Periscopio global

Milei frena la inflación en su primer mes, pero se dispara el precio del transporte y la luz

El presidente argentino retira los subsidios al transporte público ya la energía

3 min
Javier Milei durante un debate electoral.

Buenos AiresUn 20,6% de inflación en el mes de enero y un 254,2% de inflación interanual, la más alta del mundo después de Venezuela (193%), Líbano (192,2%) y Turquía (64,8 %). Son cifras a las que los argentinos ya se han acostumbrado. También son las primeras estadísticas de un mes entero bajo la gestión del presidente Javier Milei. En diciembre, la inflación fue del 25,5%. En la primera entrevista televisiva después de su gira por Israel e Italia, Milei ha dicho que, aunque un 20,6% es un número "horroroso", la tendencia es buena. El presidente argentino ha manifestado la convicción de seguir implementando el plan económico “hiperortodoxo” que prometió: saneamiento del Banco Central, sinceramente del mercado cambiario, reducción drástica del gasto público y fin de la obra pública. A la entrevista añade: “Nunca podemos olvidar la herencia que hemos recibido”, en referencia a la gestión anterior, la del exministro de Economía Sergio Massa, a quien ganó en segunda vuelta electoral.

Pocos días antes de que arranque el curso lectivo, los argentinos se van reincorporando de las vacaciones de verano con incertidumbre y confusión en lo que se refiere al futuro inmediato. Uno de los cambios más notorios en su vida cotidiana ha sido el aumento del precio del transporte público: el gobierno ha retirado su subsidio y un viaje en autobús ha pasado de costar 76 pesos (unos 70 céntimos) a 270, casi cuatro veces más, y se prevé que siga subiendo hasta los 757 en junio. El otro subsidio clave que retirará el gobierno a partir de ese mes es el de la energía: la próxima factura de la luz incorporará un aumento del 150%. En conversación con el diario ARA, el economista Luis Secco defiende que éste es un "sinceramente necesario de los precios de los servicios públicos". Aumentar el precio del dólar, de los combustibles y de las tarifas de los servicios públicos era “inexorable”, según el experto: “Había que hacerlo a toda costa para poder estabilizar la economía”.

En la calle, sin embargo, no todo el mundo piensa lo mismo. Sobre todo quien toma el transporte público cada día para ir a trabajar a cambio de un sueldo que cada día da por comprar menos. Y es que los sueldos, por ahora, no han aumentado. De hecho, en la primera negociación colectiva entre patronal, sindicatos y gobierno se rechazó la propuesta sindical de aumentar el sueldo mínimo en un 85%. En el Mercado del Progreso, en el barrio porteño de Caballito, Dolores hace cola en la carnicería. Reconoce que ella ha tenido que apretarse el cinturón, pero que lo hace “a gusto, porque al fin hay alguien serio gestionando la economía”. Juan, propietario del negocio, coincide con ella, y explica que él ha subido los sueldos a sus empleados, "porque vienen en transporte público", pero también está a favor de que se pague "el precio real que tienen las cosas". Desde el puesto de al lado, Marcelo, pescadero, se lo discute: “¡Pero si ya nadie sabe cuánto valen las cosas!”

Comienzo de curso

En Buenos Aires, el curso escolar arranca el próximo lunes 26 para la educación primaria y el 1 de marzo para la secundaria. José es propietario de un pequeño negocio de papelería que vende material escolar, y nota una gran diferencia en el consumo respecto al año pasado: “La gente viene, pregunta los precios, busca otros, vuelve, y quizás compra un lápiz, una libreta, una goma de borrar –explica a este diario–, mientras que antes llevaban la lista que les mandaban de la escuela y lo compraban de repente”. Destaca que ahora las familias se agrupan para realizar compras al por mayor. Su sector es especialmente vulnerable a la percepción de la gente, ya que material escolar se compra puntualmente a lo largo del año, pero los precios suben cada mes y la inflación se acumula. Lo mismo ocurre con los libros de texto: Leo, propietario de una pequeña librería de barrio, hace el cálculo. Un libro de inglés de segundo de primaria ha aumentado un 300% respecto al pasado año. Él mismo se sorprende con la cifra: “Es imposible hacerle frente”, dice con angustia.

En conversación con el ARA, el economista Martín Rapetti opina que Milei “tendría que marcar un gol pronto” para mantener su popularidad. Es un presidente que depende especialmente de la opinión pública, puesto que está en minoría en el Parlamento y su partido no gobierna en ninguna provincia. Este experto ve difícil que la economía crezca enseguida y cree que la inflación rondará entre el 15% y el 20% mensual hasta mediados de año, cuando Milei, por cierto, pretende iniciar el proceso de dolarización de la economía.

stats