La OCDE reclama a España que desincentive las prejubilaciones
El organismo mejora la previsión de crecimiento del PIB al 5,9% para el 2021 y el 6,3% para el 2022
BarcelonaLas últimas palabras del secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, para España al frente de esta institución han sido muy claras: hay que velar por que la recuperación no ponga en peligro el futuro de sus finanzas públicas. En la presentación este jueves de su estudio económico, el organismo ha animado al gobierno de Pedro Sánchez a aplicar medidas para desincentivar la jubilación anticipada e intentar que los españoles alarguen su vida laboral, con incentivos a las empresas que mantengan los empleados más mayores.
Con esta recomendación, la OCDE ha recuperado una sugerencia habitual para España en el ámbito de las pensiones: vincular la edad legal de jubilación con la esperanza de vida de los españoles. "Si estamos viviendo más tiempo, hay una necesidad de prolongar la vida laboral", ha razonado Gurría durante la rueda de prensa compartida con la vicepresidenta segunda del gobierno español y ministra de Economía, Nadia Calviño. La edad de jubilación real es actualmente de 61,7 años mientras que la media de la OCDE es de 64,6 años.
Las sugerencias de la OCDE para dar un respiro a la hucha de las pensiones incluyen otra vía: aumentar los años a la hora de calcular la pensión que corresponde a los trabajadores españoles. "Hay retos que ya existían, pero la pandemia los ha hecho todavía más severos", ha destacado Gurría, que pasará el relevo al ex ministro australiano de finanzas, Mathias Cormann, a partir del 1 de junio.
El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, propuso recientemente que el cómputo de una pensión tuviera en cuenta los 35 últimos años cotizados en lugar de los 25 años actuales. Esto haría que, de media, la mayoría de pensiones fueran más bajas porque al inicio de la carrera laboral los trabajadores acostumbran a cobrar menos. De hecho, la propuesta provocó el rechazo de los sindicatos y de su socio de gobierno, Unidas Podemos. La OCDE, pues, avala el planteamiento de Escrivá, a pesar de que Gurría no ha entrado a valorar el número de años.
Aun así, la OCDE es más optimista que hace unos meses respecto a la recuperación de la economía española. El organismo ha mejorado en dos décimas sus perspectivas para el 2021. Así pues, para este año el repunte del PIB pasa del 5,7% al 5,9%. De hecho, a pesar de que se mantiene la incertidumbre, los pronósticos también son más positivos de cara al 2022, y el cálculo aumenta del 4,8% al 6,3%. Gurría ha atribuido este alza en las previsiones a la evolución de la campaña de vacunación y la concordancia de los planes de reformas enviados a Bruselas con las recomendaciones de la OCDE.
Reforma fiscal y más ayudas
El organismo propone a España que mantenga una política fiscal expansionista “hasta que la recuperación esté encarrilada” y apruebe nuevas ayudas directas. En materia de impuestos, Gurría también ha criticado la "distorsión" que genera la Comunidad de Madrid con el impuesto de sucesiones. A su vez, Calviño ha defendido que la respuesta económica de su ejecutivo a la pandemia ha sido "rápida y efectiva" y ha ayudado a mitigar los efectos más adversos de esta crisis.
En cuanto al mercado laboral, el estudio pide que España permita a las empresas adaptarse a las “cambiantes condiciones económicas” y mantener uno de los puntos polémicos de la reforma laboral: la prioridad de los convenios colectivos de empresa en detrimento de los sectoriales. De hecho, la OCDE pone énfasis especial en la importancia de garantizar la "flexibilidad", otra de las principales bondades de la reforma. En este sentido, también considera que el Estado tendría que optar por un contrato único en el cual la indemnización aumente en función de la antigüedad del trabajador.