Grudiva despide a 37 trabajadores de su fábrica en Granollers y se lleva la maquinaria a la India

BarcelonaLa empresa industrial Grudiva ha presentado un expediente de regulación de empleo (ERE) por despedir a 37 trabajadores de una de sus plantas en Granollers (Vallès Oriental). La compañía pertenece al grupo indio Sanjeev desde el 2012 y miembros del comité de empresa aseguran al ARA que su plan es trasladar la maquinaria y la actividad de esta fábrica catalana –tiene dos ubicadas en la misma avenida– en el país asiático. Esta decisión supone echar a una tercera parte de la plantilla de Grudiva, que nació hace 70 años en Granollers.

En la justificación para salir adelante el ERE, la compañía alega razones organizativas, productivas y económicas. El 90% de la facturación de Grudiva, explican las mismas fuentes, proviene del fabricante líder de tractores y maquinaria agraria estadounidense John Deere. Concretamente, los empleados afectados por los despidos se dedican a producir los engranajes necesarios para que estos vehículos funcionen. La sospecha de los sindicatos, pues, es que el grupo estadounidense –que este año ha presentado un expediente de regulación temporal de empleo (ERTO) en su filial española en Madrid– quiere aprovechar que Sanjeev también tiene fábricas en la India para trasladar su producción y así rebajar los costes laborales y operativos.

"Ya se han llevado las máquinas hacia allí", denuncian desde el comité de empresa. El ERE se registró el 7 de noviembre y desde entonces ha empezado a correr el reloj para negociar durante el período de consultas de un mes. Los sindicatos –CGT y CCOO– quieren conseguir un acuerdo para reducir al máximo los despidos, recolocar trabajadores en otras divisiones del grupo y garantizar planes de prejubilación para que las salidas sean "cuanto menos traumáticas mejor". "Hay gente que entró en la fábrica como aprendiz y lleva aquí más de 30 años", remarcan estas voces.

Cierre en dos tiempos

Pero lo que más teme al comité de empresa es que esta primera tanda de despidos sea la antesala de un cierre en dos tiempos de las fábricas vallesanas de Grudiva, que ha registrado bajadas en la facturación en los últimos años. El ARA se ha puesto en contacto con la compañía para recoger su versión, pero de momento no ha obtenido respuesta. "Nos da miedo que ya se hayan vendido también las demás máquinas. Hemos pedido un plan de viabilidad, pero ¿quién nos dice que no están pensando en hacer lo mismo?", se preguntan los representantes de la plantilla, que también se han reunido con el Ayuntamiento de Granollers para trasladarles sus preocupaciones y conseguir su apoyo.

Este es el segundo ERE industrial para el municipio vallesano en tan sólo una semana, después de que la japonesa Hi-Lex anunciara el cierre de su planta de componentes para el sector de la automoción. Esta decisión supondrá el despido de 67 trabajadores.