después de casi dos años de convivencia con el virus del covid-19. Ahora bien, para cumplir las expectativas y "consolidar" de nuevo la llegada de visitantes de otros puntos del mundo, la Generalitat tiene claro que es necesario que vuelva un viajero muy concreto: el americano y el asiático. "Es indispensable para la supervivencia", apuntan desde la Agencia Catalana del Turismo, donde confían en que sea un mercado que se complemente con el de Europa Central.

De hecho, el visitante internacional representa la mitad del peso de la actividad. Según datos de la Generalitat, un 49,2% de los turistas que llegaron en 2019 eran extranjeros. Además, es un visitante que deja más dinero que el turista interior o del Estado. En 2021 la llegada de viajeros internacionales a Catalunya generó 4.955 millones de euros hasta noviembre (todavía lejos de los 21.325 millones de 2019), mientras que el gasto medio por persona extranjera fue de 954 euros.

Con todo, Catalunya fue la segunda comunidad, solo por detrás de las Islas Baleares, que recibió más turistas extranjeros hasta noviembre de 2021 (un 18,4% del total del Estado). Precisamente sobre liderazgos, Torrent ha querido destacar el papel de Barcelona como "polo de atracción" y la importancia de volver a situarse en el "centro". "[La ciudad] ha sufrido como la que más la caída del turismo", ha lamentado el conseller, que ha descartado que Madrid pueda "ser un rival".

El visitante que ha respondido mejor ha sido el catalán y del resto del Estado. En el primer caso, Catalunya contó con un total de 8,1 millones de turistas catalanes hasta noviembre del año pasado (todavía un 10% por debajo de los niveles del año 2019), mientras que los turistas provenientes de otros puntos de España fueron unos 4,5 millones (un 17% menos que en 2019). Torrent ha apuntado que el 2022 no solo tiene que ser un año de "consolidación" de las cifras, sino también de un "modelo turístico de más calidad y sostenible desde el punto de vista ambiental y social".

¿Adiós al covid?

Fitur, la feria turística más importante de Europa, que este año reunirá a 7.000 participantes y cuenta con la presencia de 107 países, ha puesto en marcha motores con ganas de dejar atrás el miedo al covid y moverse como antes entre países. "Compartimos con el sector privado que este año se consolidará la recuperación", ha dicho la ministra de Industria y Turismo, Reyes Maroto, que también ha destacado la importancia de "aumentar el gasto pero también la calidad del turismo". En cuanto a la actividad turística, Maroto ha anunciado que el 2021 cerró con 2,3 millones de afiliados al sector (233.000 ocupados más que un año antes), cosa que según la ministra se traduce en una "resistencia" del sector para abordar la recuperación.

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